¡°10 a?os ya, c¨®mo pasa el tiempo...¡±
La Casa Encendida celebra su d¨¦cimo aniversario con m¨²sica, arte y talleres infantiles ¡°No es el momento de entrar en p¨¢nico¡±, dice su director
Brincos, bailes, correteos, sones africanos y ni?os invadiendo la sala. La Casa Encendida amaneci¨® ayer, en el d¨ªa de su d¨¦cimo cumplea?os, con los m¨¢s peque?os y la m¨²sica como protagonistas. La ma?ana fue toda suya, pero la tarde la conquistaron j¨®venes y mayores, amantes del arte y mel¨®manos de pura raza. El men¨² para celebrar la reci¨¦n cumplida d¨¦cada lleg¨® con platos fuertes para todos los gustos.
El movimiento en el La Casa Encendida fue m¨¢s abundante de lo habitual. Las salas se llenaron desde primera hora de la ma?ana, desde la terraza hasta el patio, escaleras incluidas. Al principio, solo se ve¨ªan familias. Ni?os que tiraban de la mano de sus padres gui¨¢ndolos al huerto ecol¨®gico o al igl¨² construido por el colectivo Basurama con bolsas de pl¨¢stico recicladas. Corr¨ªan a la biblioteca o estimulaban su creatividad con esculturas hechas de chucher¨ªas y palos. Sin embargo, despu¨¦s de comer, el p¨²blico cambi¨® de perfil. Estos esperaban ver los minidocumentales de Urban TV; la exposici¨®n de la francesa Louise Bourgeois, inaugurada especialmente para celebrar el aniversario; y los conciertos de DJ espa?ol Astroboyz y del alem¨¢n Pantha du Prince, colof¨®n de la fiesta de cumplea?os.
El centro atraviesa momentos de incertidumbre por la crisis de Bankia
¡°Esta es una casa para todos los p¨²blicos¡±, asegur¨® Jos¨¦ Guirao, director de La Casa Encendida. ¡°Una casa para todos¡±, puntualiz¨® sentado en la cafeter¨ªa. ¡°Diez a?os ya¡ ?c¨®mo pasa el tiempo!¡±, le dijo el camarero al tiempo que le dejaba un caf¨¦ y un trocito de pastel de chocolate en la mesa. ¡°Ha pasado volando¡±, le respondi¨® Guirao. Ech¨® la vista atr¨¢s y record¨® que el proyecto se puso en marcha en 2002 sin tener muy claro hacia donde se dirig¨ªa, sin saber si al p¨²blico le interesar¨ªa lo que iban a ofrecer.
¡°M¨ªranos ahora, nos hemos sabido adaptar sin salirnos de nuestros pilares b¨¢sicos: educaci¨®n, medio ambiente, cultura y solidaridad¡±, afirm¨® con voz calmada y con un deje andaluz muy discreto que desvelaba sus or¨ªgenes almerienses. Y lo cierto es que La Casa Encendida se ha convertido en un referente cultural en la ciudad. Un lugar en el que se han organizado m¨¢s de 12.000 actividades de todo tipo en los ¨²ltimos 10 a?os, desde coloquios hasta concursos, talleres o exposiciones de fotograf¨ªa y pintura. Un sitio que, adem¨¢s, ha recibido entre sus muros a grandes nombres de la cultura, tanto nacionales como internacionales.
La tarde de cumplea?os trajo consigo, para placer de los mel¨®manos, la emisi¨®n del programa Sonideros de Radio 3, que se hizo en directo desde el centro frente a la atenta mirada de un p¨²blico que bailaba discretamente al son de m¨²sica funki y pop. Las actividades se fueron sucediendo. Hasta el director de La Casa tuvo su momento de gloria presentando una videoplaylist que intentaba romper alg¨²n que otro mito del cine.
Y, simult¨¢neamente, lleg¨® el final de la fiesta. Los platos estaban preparados y los j¨®venes expectantes. La m¨²sica house estaba a punto de comenzar y el baile, mucho menos infantil que el de la ma?ana, comenz¨® a fluir entre los asistentes. No parec¨ªa el mismo patio que hab¨ªa albergado a decenas de ni?os horas antes. Tras el calentamiento inicial de Astroboyz lleg¨® el turno de Phanta du Prince. ¡°Es la primera vez que act¨²a en Madrid¡±, asegura Guirao. Muchos esperaban ese momento, pero no todos pudieron conseguir una de las entradas gratuitas para el concierto. ¡°Se han quedado fuera entre 200 y 300 personas¡±, asegur¨® la azafata que las facilitaba.
Con estos conciertos, La Casa Encendida pone un punto y final a una d¨¦cada. Un punto y seguido, en realidad. Un continuar¨¢, esperan, al menos una d¨¦cada m¨¢s. ¡°Es un momento de incertidumbre¡±, reconoci¨® Guirao. ¡°Pero no es el momento de entrar en p¨¢nico, sino todo lo contrario¡±, a?ad¨ªa, en referencia a la fragilidad de su impulsor inicial, Caja Madrid, ahora Bankia.
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