Econom¨ªa de una ambulancia
Una media de 1.000 euros de diferencia ha decantado el concurso de servicio sanitario urgente en beneficio de Ambuib¨¦rica frente a lo ofertado por la DYA
"No todo es dinero¡±. Jos¨¦ Luis Artola, presidente de la DYA, resume con la frase el malestar de la asociaci¨®n. El concurso abierto por el Gobierno vasco para la licitaci¨®n de la Red del Transporte Sanitario de Urgencia ha dejado a la DYA (Detente y Ayuda) sin ninguno de los 11 lotes a los que optaba, de un total de 29 ofertados. La asociaci¨®n y la Cruz Roja ¡ªque han recurrido la resoluci¨®n¡ª han sido las grandes perjudicadas del primer concurso de estas caracter¨ªsticas convocado en Euskadi. El factor econ¨®mico ha sido la clave por la que Sanidad ha concedido 17 de los 29 puestos del concurso a la empresa Ambuib¨¦rica S.L., con sede en Valladolid. La totalidad de la convocatoria se ha licitado por 10,8 millones de euros, de los que el grueso, 9,2, corresponde a 2013, fecha l¨ªmite de la adjudicaci¨®n.
Si se resume todo al dinero, las ofertas presentadas por la asociaci¨®n y la firma castellano leonesa han estado en un pa?uelo de 1.000 euros de media sobre el costo del servicio al mes. La mayor diferencia entre las ofertas presentadas por una y otra candidata es de 1.567,25 euros, y se corresponde con las dos ambulancias en liza de Getxo. En el extremo opuesto, s¨®lo 641 euros diferencian las propuestas de las dos contrincantes sobre el veh¨ªculo a concurso de Barakaldo.
La asociaci¨®n lamenta que Sanidad no valore su car¨¢cter social
Una diferencia que, para la DYA, con 46 a?os de historia en Euskadi, y referente de la atenci¨®n sanitaria de urgencia, ¡ªmodelo entre otros del SAMUR de Madrid¡ª, no debiera haber sido suficiente para excluirle. Sanidad ha terminado por conceder gran parte de la red de transporte de ambulancias a Ambuib¨¦rica. ¡°Si se tienen en cuenta los otros criterios examinados, la DYA gana y, en algunos casos, a gran distancia¡± sostienen sus responsables.
La puntuaci¨®n obtenida por la asociaci¨®n es mayor en baremos como caracter¨ªsticas t¨¦cnicas y prestaciones de las ambulancias, tiempos de respuesta, ventajas en los veh¨ªculos y su equipamiento, o en la log¨ªstica. Frente a los apartados de antig¨¹edad de los veh¨ªculos o su plan de renovaci¨®n y mantenimiento, en los que la compa?¨ªa privada ha obtenido mayor nota.
M¨¢s de 40 a?os de ayuda
La asociaci¨®n de ayuda en carretera ech¨® a andar en 1966 con escasos medios humanos y nulos recursos econ¨®micos, y no fue hasta un a?o despu¨¦s cuando, gracias a las donaciones de dos empresas, Imosa y Firestone Hispania, se pudo hacer con sus dos primeras ambulancias para Bizkaia.
Fue entonces cuando las carreteras de la provincia y sus conductores empezaron a tener noticias de sus sacrificios. A veces, hasta de su propia vida, como le ocurri¨® a Fernando Jim¨¦nez Tejada, que falleci¨® atropellado en Txurdinaga el 11 de abril de 1971, despu¨¦s de ayudar a un autob¨²s a seguir la ruta hacia Par¨ªs. Para el a?o 1981, quince a?os despu¨¦s de su creaci¨®n, ya exist¨ªan delegaciones en Gipuzkoa, Navarra, Madrid, C¨¢ceres, Barcelona, El Ferrol, Zaragoza, C¨¢diz, Vigo, A Coru?a, M¨¢laga, Huesca, Girona, Granada, Salamanca y Sevilla. En 2006, la asociaci¨®n, una pieza ya insustituible en las carreteras espa?olas, cumpli¨® 40 a?os.
