Barber¨¢ elabora un c¨®digo ¨¦tico que escatima el acceso a la informaci¨®n

Valencia tendr¨¢ un C¨®digo de Buenas Pr¨¢cticas hecho a rega?adientes. El gobierno local entreg¨® ayer a la oposici¨®n un borrador que deja a su arbitrio la informaci¨®n a los ciudadanos sobre la gesti¨®n municipal. El Consistorio no informar¨¢ cuando un vecino pregunte varias veces sobre un mismo asunto o cuando varias ¡°act¨²en de forma coordinada¡±. El texto queda abierto a las enmiendas de la oposici¨®n. Una de las ausencias es que las sugerencias que llegan a trav¨¦s de la web se contabilizan pero no se tramitan.

El resto del proyecto de c¨®digo garantiza a los ciudadanos el uso de las dos lenguas oficiales en un ayuntamiento donde el castellano es hegem¨®nico, exige a los funcionarios ir debidamente identificados ante los ciudadanos y mejora el control sobre las contratas municipales. No se crea un registro de regalos, pero el borrador si dice expresamente que se ¡°rechazar¨¢n regalos que vayan m¨¢s all¨¢ de los usos habituales¡±. Aunque, seg¨²n la alcalde, un bolso de Vuitton ¡°es un regalo habitual¡±.

El gobierno local del PP presenta el borrador al rebufo de la ley de Transparencia que se negocia en el Congreso de los Diputados y despu¨¦s de a?os de ocupar los puestos de cola en el ranking de la ONG Transparencia Internacional.

La alcaldesa opina que un bolso de Vuitton es ¡°un regalo habitual¡±

El borrador de Valencia es m¨¢s un compendio de lo que ya funciona, que un texto decididamente innovador. Seg¨²n Vicente Igual, concejal delegado de Administraci¨®n, el c¨®digo se adaptar¨¢ a la ley estatal cuando se apruebe y a continuaci¨®n entrar¨¢ en vigor.

En Espa?a, otros ayuntamientos tomaron mucho antes la iniciativa. El de Madrid, por ejemplo, regul¨® antes y mejor estas pr¨¢cticas. La capital de Espa?a dispone del c¨®digo de buenas pr¨¢cticas desde 2008 y lo que advierte es que si se niega informaci¨®n se justificar¨¢. La Federaci¨®n Espa?ola de Municipios y Provincias elabor¨® un c¨®digo de buen gobierno en 2009 que ha trascendido sin entusiasmo en los consistorios espa?oles. Otras ciudades como Roquetas de Mar, en Almer¨ªa, o C¨®rdoba, adem¨¢s de regular la recepci¨®n de obsequios, ha ampliado la obligaci¨®n de rendir cuentas.

Los grupos de la oposici¨®n valoraron la presentaci¨®n de un borrador cuyo contenido no les gust¨®. ¡°Queremos que se elimine el p¨¢rrafo que restringe las peticiones de informaci¨®n¡±, manifest¨® la concejal socialista Isabel Dolz tras denunciar el aumento el ¨²ltimo mes en un 10% de las quejas ciudadanas. Pilar Soriano, de Comprom¨ªs, lament¨® que el c¨®digo llegue tan tarde y que no vaya a exposici¨®n p¨²blica para que los ciudadanos hagan sus aportaciones. ¡°Si el PP se cree el reglamento de participaci¨®n, ?por qu¨¦ no lo aplica en este caso?¡±, agreg¨®.

Amadeu Sanchis, de EU, apost¨® tambi¨¦n por que el tejido asociativo de Valencia se pronuncie sobre el borrador y eleve sus propuestas al pleno a trav¨¦s de los grupos municipales. ¡°Nos parece una limitaci¨®n de la que podr¨ªa abusar el Ayuntamiento¡±, dijo Sanchis de la restricci¨®n prevista por el gobierno local.

El concejal Vicente Igual replic¨® que hay ciudadanos que preguntan ¡°15, 20 o 40 veces por la misma cuesti¨®n¡± lo que supone un despilfarro de medios p¨²blicos en tiempos de austeridad. Igual insisti¨® en que dispone de varias sentencias en las que el propio juez habla de uso abusivo.

En la Comisi¨®n de Quejas y Sugerencias Ciudadanas la oposici¨®n denunci¨® el aumento de las reclamaciones por discriminaci¨®n ling¨ªstica en el Ayuntamiento, hasta el 6%.