Andaluc¨ªa cuestiona el estudio de EE UU sobre la calidad del aceite de oliva espa?ol

No es la primera vez que el aceite de oliva espa?ol es demonizado fuera de las fronteras nacionales. Pero probablemente nunca hab¨ªa escocido tanto como el informe de la agencia estadounidense Rabo AgFocus que carga contra las calidades del oro l¨ªquido espa?ol y habla de fraudes en el etiquetado con la connivencia de las autoridades locales. Andaluc¨ªa, con m¨¢s del 80% de la producci¨®n nacional, se ha rebelado contra estas acusaciones y la Junta ya ha anunciado que presentar¨¢ alegaciones al citado informe por el da?o a la imagen del aceite andaluz.

Estados Unidos es el principal pa¨ªs importador de aceite de oliva, con una cuota del 38%. Es, por tanto, uno de los mercados emergentes de los productores andaluces, por lo que el informe de Rabo AgFocus, que toma como argumentos un estudio de la Universidad de California, pone trabas a las ventas en el gigante americano en un momento en el que el crecimiento de las exportaciones (por encima de las 800.000 toneladas el ¨²ltimo a?o) hab¨ªa aliviado las rentas de los olivareros.

¡°El informe no tiene ning¨²n rigor cient¨ªfico, es aut¨¦nticamente demoledor y falso en muchos t¨¦rminos y desde la Consejer¨ªa de Agricultura lo estamos analizando con detenimiento y actuaremos en consecuencia¡±, indica Ana Mar¨ªa Romero, directora general de Calidad e Industrias Agroalimentarias, que anuncia que la Junta presentar¨¢ alegaciones ante unas afirmaciones que, seg¨²n dice, echan por tierra el ¡°esfuerzo inmenso en los ¨²ltimos a?os por la modernizaci¨®n de las instalaciones y por la mejora de la calidad¡± del sector ole¨ªcola. Tambi¨¦n la Interprofesional del Aceite de Oliva ha pedido una rectificaci¨®n de la agencia estadounidense y pide una protesta diplom¨¢tica del Gobierno de la naci¨®n. El secretario regional de la Uni¨®n de Peque?os Agricultores (UPA), Agust¨ªn Rodr¨ªguez, habla de ¡°terrorismo comercial¡±. Rosa Va?¨®, directora comercial de Castillo de Canena, una aceitera jiennense que tiene en Estados Unidos su mayor crecimiento, abunda en esta tesis: ¡°Hay muchos intereses econ¨®micos y comerciales, cada vez son m¨¢s pa¨ªses compitiendo y por eso acuden a estrategias que a veces rayan en generalizaciones y afirmaciones que al final pasan facturas un poco irresponsables¡±. Va?¨® alerta de que las dudas sobre el aceite espa?ol pueden favorecer a terceros pa¨ªses, como Chile o Argentina.

Y es que hace tiempo que los pa¨ªses donde m¨¢s crece el consumo han adoptado estrategias para frenar la ofensiva exportadora de aceite comunitario, especialmente espa?ol e italiano, a trav¨¦s de medidas arancelarias o desprestigiando su calidad frente al aceite propio. Es el caso, por ejemplo, de Estados Unidos, donde con un consumo de algo m¨¢s de 260.000 toneladas su producci¨®n se eleva a solo 6.000 toneladas. La directora general de Calidad de la Junta apunta que los estadounidenses aspiran a un autoconsumo de aceite de oliva del 5% para el a?o 2017. O el caso de Australia que, con una demanda de 40.000 toneladas que duplica su producci¨®n, tambi¨¦n inici¨® una espiral proteccionista contra los aceites comunitarios.

Pero, ?hay alguna base que justifique los ataques a la calidad del aceite espa?ol? ?ngela L¨®pez de S¨¢, directora ejecutiva de la Agencia Espa?ola de Seguridad Alimentaria y Nutrici¨®n, es contundente al respecto: ¡°Los planes nacionales de control est¨¢n fijados por la UE y, por supuesto, el aceite cumple con todos los requisitos regulatorios y de ausencia de contaminantes¡±. El aceite de oliva tiene aprobada en la UE una serie de alegaciones de tipo nutricional y de salud por los beneficios que comporta, recuerda L¨®pez. El informe dice que buena parte de las partidas que llegan a Estados Unidos contienen aceite viejo o adulterado con otras grasas vegetales refinadas mucho m¨¢s baratas.