Esta vez as¨ª
En un Razzmatazz que no se llen¨®, Mika ofreci¨® un concierto divertid¨ªsimo, bailable y de sonido ajustado
Ni proximidad, ni calor del p¨²blico, ni dimensiones humanas ni zarandajas: a Mika le van mejor los espacios reducidos porque su carisma no da para llenar los grandes. O al menos eso se puede deducir de las dos actuaciones que el cantante de origen liban¨¦s ha ofrecido en Barcelona. La primera, hace un par de a?os, le situ¨® en un Sant Jordi que pese al escenario atravesado ten¨ªa la imponencia propia de una sala descomunal. Era cuando Mika apuntaba a sucesor de Zeus, Dioniso, Apolo y Afrodita. Con muchas menos toneladas de carisma que Falete, Mika qued¨® empeque?ecido por la inconsistencia de su personaje situado en un ¨¢mbito enorme. Pareci¨® entonces m¨¢s trivial y banal o, mejor dicho, su trivialidad y banalidad pudo ser percibida como lastre. Dos a?os m¨¢s tarde la cosa ha cambiado.
La cosa, que no ¨¦l. En un Razzmatazz que no se llen¨®, Mika ofreci¨® un concierto divertid¨ªsimo, bailable y de sonido ajustado, una celebraci¨®n de la alegr¨ªa y desenvoltura. Es cierto que su carisma, bastante justo, es superior al de otros artistas, pero no pudo dejarse de pensar en qu¨¦ ser¨ªa de Mika si explotase mejor las coreograf¨ªas, bailase con m¨¢s soltura, supiese mover los hombros y no caminase por escena como un ajetreado funcionario de aduanas. Ser¨ªa casi irresistible. Es m¨¢s su m¨²sica, pop bailable desenfadado, lleno de falsetes, orientaci¨®n disco light con bases de retirada house en algunos fraseos de teclado ¨C¡°Celebrate¡±, ¡°Elle me dit¡±-, melod¨ªas adhesivas y escasas aspiraciones pide a gritos a¨²n m¨¢s desenvoltura que la mostrada por Mika, artista que siempre parece estar venciendo una timidez propia del chico bueno del barrio que jam¨¢s pens¨® alcanzar¨ªa p¨²blica notoriedad.
Y, debe de repetirse, no es que no conecte con el p¨²blico ¨Chabl¨® en catal¨¢n y en castellano, mostr¨® aplaudido sentido com¨²n al criticar El hormiguero, programa de televisi¨®n en el que se sinti¨® como un obispo en el Pach¨¢, cant¨® en castellano con todo su coro y banda un estribillo adaptado de ¡°Love When I¡¯m Drunk¡± y sonri¨® porque s¨ª-, es que con una voz tan buena como la suya, con un punto de recuerdo a Paul Heaton, un repertorio tan cachondo, un coro tan divertido en la onda de los usados por Flaming Lips ¨Cen este caso ataviados con t¨²nicas blancas con topos verdes- deber¨ªa arrasar. Y ¡°s¨®lo¡± gusta. Pero en fin, que este ¡°podr¨ªa ser¡± no empa?e una noche la mar de divertida que arranc¨® con ¡°Relax¡±, cerr¨® con ¡°We Are Golden¡± y no olvid¨® ¡°Origin of Love¡± o ¡°Stuck In The Middle¡± entre muchas otras. Ah, y conste que como artista no esclerotizado por la rutina, el repertorio cambia casi cada noche de orden. Hay veces que un lanzamiento desproporcionado empa?a lo que visto en otras circunstancias se muestra mucho m¨¢s certero. Caso de Mika.
Mika. Razzamatazz. 20 Noviembre 2012
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.