¡°La valoraci¨®n calidad-precio del concurso est¨¢ plenamente justificada; es incluso superior a la proporci¨®n que se da a la oferta t¨¦cnica en otros concursos de servicios sanitarios¡±, apunt¨® el pasado lunes el Departamento de Sanidad en un comunicado, texto al que se remiten sus responsables para ofrecer explicaciones sobre el proceso.
La consejer¨ªa record¨® la obligatoriedad de la administraci¨®n de sacar a concurso este servicio y reproch¨® a DYA y Cruz Roja que hubieran presentado ofertas econ¨®micas superiores a pesar de contar ¡°con patrocinios externos y otras formas de voluntariado¡±. Artola precisa que la asociaci¨®n que preside nunca ha denunciado irregularidades en el proceso y comparte y entiende que la administraci¨®n convoque un concurso p¨²blico para la licitaci¨®n del servicio.
El Gobierno vasco hizo p¨²blico el pliego de condiciones en junio y, a finales de noviembre resolvi¨®. Con la resoluci¨®n, el panorama asistencial en Euskadi cambia de forma dr¨¢stica, como ya lo hizo hace unos a?os en Gipuzkoa, donde este tipo de servicios lo ofertan compa?¨ªas privadas. El responsable de la DYA subraya que Bizkaia es el principal territorio afectado. Su asociaci¨®n se despide del transporte sanitario urgente en esta provincia y Cruz Roja queda relegada a un segundo plano.
El malestar de las dos asociaciones no se resume a una cuesti¨®n exclusivamente econ¨®mica. A la impotencia de saber que han obtenido mejores resultados en algunos puntos clave del concurso, se suma que no se haya valorado lo que se puede denominar el factor social. Es decir, el tejido social de voluntariado que han construido durante muchos a?os las dos instituciones.
Tampoco Sanidad ha sabido valorar, seg¨²n la DYA, aquellas labores que presta tanto la asociaci¨®n como la Cruz Roja y que son ¡°impagables¡±. Artola se refiere a los servicios que prestan, por ejemplo, con veh¨ªculos sociales para el traslado de ancianos, el acompa?amiento a los mismos, los cursos y charlas impartidos en colegios en materia de seguridad o las labores de protecci¨®n civil en coordinaci¨®n con el Departamento de Interior. ¡°Si una asociaci¨®n de padres organiza una colecta para recaudar dinero y piden una ambulancia... ahora ?qui¨¦n va a ir?¡±, se pregunta Artola.
El coraz¨®n del voluntariado
La DYA, creada en 1966 por el doctor Usparitza como una asociaci¨®n de ayuda en carretera, funciona con un modelo mixto, es decir, sus integrantes se dividen entre profesionales y voluntarios. Para el presidente de la DYA, Jos¨¦ Luis Artola, el correcto funcionamiento de una instituci¨®n de estas caracter¨ªsticas es que las personas que colaboran de forma activa en la misma est¨¦n ¡°organizadas, formadas y se sientan necesarias¡±.
Artola, voluntario de larga trayectoria, considera que la decisi¨®n del Gobierno vasco puede suponer un fuerte golpe para todos aquellos colaboradores de la DYA que emplean sus ratos libres en atender llamadas de emergencia, viajar en una ambulancia o acompa?ar a personas mayores.
¡°Es imprescindible que los voluntarios est¨¦n activos¡±, remarca, porque es la ¨²nica forma de que sean eficientes, de que sepan actuar, por ejemplo, ante alg¨²n tipo de cat¨¢strofe o servicio especial coordinado con el Departamento de Interior, como puede ser la evacuaci¨®n de personas en una inundaci¨®n.
La DYA cuenta en Euskadi con 100.000 socios, una cifra nada desde?able si se compara, por ejemplo, con esa religi¨®n pagana llamada f¨²tbol. Las personas que sustentan econ¨®micamente la instituci¨®n duplican los 48.000 socios que el Athletic se ha puesto como meta alcanzar una vez construido su nuevo estadio.
Independientemente del efecto pr¨¢ctico que se derive del resultado del concurso de licitaci¨®n de la Red de Transporte Sanitario Urgente, Artola puntualiza que la DYA seguir¨¢ trabajando, prestando sus servicios y estando en aquellos lugares en los que se le necesite.
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