Tetu¨¢n refleja la cara y la cruz de la loter¨ªa
A dos d¨ªas del sorteo, dos administraciones recuerdan que una sufri¨® un robo y otra dio el Gordo
Hace una semana que a Paloma Alonso Regadera, de 33 a?os, le cuesta conciliar el sue?o. A la propietaria de la administraci¨®n de loter¨ªa 427 de Madrid, que hasta hace dos meses estaba ubicada en el paseo de la Direcci¨®n, la inminencia de la Navidad le pone de los nervios. No es para menos. Hace exactamente un a?o que su administraci¨®n, La Regadera, como se la conoce en el barrio, salt¨® a la fama, y no precisamente por cumplir sue?os: un ladr¨®n con arma blanca rob¨® la recaudaci¨®n de varios d¨ªas, unos 40.000 euros.
El suceso fue el preludio de la mudanza, el pasado 29 de octubre, al intercambiador de plaza de Castilla, entre Tetu¨¢n, Chamart¨ªn y Fuencarral-El Pardo. Muy cerca de la actual ubicaci¨®n de La Regadera, en la calle Bravo Murillo, est¨¢ la administraci¨®n 146, que en 2009 distribuy¨® 330 millones de euros en el barrio. La loter¨ªa, en este caso, reparti¨® una de cal y una de arena en dos puntos muy pr¨®ximos del distrito de Tetu¨¢n.
Cae la venta pese a los buenos presagios
Un a?o m¨¢s, las colas frente a Do?a Manolita son un elemento del paisaje navide?o en Madrid. Pero la estampa enga?a. Las estimaciones oficiales indican que las ventas de loter¨ªa en la capital han descendido considerablemente en 2012. Seg¨²n datos del Bar¨®metro de Consumo del Ayuntamiento de Madrid, pese a que el 85% de los madrile?os comprar¨¢ loter¨ªa (un punto m¨¢s que el a?o pasado y ocho por encima de las cifras del inicio de la crisis), gastar¨¢n menos. El reparto es desigual: ocho de cada 10 dicen que jugar¨¢n la misma cantidad que el ¨²ltimo a?o, pero un 16% planea reducirla. La media que fijan las previsiones es de 81,4 euros por cabeza, un recorte del 15% respecto a lo presupuestado en 2011.
La situaci¨®n va acorde con la tendencia de apretarse el cintur¨®n. En estas fiestas, los madrile?os gastar¨¢n una media de 590 euros menos, un descenso del 4,8% respecto a 2011 que remite a cifras propias de 2004, seg¨²n la Federaci¨®n de Usuarios y Consumidores Independientes (FUCI). Desde las escuelas de negocios, como ESADE o la Confederaci¨®n Espa?ola de Comercio (CEC), la mayor¨ªa de estudios presentados coinciden en vaticinar una contracci¨®n del consumo.
Ante las estad¨ªsticas poco halag¨¹e?as no est¨¢ de m¨¢s recordar los buenos augurios: Madrid es la localidad que m¨¢s veces ha sido premiada con el Gordo. Hasta en 73 ocasiones. La ¨²ltima, en 2010, cay¨® en la capital, y en 2009 llovieron millones por toda la regi¨®n. En la clasificaci¨®n de ciudades m¨¢s afortunadas en el sorteo de Navidad, sigue Barcelona, con 38 Gordos, y Sevilla, con 15. Bien es cierto que Madrid era, es y sigue siendo la que m¨¢s n¨²meros vende.
Paloma Alonso Regadera explica que la salida del paseo de la Direcci¨®n vino motivada por la ca¨ªda de las ventas, y el robo fue la gota que colm¨® el vaso. Dentro del intercambiador y con muchas l¨ªneas de autob¨²s y metro, la recaudaci¨®n en ventanilla de La Regadera ha aumentado de forma considerable. Pero lo que Paloma denomina venta ¡°de calle¡± se ha resentido, tal y como est¨¢ pasando en la mayor¨ªa de las administraciones de loter¨ªa: ¡°Aqu¨ª hay mucho tr¨¢nsito y la gente se para a jugar, pero algunos de los abonados se hacen de rogar y no pagan sus d¨¦cimos hasta un d¨ªa antes del sorteo, cuando los billetes los tienen en su poder desde julio¡±. Esta joven se confiesa abrumada por la responsabilidad que implica su actual trabajo: ¡°Tu jefe es Hacienda, y de cada euro que recaudas le tienes que dar su parte. No se fijan si al final cobras o no el dinero de los clientes¡±. Y sentencia: ¡°Este a?o la recaudaci¨®n ser¨¢ un 20% menor¡±.
La Regadera se llama as¨ª en honor al apellido de la madre de Paloma, una mujer que se inici¨® en el negocio hace unos 25 a?os: ¡°Falleci¨® hace tres y nos leg¨® el nombre de la administraci¨®n, que ahora regento yo con el apoyo de mi padre¡±, explica esta joven dicharachera que colg¨® su traje de azafata de Air Europa para continuar con el negocio familiar. ¡°Ahora entiendo por qu¨¦ mi madre siempre se quejaba de unos y de otros y, sin embargo, era incapaz de desconectar del negocio¡±.
Saliendo del intercambiador de plaza de Castilla, en el 201 de Bravo Murillo, se encuentra la administraci¨®n que hace tres a?os motiv¨® una lluvia de 330 millones de euros en el barrio. Muchos de los portadores de d¨¦cimos premiados eran inmigrantes, puesto que en el distrito de Tetu¨¢n vive un importante colectivo de dominicanos. Ana y Mercedes, las dos dependientas de esta administraci¨®n, sonr¨ªen todo el tiempo. Y eso que en estos d¨ªas su trabajo no est¨¢ exento de cierta cantidad de locura. Colas de clientes atra¨ªdos por los millones repartidos hace tres a?os y las continuas llamadas de tel¨¦fono de compradores de fuera de Madrid hacen que no tengan un minuto de respiro. Por la tarde el p¨²blico es m¨¢s joven y suele buscar un n¨²mero concreto: ¡°A veces nos dicen que han so?ado con que les toca el que coincide con su fecha de nacimiento¡±, relata Ana.
Adem¨¢s, el trabajo aumenta m¨¢s, si cabe, durante estos ¨²ltimos d¨ªas. Corre el rumor de que el Gordo de Navidad de 2009, el 78.294, se vendi¨® precisamente en la recta final: ¡°Realmente no fue as¨ª¡±, explica Ana, ¡°pero hay gente que est¨¢ esperando para comprar los billetes que nos queden¡±. La dependienta confiesa que est¨¢ abonada a un n¨²mero de su administraci¨®n. En ese momento un cliente interrumpe la conversaci¨®n: ¡°No ponga el n¨²mero en el peri¨®dico, Ana, que lo gafa y seguro que entonces no toca¡±. Por eso la cifra en cuesti¨®n no se transcribe aqu¨ª. Aunque por si acaso, para los muy curiosos, acababa en 6.
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