Muchos recortes y subida de impuestos

El 5 de enero de 2012 no fue un buen d¨ªa para los valencianos. La crisis, intensificada por la dependencia del ladrillo y los impagos de la Generalitat a los proveedores, ya hab¨ªa vuelto irrespirable el ambiente y disparado los despidos, pero en el pleno del Consell de ese d¨ªa de la cabalgata de los Reyes Magos se abri¨® la puerta de la catarata con el decreto ley 1/2012, de 5 de enero, de medidas urgentes para la reducci¨®n del d¨¦ficit en la Comunidad Valenciana. Era la madre de todos los recortes.

Con este paquete de ¡°medidas muy duras¡±, como lo calific¨® el vicepresidente Jos¨¦ Ciscar en su presentaci¨®n, la Generalitat calculaba un ajuste de 1.057 millones de euros: 238 se obtendr¨ªan del incremento de los ingresos por la subida de impuestos, 440 del recorte del gasto sanitario y 379 de la reducci¨®n del gasto de personal. Sobre la hoja de c¨¢lculo Excel parec¨ªa solo c¨®mputo, pero el impacto social era un drama que no tardar¨ªa a manifestarse.

El tijeretazo contemplaba una restructuraci¨®n de la Administraci¨®n que implicaba despidos. Hasta ahora, el ajuste de plantillas se ha llevado por delante a 1.656 trabajadores, aparte de los inminentes 1.198 que saldr¨¢n con el expediente de regulaci¨®n de empleo de R¨¤dio Televisi¨® Valenciana (RTVV). El plan del Consell es reducir en unos 3.500 los empleados p¨²blicos vinculados a la Generalitat. El decreto, adem¨¢s, se cebaba en el sueldo de los funcionarios, reduci¨¦ndolo en 271 millones de euros anuales, siendo los m¨¢s afectados, por su repercusi¨®n econ¨®mica, los de sanidad y educaci¨®n. Este ajuste se a?ad¨ªa a la reducci¨®n lineal vigente del 5% del salario del Gobierno central.

Los recortes tambi¨¦n incid¨ªan en la calidad de los servicios. En el ¨¢mbito sanitario, aparte de la privatizaci¨®n en marcha de la gesti¨®n no asistencial del sistema auton¨®mico de salud, se prescind¨ªa de las operaciones de cataratas en plan de choque, se reduc¨ªa la farmacia hospitalaria (incluso revisando historiales de los pacientes), se concentraban servicios y se simplificaba el men¨² en los hospitales. Pero tambi¨¦n se ha implantado un copago farmac¨¦utico de un 60% para la poblaci¨®n activa (aunque en funci¨®n de la renta puede quedar en el 50% o el 40%) y un 10% para los jubilados (con unos l¨ªmites mensuales tambi¨¦n en funci¨®n de la renta).

El decreto ley del 5 de enero de 2012 desencaden¨® una catarata de ajustes

En el ¨¢mbito educativo, no ser¨ªa mejor. Los 130.000 estudiantes universitarios del sistema p¨²blico ya han experimentado el aumento del 33% de las tasas de matr¨ªcula fijado por la Generalitat (unos 350 euros m¨¢s que en 2011), adem¨¢s de sufrir las consecuencias del recorte de las becas del Ministerio de Educaci¨®n. Las cinco universidades valencianas tambi¨¦n han visto contra¨ªdos sus ingresos (unos 120 millones este a?o, con una deuda hist¨®rica que ronda los 900 desde que la Generalitat dej¨® de pagar en 2011).

El hachazo presupuestario ha tenido graves consecuencias en Primaria y Secundaria. El despido de profesores interinos, as¨ª como la congelaci¨®n de las oposiciones, ha tra¨ªdo masificaci¨®n a las aulas. Pero donde m¨¢s se ha visibilizado ha sido en el cambio de criterios de las ayudas sociales de la Generalitat para comedor y transporte, con muchos afectados. El caos en el transporte fue la t¨®nica del inicio de este curso, en el que miles de alumnos que viven en urbanizaciones y municipios se quedaron sin asistir a clase por el retraso en la difusi¨®n de los listados de los beneficiarios, que se han reducido en un 75% respecto al curso anterior. El criterio de la distancia entre el domicilio familiar y el colegio, deducida en l¨ªnea recta (tres kil¨®metros), tambi¨¦n ha propiciado rocambolescos casos como el de los alumnos de Montserrat, cuyas madres han tenido que posar en un calendario er¨®tico para financiar el autob¨²s. Los centros, adem¨¢s, est¨¢n siendo muy afectados por los retrasos en el pago de los gastos corrientes, lo que ha llevado a algunos cortes de suministro el¨¦ctrico. Asimismo, la limpieza, a cargo de los municipios, se ha convertido en un problema a causa de las estrecheces que atraviesan los Ayuntamientos.

En la subida de impuestos aprobada por el Consell se introdujo una nueva escala auton¨®mica del IRPF para las rentas altas (de 120.000 a 170.000 euros al a?o), pero unos meses despu¨¦s el Gobierno central elev¨® del 15% al 21% la retenci¨®n por rendimientos de actividades profesionales para todos. El Gobierno valenciano tambi¨¦n suprimi¨® las deducciones auton¨®micas a partir de 24.000 euros. Por ejemplo, la de vivienda habitual. Asimismo, se increment¨® el impuesto de la gasolina y el gas¨®leo (de 1,2 a 3,6 c¨¦ntimos por litro), excepto para agricultura, transporte y pesca. Para el resto, el gas¨®leo pasaba de estar gravado con 0,012 euros a 0,048 (un incremento del 400%), con lo que desde entonces se convirti¨® en el segundo m¨¢s caro de Espa?a por detr¨¢s de Madrid.

