Comida y faranduleo
De Santa Ana a Chueca. Y de su bar-bar favorito al Prado. Es la ruta de este actor que llega con la obra ¡®?Sin paga, nadie paga!¡¯, de Dar¨ªo Fo, el pr¨®ximo jueves 20 al teatro Infanta Isabel
1. El Rastro. Lo primero que me llam¨® la atenci¨®n cuando preparaba mi llegada a Madrid. Me fascinaba poder comprar ropa de muerto a un precio irrisorio. Muy cerca est¨¢ mi bar favorito, Cantespino (Paseo de Acacias 12), un bar-bar de boquerones, patatas fritas y un men¨² apa?ado. Cercano a mi casa y al que no me importa acudir solo.
2. Museo del Prado. Suena t¨®pico pero cuando conoc¨ª a alguien que viv¨ªa en Madrid, con 10, 12 a?os, me flip¨® que pudiera ver los cuadros de Goya cuando quisiera. Con uno suyo supe qu¨¦ era un fusilamiento y fue tal el impacto que copi¨¦ ese cuadro muchas veces al ¨®leo. Cu¨¢nta tonter¨ªa se le podr¨ªa quitar a la gente sobre el centralismo si apreciara esa pinacoteca.
3. Edificio de Telef¨®nica. Hace m¨¢s de 30 a?os sal¨ª del Metro, otra cosa fascinante para un gaditano, por la Red de San Luis y mi amigo me pidi¨® que mirara para arriba y vi este edificio. Sent¨ª que estaba en Nueva York y que me hab¨ªa convertido en un cosmopolita. Luego he pasado mil veces en mis d¨ªas de crooner y desparrame en el Ya?sta (Valverde, 10) donde tocaba con Los toreros muertos.
4. Retiro. Paseando a mi perro Moco lo conoc¨ª de pe a pa. Iba con una novia a la que sacaba de los after-hours con la excusa de ver la luz a trav¨¦s de las hojas. Una de mis partes favoritas son unas ruinas, cerca de Alcal¨¢, que escalaba por las noches. Cerca est¨¢ el restaurante Dassa Bassa (Villalar, 7) donde de vez en cuando me homenajeo.
5. Calle Pez. Viv¨ª en una pensi¨®n que ya no existe y trabaj¨¦ de c¨®mico con Pedro en Damajuana, hoy un todo a cien. Me gusta pasar a saludar a Casto, gerente del bar Palentino y una instituci¨®n. Y est¨¢ el Alfil, el off Broadway castizo. Y en San Andr¨¦s, la Aurora donde actuaban Wyoming y Reverendo.
Un gaditano en Madrid
Pablo Carbonell (C¨¢diz, 1962) es humorista, actor, cantante (solo o con Toreros muertos)... y hasta reportero en ¡®Caiga quien Caiga¡¯. Entre sus trabajos como actor, ¡®Hospital Central¡¯ y ha dirigido una pel¨ªcula, ¡®At¨²n y chocolate¡¯.
6. Plaza Dos de Mayo. Cuando las hordas de jipis acud¨ªamos a Madrid en trenes sin billete era nuestro destino. Pas¨¢bamos mucha hambre y un d¨ªa un hombre que cocinaba cangrejos de r¨ªo en un gran perol¨®n en medio de la calle nos invit¨® a ese manjar. Era el due?o del Bo?ar (Cruz Verde, 16) y este es mi agradecimiento 30 a?os despu¨¦s.
7. Calle Preciados. Actuaba all¨ª con Pedro Reyes haciendo mimo-hablado. La ¨²ltima vez que fui solo me llev¨® la polic¨ªa argumentando que mientras la gente me miraba los carteristas hac¨ªan su agosto. Yo iba porque no ten¨ªa para desayunar... Ahora vuelvo a comer al De Mar¨ªa, regentado por Rafael con quien me encanta conversar.
8. Santa Ana. Cuando quedo con alguien extranjero o a quien voy a conocer elijo la cervecer¨ªa Santa Ana. Es como una entrada de Madrid. Cerca est¨¢ el restaurante Come Prima y los Ideal, el ¨²nico cine al que voy sin mirar la cartelera. O me meto en Clamores. M¨¢s tarde puedo caer por el Negro (Ventura de la Vega), un bar frecuentado por faranduleros y donde ponen a los Eels, mi banda favorita actual.
9. De V¨¢zquez de Mella a Chueca. Me dejo caer por el Cock (Reina, 16) porque puedo hablar sin romperme la garganta. Si quiero comer algo voy al Mercado de San Ant¨®n y visito a mi amigo Patxi. Paso siempre por Puturr¨² de Foie y tambi¨¦n salgo con alg¨²n producto en lata de su empresa, Katealde.
10. Plaza de Oriente. Cerca est¨¢ La buena Vida (Vergara, 10) donde me encanta ir a que Jes¨²s Trueba me recomiende qu¨¦ tengo que leer. Las guitarras las compro en Musical Opera (Carlos III, 1).
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.