El ¡®tasazo¡¯ y otras ocurrencias de Gallard¨®n
"La pol¨ªtica depredadora del Partido Popular durante este primer a?o de desgobierno, no tiene l¨ªmites"
La pol¨ªtica depredadora del Partido Popular durante este primer a?o de desgobierno, no tiene l¨ªmites, al desmantelamiento de servicios p¨²blicos tan b¨¢sicos para el ciudadano, como la sanidad publica y universal, o la ense?anza p¨²blica y gratuita, le ha tocado el turno ahora, a la Administraci¨®n de justicia, con la implantaci¨®n de las tasas judiciales que no es m¨¢s que el tiro de gracia directo a la l¨ªnea de flotaci¨®n del maltrecho sistema judicial, de la ciudadan¨ªa en general, y en particular de decenas de miles de abogados y procuradores.
La mayor¨ªa de compa?eros abogados y procuradores que conozco se han mostrado sorprendidos por la implantaci¨®n de las tasas, viniendo del se?or ministro Ruiz Gallard¨®n, al que pr¨¢cticamente todos consideraban persona ponderada, de corte centrista, incluso con ciertos tintes progresistas a pesar de militar en el PP. A m¨ª, no me ha sorprendido en absoluto, ni esta medida, ni otras que han llegado y que seguir¨¢n llegando a buen seguro de la mano de Gallard¨®n. ?Qu¨¦ otra cosa se podr¨ªa esperar del ministro de Justicia? No hay que olvidar que su padre, Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz Gallard¨®n, fue uno de los fundadores del Partido Popular, y su suegro Utrera Molina, falangista, y ministro de Franco.
Con esos antecedentes, era l¨®gico pensar que su ¡°ramalazo¡± autoritario ten¨ªa que salir m¨¢s pronto que tarde a la superficie, y lo ha hecho en el peor momento, cuando m¨¢s duele, y cuando m¨¢s esquilmada esta la ciudadan¨ªa.
Lo que no se entiende es que, siendo el ministro, miembro de la carrera fiscal en excedencia (fue n¨²mero dos de su promoci¨®n) y, por lo tanto, en teor¨ªa conocedor del mundo jur¨ªdico, piense que los males que aquejan a la administraci¨®n de justicia, pueden solucionarse con la implantaci¨®n de unas injustas tasas judiciales. Si de verdad cree que con esta medida se va a acabar con la exasperante lentitud de la justicia, su conocido colapso, o que esta medida coadyuvar¨¢ a ofrecer una justicia de mayor calidad, sencillamente es que es muy iluso.
Justificar tan dolorosa medida, pensando que la culpa de todo la tienen los ciudadanos por tener la costumbre de acudir a los Tribunales a solucionar sus diferencias y pedir justicia, colaps¨¢ndola, es simplemente contribuir directamente a la destrucci¨®n del Estado de Derecho, e invitar a la mayor¨ªa de los ciudadanos de este pa¨ªs para que busquen otras soluciones ciertamente no tan pac¨ªficas para la soluci¨®n de sus conflictos.
Alega en su defensa el ministro para justificar su tan injusta medida, que con los recursos econ¨®micos obtenidos de las tasas judiciales, se podr¨¢ hacer frente al pago de la Justicia gratuita, y mejorar el sistema.
Es una falacia, hasta ahora la justicia se ha alimentado de los impuestos pagados por todos los espa?oles, es que ?acaso la implantaci¨®n de las tasas, va a tener como efecto inmediato una rebaja paralela en nuestros impuestos, ya que una parte importante del mantenimiento de la justicia lo va a ser a trav¨¦s de las tasas? No.
Los ¨²nicos objetivos de la implantaci¨®n de las tasas, son dos, por una parte el m¨¢s evidente, el de recaudar, y seguir esquilmando al ciudadano medio espa?ol, y de otro y m¨¢s grave, de paso, limitar, cuando no impedir el libre acceso del ciudadano a la justicia, dejando sin contenido nuestro derecho fundamental reconocido en el art¨ªculo 24 de la Constituci¨®n que es el de obtener la tutela judicial efectiva.
En cuanto a que la implantaci¨®n de las tasas vaya a contribuir a la mejora del servicio de justicia gratuita como tambi¨¦n ha alegado el ministro, sinceramente lo dudo, como fiscal de carrera que es me deber¨ªa recordar que la justicia gratuita, existe, subsiste y persiste, gracias exclusivamente al esfuerzo de miles de abogados y procuradores de todas las edades, que de manera pr¨¢cticamente desinteresada, y altruista est¨¢n adscritos al turno de oficio, percibiendo unos honorarios absolutamente indignos por rid¨ªculos, y adem¨¢s con mucho retraso. Dos ejemplos que deber¨ªa conocer el ministro: los abogados de Valencia realizan sus servicios de guardia de 24 horas a cambio de 100 m¨ªseros euros, o la tramitaci¨®n completa de un procedimiento penal en todas sus fases, juicio incluido se paga a 120 euros de vell¨®n.
Dudo que las tasas se apliquen para dignificar los honorarios de los abogados y procuradores que prestan el servicio de justicia gratuita, y desde luego dudo mucho que sirva para que m¨¢s ciudadanos puedan acceder al derecho a la justicia gratuita. Eso s¨ª, el tasazo, ha tenido el efecto inmediato de poner en contra del Ministerio de Justicia a todos los agentes del sistema judicial, jueces, secretarios, asociaciones de fiscales, abogac¨ªa, procuradores, organizaciones de consumidores, funcionarios de la Administraci¨®n de Justicia, a todos.
Debo recordar, que el ministerio, haciendo gala de sus ¡°maneras democr¨¢ticas¡±, obvi¨®, e hizo caso omiso a todos los dict¨¢menes contrarios al decreto de implantaci¨®n de tasas, que fueron emitidos por el CGPJ, Consejo General de la Abogac¨ªa Espa?ola, y muchos otros.
Lamentablemente, ya llueve sobre mojado, no son solo las tasas judiciales, manifiestamente inconstitucionales, primero fue la reforma laboral, con el abaratamiento de los despidos, la perdida generalizada de los derechos de los trabajadores, reducci¨®n de las prestaciones de desempleo, y Fogasa, aumento del periodo de carencia para acceder a las prestaci¨®n m¨ªnima de jubilaci¨®n, etc. Y eso por no hablar de otras ¡°ocurrencias¡± como el estudio de tramitar las separaciones matrimoniales y divorcios de mutuo acuerdo ante notario, pagar si te casas por lo civil en un Juzgado, pagar por la expedici¨®n de certificaciones de nacimiento, defunci¨®n, o el m¨¢s peregrino de mantener en funcionamiento los juzgados (y con ello a todos los operadores jur¨ªdicos) durante el mes de agosto, y todas las tardes del a?o, etc., etc.
La cosa pinta mal, y se va a poner peor, cualquier d¨ªa a alguien del Ministerio de Justicia, se le ocurrir¨¢ la brillante idea de cobrar un euro a cada ciudadano que entre en un juzgado aunque vaya solo de visita, de trabajo, o como testigo por poner un ejemplo, tiempo al tiempo. Solo llevamos un a?o de legislatura, quedan tres que se van a hacer muy, muy largos, ahora me acuerdo de mi abuelo, honesto trabajador republicano cuando dec¨ªa aquello de ¡°estamos copados¡±, y as¨ª es si el Tribunal Constitucional no lo remedia.
Nota. Copado: cercar por sorpresa a alguien, cort¨¢ndole la retirada.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.