¡°?D¨®nde est¨¢ la otra caja fuerte?¡±
Unos ladrones sin identificar asaltan con violencia un chalet en Pals, zona que ya ha sido sacudida en las ¨²ltimas semanas con cap¨ªtulos similares
Acababa de terminar el telediario de la noche de una cadena francesa. La familia, dos jubilados belgas y su hijo de 18 a?os, descansaba en los sof¨¢s del sal¨®n cuando dos corpulentos ladrones, encapuchados y armados con una pistola y un arma para realizar descargas el¨¦ctricas, entraron en la vivienda, en Pals (Baix Empord¨¤). Los asaltantes ataron y amordazaron al matrimonio y al chico, al tiempo que se llevaron dinero y objetos de valor. Es el tercer robo violento que se produce en los ¨²ltimos seis d¨ªas en la comarca, la misma donde en noviembre falleci¨® durante un asalto en su casa el presidente de la patronal de Girona, Jordi Comas. Los Mossos d¡¯Esquadra buscan a los autores del robo.
Cronolog¨ªa de atracos
?20 de enero. Asalto violento al chal¨¦ de una familia belga en Pals protagonizado por dos hombres embozados.
? 19 de enero. Cuatro ladrones roban una lujosa casa en Platja d¡¯Aro y golpean al due?o.
? 16 de enero. Robo en un chal¨¦ de Sant Feliu de Gu¨ªxols. El due?o fue golpeado y atado.
?29 de noviembre. Tres ladrones asaltan una casa en Campllong y roc¨ªan a una madre y a su hija con gas¨®leo para lograr la combinaci¨®n de la caja fuerte.
?20 de noviembre. Jordi Comas, presidente de la patronal de Girona, muere en el atraco a su vivienda de Platja d¡¯Aro.
Los ladrones entraron con sigilo por la puerta principal, que no estaba cerrada con llave, cerca de las nueve de la noche. La vivienda, un chalet de dos plantas con piscina, no es de las m¨¢s lujosas de la urbanizaci¨®n, cercana a la playa y rodeada de pinos. Los asaltantes se abalanzaron sobre Oscar Labie, el padre, un antiguo bombero jubilado que se dedica a comerciar con antig¨¹edades. ¡°Cuando los vi, di un salto para esconderme detr¨¢s del sof¨¢¡±, explic¨® el hijo, J¨¦r?me, bastante tranquilo a pesar del susto. De nada sirvi¨®: los hombres colocaron a la madre, el padre y el chico boca abajo sobre el suelo y comenzaron a atosigarles. Quer¨ªan saber d¨®nde estaba la caja fuerte. ¡°Mientras uno nos vigilaba, el otro revolv¨ªa toda la casa¡±, cont¨® J¨¦r?me.
Este asalto ha aumentado la inquietud en la comarca, donde alcaldes y vecinos viven con preocupaci¨®n la oleada de robos en viviendas de los ¨²ltimos meses. Estos ¨²ltimos d¨ªas han sido especialmente malos. El mi¨¦rcoles, unos ladrones entraron en un chalet de Sant Feliu de Gu¨ªxols y ataron y amordazaron al due?o. Y este s¨¢bado cuatro personas asaltaron otra vivienda en una lujosa urbanizaci¨®n de Platja d¡¯Aro y atacaron al propietario. El consejero de Interior de la Generalitat, Ramon Espadal¨¦, se declar¨® ayer ¡°dispuesto¡± a aumentar los agentes y los controles para contener los robos en una entrevista en TV3. Interior ya aument¨® la vigilancia tras la muerte de Comas. Pero hasta el momento no se han producido detenciones relacionadas con el suceso y los robos violentos han continuado.
¡°Nos dijeron que ven¨ªan a por dinero y oro¡±, explic¨® la mujer, R¨¦gine Duflot
Los ladrones de la vivienda de Pals ten¨ªan claro su objetivo. ¡°Nos dijeron que ven¨ªan a por dinero y oro¡±, explic¨® la mujer, R¨¦gine Duflot, sentada en el mismo sof¨¢ que cuando comenz¨® el asalto. No dudaron en usar la violencia: al padre le aplicaron dos descargas para conseguir saber d¨®nde estaba la caja fuerte, cuyo contenido (unos 2.000 euros y una colecci¨®n de monedas de plata valoradas en unos 10.000 euros, seg¨²n la familia) les decepcion¨®. ¡°?Esto es de risa!¡±, grito uno de los asaltantes al ver lo que hab¨ªa dentro del cofre. ¡°Entonces empezaron a gritarme: ?D¨®nde est¨¢ la otra caja fuerte, d¨®nde est¨¢?¡±, rememor¨® Oscar.
La familia cree que los ladrones, que hablaban franc¨¦s y eran de procedencia subsahariana, vieron al padre manejar dinero en el mercado al que acude cada fin de semana en Perpi?¨¢n, cerca de la frontera francesa, y le siguieron en coche de vuelta hasta Pals. Ning¨²n vecino vio ni oy¨® nada: la zona, plagada de turistas en verano, est¨¢ ahora casi deshabitada. Solo merodean los hombres que recogen pi?as en los alrededores. Por las noches la iluminaci¨®n es muy escasa. ¡°Aqu¨ª muchas veces salimos y dejamos la puerta abierta¡±, explic¨® Silvia Frigola, vecina de la familia y concejala del PSC en la localidad.
Los asaltantes dejaron a R¨¦gine, Oscar y J¨¦r?me atados a la cama con cordones de zapato y cable telef¨®nico, amordazados con manoplas de ba?o y celof¨¢n. Al marido le dieron un cabezazo. La mujer y el chico consiguieron desatarse y saltar por la ventana. ¡°No he podido dormir casi nada¡±, reconoci¨® la mujer, con el susto todav¨ªa en el cuerpo.
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