Cifuentes pide cambios legales para ¡°modular¡± el derecho de manifestaci¨®n

No soy yo, es la ley, vino a responder el pasado viernes la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, a las veladas acusaciones de Ana Botella de permitir "demasiadas" manifestaciones en la capital. Hoy, Cifuentes ha reiterado que la ley es "muy permisiva y amplia" con el derecho de reuni¨®n y manifestaci¨®n y ha ido un paso m¨¢s all¨¢ en el debate sobre los l¨ªmites del derecho a protestar abierto por el Movimiento 15-M y reabierto por los recientes intentos de rodear el Congreso. Ha planeado "modular" la ley para "racionalizar el uso del espacio p¨²blico". La delegada ha matizado que no se tratar¨ªa de cambiar la Constituci¨®n sino de revisar la Ley Org¨¢nica que regula este derecho, no para "recortarlo" sino para ampliar el margen de maniobra de las Administraciones para modificar recorridos y horarios.

En una entrevista en RNE, ha reiterado que Madrid es "una ciudad complicada porque las manifestaciones son permanentes y su cifra desmesurada", opini¨®n que sustenta en un dato: en lo que llevamos de a?o se han producido "casi 2.200 concentraciones y manifestaciones" en la capital ¡ªBotella las cifr¨® en 2.732 el viernes. En todo 2011, fueron 1.380, seg¨²n los datos de la alcaldesa¡ª. "El tema de las movilizaciones es una cuesti¨®n puntual que viene dada por el momento pol¨ªtico y propiciado porque hay grupos que tratan de conseguir en la calle lo que no han conseguido en las urnas", ha argumentado, culpando a los socialistas sin nombrarlos del aumento de las protestas en las calles.

Aunque ha recordado que el derecho de manifestaci¨®n es constitucional "y no se necesita autorizaci¨®n previa" sino una comunicaci¨®n a la Delegaci¨®n, apuesta por compatibilizarlo con el derecho que tiene el resto de la poblaci¨®n "a poder estar en una ciudad que sea habitable". "Significa poder circular con tranquilidad, que no haya incidentes, disturbios, que no haya problemas de orden p¨²blico. "Es mi objetivo y trato de conseguirlo", ha agregado.

En este sentido, Cifuentes defiende un cambio legislativo, aunque no ha detallado c¨®mo se realizar¨ªa. "Lo que quiero es abrir un debate porque cualquier modificaci¨®n tiene que ser adoptada por un amplio consenso. El derecho de manifestaci¨®n lo recoge la Constituci¨®n es su art¨ªculo 21 y no creo que haya que cambiar la Constituci¨®n. Este derecho tiene que seguir siendo siempre en todo caso un derecho constitucional. Estamos en una sociedad democr¨¢tica y los derechos de los ciudadanos no se pueden recortar", ha matizado.

Sin embargo, considera que el derecho de reuni¨®n hay que "modularlo" porque la Ley Org¨¢nica que lo recoge, de 1983, "tiene muchos a?os". "Habr¨ªa que modificarla, no para recortar derechos, pero s¨ª para racionalizar el uso del espacio p¨²blico. No puede ser que en un mismo d¨ªa en Madrid haya 10 manifestaciones en la misma zona. Los comerciantes y vecinos del centro est¨¢n desesperados con toda la raz¨®n", ha dicho. La delegada ha apuntado que la reforma deber¨ªa dar a la Administraci¨®n "cierto margen para modificar las horas y cambiar lugares para compatibilizar el derecho de manifestaci¨®n, que no hay que restringirlo en absoluto, sino para garantizar el derecho de los ciudadanos a no estar en una ciudad que en ocasiones es inhabitable".

"La ley es muy permisiva y amplia con el derecho de manifestaci¨®n y cuando la Delegaci¨®n ha intentado en diversas ocasiones no prohibir sino modular este derecho cambiando itinerarios o de d¨ªa una manifestaci¨®n porque cre¨ªamos que pod¨ªa suponer un peligro de orden p¨²blico, sistem¨¢ticamente el Tribunal Superior de Justicia de Madrid siempre ha fallado en nuestra contra", ha recordado. En marzo, en v¨ªsperas de la huelga general, Cifuentes recibi¨® tres varapalos consecutivos de este tribunal. "Lo que dice la ley es que solo se puede prohibir o modificar una manifestaci¨®n cuando existan razones fundadas de alteraci¨®n del orden p¨²blico con peligro para bienes o personas, que yo he apreciado en algunas ocasiones y en todas ellas los tribunales nos han quitado la raz¨®n", ha proseguido.

Cifuentes ha lamentado que lo ¨²nico que pueda hacer contra, por ejemplo, los cortes de tr¨¢fico que, en protesta los recortes de Mariano Rajoy a los sueldos de los funcionarios, protagonizan todos los viernes "grupos de liberados sindicales que trabajan en los ministerios que van cortando de manera indiscriminada las calles" sea "identificarlos y sancionarlos administrativamente".

La delegada ha admitido que el grueso de las manifestaciones de estos meses han sido pac¨ªficas y ha vuelto a avalar la actuaci¨®n de la polic¨ªa el 25-S. "Muchas de las actuaciones que hace la Polic¨ªa Nacional son para proteger el derecho de la manifestaci¨®n, no est¨¢ para reprimir derechos", ha defendido a los agentes, acusados de desmesura en su respuesta a los manifestantes.

Esta petici¨®n de Cifuentes de modificar la ley respecto al derecho a protestar se suma a la ofensiva lanzada el pasado mes de abril por el ministro del Interior, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, que plante¨® una reforma para endurecer las penas por desobediencia y resistencia a la autoridad que castigar¨¢ el vandalismo callejero igual que la kale borroka.