El plan es resistir
Tras ocho meses de gobierno, PSOE e IU intentan conservar el modelo andaluz de servicios p¨²blicos pese a los recortes que han aplicado. La coalici¨®n se presenta como alternativa a la pol¨ªtica de privatizaciones
Se vendieron como la cara b de los recortes. Ser¨ªan el reverso de las pol¨ªticas que aplica el PP desde La Moncloa y en las comunidades que controla. Pero, tras ocho meses de rodaje en la Junta de Andaluc¨ªa, ?la uni¨®n de PSOE e IU es una verdadera alternativa a las pol¨ªticas de Mariano Rajoy? ¡°La percepci¨®n que tienen los andaluces sobre el Gobierno de coalici¨®n de PSOE e IU es m¨¢s la de resistencia que la de una alternativa¡±, opina Eduardo Moyano, director del Instituto de Estudios Sociales Avanzados (IESA). Para llegar a esta conclusi¨®n, parte del Bar¨®metro de Opini¨®n P¨²blica de Andaluc¨ªa elaborado por el instituto que dirige; se trata de la ¨²ltima gran encuesta de opini¨®n (3.675 entrevistas) que se ha realizado en la comunidad.
De resistencia tambi¨¦n habla Manuel Pastrana, secretario general de UGT en Andaluc¨ªa. ¡°Hay que resistir frente a la avalancha que pretende implantar un nuevo modelo¡±, apunta el l¨ªder ugetista. Pastrana lamenta los embates privatizadores del PP contra la salud y la educaci¨®n p¨²blicas, las dos grandes ¨¢reas que gestionan las comunidades aut¨®nomas.
Las aulas sortean el aumento de alumnos, pero no la p¨¦rdida de interinos
El caso de los 4.500 profesores interinos que no han sido contratados por la Consejer¨ªa de Educaci¨®n este curso refleja bien la relaci¨®n entre la Junta y el Gobierno central.
El Ejecutivo de Mariano Rajoy aprob¨® en abril de 2012 un real decreto-ley de medidas de ajuste para el sistema educativo, que gestionan las comunidades. En este pol¨¦mico decreto se contemplaba la posibilidad de aumentar considerablemente el n¨²mero de alumnos en las aulas y el horario lectivo de los profesores de los institutos p¨²blicos. La Junta se opuso p¨²blicamente y present¨® un recurso en el Tribunal Constitucional contra esta norma en julio. Pero los meses transcurrieron y lleg¨® la hora de dise?ar las plantillas para el nuevo curso. La consejer¨ªa no aplic¨® el aumento generalizado del n¨²mero de alumnos en las aulas, algo que era voluntario, lo que ha supuesto que 3.373 docentes mantengan su empleo. Sin embargo, s¨ª tuvo que incrementar el horario lectivo de los profesores de instituto. Como consecuencia, este curso arranc¨® con 4.524 docentes menos en los centros p¨²blicos de la comunidad, lo que supone un descenso del 4,6% respecto a 2011. Tras a?os de crecimiento continuado de la plantilla, se ha retrocedido a niveles de 2007.
¡°La Junta de Andaluc¨ªa no ha tomado ninguna medida propia para desprenderse de un solo profesor¡±, argument¨® la Consejer¨ªa de Educaci¨®n. Sin embargo, desde el colectivo de interinos afectados y desde algunos sindicatos se pidi¨® a la Junta que contratara de nuevo a esos docentes y buscara alternativas. Pero, de fondo, vuelve a estar el problema de la financiaci¨®n. El Gobierno central ha eliminado o recortado la mayor¨ªa de programas educativos que financiaba conjuntamente con las autonom¨ªas.
En el caso de las tasas universitarias, el Ejecutivo de Rajoy legisl¨® para aumentar lo que pagan los alumnos a partir de la segunda matr¨ªcula. Sin embargo, las comunidades ten¨ªan margen para no subir el precio de la primera matr¨ªcula, algo por lo que ha optado el Gobierno andaluz, que solo ha aplicado el incremento del IPC.
Entre las Administraciones central y andaluza tambi¨¦n hay diferencias m¨¢s ideol¨®gicas en el campo de la ense?anza. La Junta ha rechazado la pol¨¦mica reforma educativa que est¨¢ elaborando el ministro Jos¨¦ Ignacio Wert.
Y la consejer¨ªa ha utilizado el margen legal que tiene para marcar diferencias. As¨ª ha ocurrido en Educaci¨®n para la Ciudadan¨ªa. Wert pretende eliminar la asignatura a la que se oponen los sectores m¨¢s conservadores de la Iglesia. Lo incluye en su proyecto de reforma, que tardar¨¢ al menos un curso en poder aplicarse. Mientras tanto, el ministro retir¨® las referencias m¨¢s pol¨¦micas de la asignatura. La Junta las ha recuperado empleando el margen que tiene.
En el caso de los colegios concertados que solo admiten a chicos o chicas ha ocurrido lo mismo. El Gobierno central legisla para proteger su financiaci¨®n mientras la Junta est¨¢ dispuesta a retirar los conciertos este a?o.
