CiU alienta la guerra del comercio

Si se conceden pocas treguas en la batalla por el control del comercio, menos habr¨¢ en plena precampa?a electoral. El Gobierno catal¨¢n lo demostr¨® ayer durante su Consell Executiu, en el que aprob¨® un decreto ley para intentar blindar su pol¨ªtica comercial de la supuesta invasi¨®n de competencias llegadas de Madrid.

El presidente Artur Mas no solo intenta aplacar el real decreto aprobado en julio por el Ministerio de Econom¨ªa, que ampl¨ªa el calendario de apertura en festivos y los horarios comerciales; tambi¨¦n saca la cabeza para demostrar a la parroquia del peque?o comercio, tradicional caladero de votos de CiU, que se est¨¢ moviendo en defensa de sus intereses. Y por si alg¨²n operador tiene dudas sobre qu¨¦ decreto es el que manda, el estatal o el auton¨®mico, el portavoz del Gobierno catal¨¢n, Francesc Homs, se limit¨® a blandir una advertencia: ¡°Los inspectores de la Generalitat no tendr¨¢n dudas sobre qu¨¦ normativa aplicar¡±.

Lo cierto, no obstante, es que ninguna de las dos Administraciones da su brazo a torcer. Madrid se arroga las competencias en materia de comercio ampar¨¢ndose en la Constituci¨®n y Catalu?a hace lo propio en virtud del Estatuto. Ajenas a ese debate, las grandes patronales que representan el comercio de proximidad celebraron el paso dado ayer. Incluso desde UGT aplaud¨ªan la decisi¨®n, pese a detectar ¡°cierto tinte electoralista¡± en la maniobra. Anged, la patronal de las grandes superficies, de momento calla, la misma opci¨®n por la que optaron dos de sus socios, Carrefour y Alcampo, los primeros hipermercados que decidieron aplicar el decreto estatal al prolongar su horario semanal hasta las 78 horas.

Eso es lo que quiere atajar la Generalitat. En el fondo, el decreto aprobado ayer no hace m¨¢s que recoger la normativa que ya reg¨ªa en Catalu?a antes de la ¨²ltima convulsi¨®n liberalizadora del Gabinete de Mariano Rajoy: limita a ocho festivos anuales en los que el comercio podr¨¢ abrir ¡ªcontra los 10 decretados por el Estado¡ª y a 72 horas semanales de apertura, frente a 90 fijadas por Madrid.

La Generalitat limita a 72 horas de apertura semanal y un m¨¢ximo

El decreto aprobado ayer incluye algunas medidas que la Generalitat ya ten¨ªa perfiladas para incluir en la nueva ley comercial, paralizada por el adelanto electoral. Una de ellas es una excepci¨®n para que los establecimientos comerciales de menos de 300 metros cuadrados y especializados en ocio y cultura que no pertenezcan a ning¨²n gran grupo puedan abrir en festivo. Esa excepci¨®n pretende dar libertad a las tiendas de los museos.

Asimismo, entre las excepciones, el Gobierno establece que cuando coincidan dos o m¨¢s festivos consecutivos ser¨¢ obligatorio establecer uno de ellos como jornada de apertura autorizada. Los ¨²nicos festivos en los que se impiden las aperturas son el domingo y el lunes de Pascua, el 1 de mayo, el 24 de junio, el 11 de septiembre y el 25 y el 26 de diciembre.

Fuentes del Departamento de Empresa aseguraron ayer que el decreto pretende ¡°garantizar la seguridad jur¨ªdica¡± para aquellos operadores instalados en Catalu?a, despu¨¦s de la nueva norma impulsada desde la Secretar¨ªa de Estado de Comercio.

En ese sentido, Francesc Homs se?al¨® que ya el Estatuto de 1979 atribu¨ªa el comercio y sus horarios al Gobierno catal¨¢n como ¡°competencia exclusiva¡±. Por el contrario, el Ministerio de Econom¨ªa argumenta que la Constituci¨®n da al Estado el mandato exclusivo sobre las bases y la coordinaci¨®n de la planificaci¨®n general de la actividad econ¨®mica, incluida la regulaci¨®n b¨¢sica en materia de horarios comerciales.

La Generalitat cree

El Tribunal Constitucional (TC) acabar¨¢ dirimiendo sobre esas divergencias si la Generalitat presenta, finalmente, recurso de inconstitucionalidad por el real decreto estatal del mes de julio. El Consejo de Garant¨ªas advirti¨® de ¡°invasi¨®n de competencias¡± y abri¨® las puertas a esa v¨ªa, que, de momento, se intenta negociar por la v¨ªa de la comisi¨®n bilateral Estado-Generalitat.

El Consell Executiu aprob¨® su contradecreto el mismo d¨ªa que la Confederaci¨®n de Comercio de Catalu?a presentaba un informe en el que solicitaba a los partidos pol¨ªticos medidas urgentes para reactivar la econom¨ªa e incentivar el consumo. Dicho de otra forma, acabar de una vez con la sangr¨ªa que afecta al sector, que en los nueve primeros meses del a?o ha destruido 31.500 empleos y el 0,43% de sus establecimientos.

Sin embargo, ni el peque?o comercio ni CiU consideran que las medidas liberalizadoras propugnadas por el Gobierno central incentivar¨¢n un nuevo marco que facilite esa recuperaci¨®n, como s¨ª defienden los grupos de la gran distribuci¨®n y el PP.