Tambi¨¦n aument¨® a partir de junio el tipo general del impuesto sobre transmisiones patrimoniales onerosas y actos jur¨ªdicos documentados, que el Consell pretend¨ªa bonificar al 100% en 2012 y 2013 y que es una tasa obligatoria en la adquisici¨®n de viviendas de segunda mano. Pas¨® del 7% al 8%, lo que ha encarecido la hipoteca media en la Comunidad Valenciana en unos 900 euros.

Otra de las medidas anunciadas tras aquel pleno de enero de 2012 fue un paquete de impuestos medioambientales, que no repercute sobre la basura dom¨¦stica porque los municipios ya lo cobran, pero s¨ª sobre las empresas que producen residuos no peligrosos (entre tres y cinco euros por tonelada), peligrosos (entre siete y diez euros por tonelada) o escombros de construcci¨®n (0,5 euros por metro c¨²bico). Pero ese impuesto tambi¨¦n se ha extendido a la agricultura y la ganader¨ªa en modo de tasa sobre los tr¨¢mites de la Autorizaci¨®n Ambiental Integrada. Esta tarifa grava en 1.500 euros las explotaciones ganaderas nuevas o la ampliaci¨®n de las ya existentes, as¨ª como cada renovaci¨®n de esta autorizaci¨®n, por la que se pagar¨¢n 500 euros.

Las medidas paralelas del Gobierno central aumentan la carga

La Generalitat ha introducido tambi¨¦n una fuerte subida sobre el impuesto que pagan los hogares y empresas por el uso del agua corriente. Los Presupuestos de este a?o recogen un aumento que va desde el 10,5% para el uso dom¨¦stico de los municipios de m¨¢s de 50.000 habitantes (con un fijo anual de 39,56 euros) hasta un 21,3% en las poblaciones de hasta 3.000 residentes (28,63 euros). La cuota de consumo por metro c¨²bico ha pasado de 0,234 euros a 0,284. Para las industrias, el canon de saneamiento ha aumentado un 12%.

En 2012, a los ciudadanos del ¨¢rea metropolitana de Valencia se les increment¨® en 94 euros la tasa de basuras (Tamer), que tambi¨¦n se incorpora al recibo del agua (recientemente se ha rebajado en unos 16 euros). Los domicilios con un consumo superior a 65 metros c¨²bicos este a?o pagar¨¢n 123 euros por las basuras, seg¨²n el c¨¢lculo de la Entidad Metropolitana de Tratamiento de Residuos. Por otra parte, el metro y el Tram, tras una subida en 2012, aumentan de nuevo su precio un 3% en el nuevo a?o.

El bolsillo de los valencianos tambi¨¦n se ha visto sacudido por las medidas que, paralelamente, que ha ido adoptando el Gobierno central, como en el caso del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), de cuya recaudaci¨®n se ocupan los Ayuntamientos. El 85% de los Ayuntamientos valencianos ha sufrido una subida entre un 4% y un 10%, en funci¨®n del a?o de actualizaci¨®n de sus catastros. Uno de los municipios m¨¢s afectados por la subida ha sido Valencia, que no hab¨ªa revisado su catastro desde 1997. El aumento, sobre una media de 300 euros por recibo, ha sido de unos 30 euros por vivienda. Lo mismo ha ocurrido en Alicante, Elche, Benidorm, Orihuela, Gandia, Cullera, Pe?¨ªscola, Vinar¨°s o Benicarl¨®. El Ayuntamiento de Valencia, adem¨¢s, ha reducido la bonificaci¨®n por el pago de impuestos domiciliados del 5% al 2%.

Adem¨¢s, el Gobierno central increment¨® el IVA general del 18% al 21%, incluso el IVA reducido, que pas¨® del 8% al 10%. Tambi¨¦n aplic¨® el tipo general a art¨ªculos que hasta agosto de 2012 hab¨ªan pertenecido al reducido, como la peluquer¨ªa, la est¨¦tica, los teatros, los espect¨¢culos o los servicios funerarios. Y no par¨® ah¨ª. En 2012 subi¨® la luz entre el 5% y el 7%, y el gas (5%) y los peajes (3,2%). Asimismo, ha retirado del cat¨¢logo de la Seguridad Social unos 300 f¨¢rmacos, ha introducido el copago en los de dispensaci¨®n hospitalaria y en complementos alimenticios, y tambi¨¦n en el transporte sanitario (cinco euros por viaje, que var¨ªan en funci¨®n de la renta o de la gravedad de cada caso) o en las pr¨®tesis.

Y el a?o empieza con un incremento del 3% en la factura el¨¦ctrica, un 2,4% en los peajes de las autopistas dependientes del Estado, un 3,5% en los trenes de cercan¨ªas y media distancia, un 6,3% las tasas aeroportuarias, un 2,95% en las tarifas de correos, y el 2% en el precio de la gasolina¡­ M¨¢s las sorpresas que pueda deparar el Consell.