¡°Los andaluces volver¨ªan a votar mayoritariamente al PSOE y a IU en caso de celebrarse elecciones, al ver que es la alternativa mejor de gobierno¡±, recuerda Moyano. Ser¨ªa algo as¨ª como elegir lo menos malo. Porque, seg¨²n este investigador, ¡°la sensaci¨®n que tienen los ciudadanos sobre la impotencia e incapacidad de los gobiernos de cualquier signo para solucionar la crisis econ¨®mica afecta tambi¨¦n a la valoraci¨®n negativa que recibe la coalici¨®n¡±.
El Gobierno de la comunidad m¨¢s poblada de Espa?a, como los del resto de autonom¨ªas, no ha sido capaz de atenuar el agujero de la crisis desde la izquierda. Lo m¨¢s grave: los 1.442.600 desempleados que, seg¨²n la ¨²ltima Encuesta de Poblaci¨®n Activa, hay en Andaluc¨ªa. La tasa de paro est¨¢ en el 35,86%, casi diez puntos por encima de la media nacional. Es la tasa m¨¢s alta de la serie hist¨®rica. Y la desastrosa situaci¨®n parece que tampoco mejorar¨¢ en 2013. Analistas Econ¨®micos, el servicio de estudios de Unicaja, prev¨¦ otro a?o horrible: una ca¨ªda del 1,6% del PIB regional y un desempleo del 36,6%.
El socialista Jos¨¦ Antonio Gri?¨¢n, el encargado de capitanear una salida distinta desde el sur, reconoce que la alternativa est¨¢ limitada por la ¡°crisis¡±. Es decir, la actual situaci¨®n econ¨®mica hace ¡°muy dif¨ªcil que exista un margen para hacer grandes cosas, pero s¨ª para algunas diferencias¡±. Gri?¨¢n se fija, por ejemplo, en la sanidad: ¡°No hemos privatizado ning¨²n centro de atenci¨®n ni hospital¡±.
La resistencia ante las privatizaciones es el principal rasgo diferenciador de la coalici¨®n. As¨ª lo cree Luis ?ngel Hierro Recio, profesor de Econom¨ªa de la Universidad de Sevilla y exdiputado socialista. ¡°La alternativa ahora est¨¢ en hasta d¨®nde entra lo privado¡±, opina Hierro.
No piensa lo mismo Jos¨¦ Luis Sanz, secretario general del PP andaluz. ¡°El bipartito es un gobierno de escaparate, intentando hacer ver que no hacen recortes¡±, opina. PSOE e IU ¡°lejos de ser una alternativa son un lastre para Andaluc¨ªa¡±, a?ade.
La relaci¨®n entre la Junta y el Ejecutivo central, en manos del PP, ha sido de enfrentamiento en estos primeros meses de convivencia. Los recursos ante el Tribunal Constitucional han volado de Madrid a Sevilla, y viceversa. El Gobierno central ha intentado paralizar a trav¨¦s de esta f¨®rmula la subasta de f¨¢rmacos. A su vez, la Junta ha recurrido contra los recortes en sanidad y educaci¨®n.
Pese a los recursos, PSOE e IU han terminado aplicando algunas de las medidas contempladas en esos decretos de ajuste. ¡°En Andaluc¨ªa tambi¨¦n se han hecho recortes importantes a los empleados p¨²blicos¡±, afirma Jos¨¦ Luis Heredia, presidente andaluz del sindicato CSIF, quien, a pesar de todo, reconoce que la coalici¨®n defiende los sistemas p¨²blicos de salud, educaci¨®n y dependencia. ¡°Pero recortes, todos los del mundo¡±, a?ade Heredia.
Es una cuesti¨®n de cuartos, se excusan PSOE e IU. ¡°Andaluc¨ªa recibe la financiaci¨®n m¨¢s baja de Espa?a¡±, se queja el presidente de la Junta. ¡°El objetivo de d¨¦ficit que nos han impuesto a nosotros, y al resto de comunidades, es cinco veces superior al que tiene el Gobierno central¡±, a?ade el presidente de la Junta. ¡°Sobre los ingresos nos han dado bastantes palos. A todas las comunidades, pero a nosotros m¨¢s¡±, resume Gri?¨¢n, quien recuerda que tampoco se ha cumplido con la inversi¨®n estatal en funci¨®n de la poblaci¨®n contemplada en el Estatuto andaluz.
¡°El ¨²ltimo modelo de financiaci¨®n [aprobado durante el mandato del socialista Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero] fue malo para Andaluc¨ªa¡±, opina el economista Luis ?ngel Hierro. ¡°A Andaluc¨ªa no le vendr¨ªa mal uno nuevo¡±.
Este a?o toca revisarlo. El problema es el polarizado escenario en el que se negociar¨¢ el nuevo sistema de financiaci¨®n. Catalu?a, cuyo Gobierno ha iniciado un camino independentista tras el rechazo de Rajoy a concederle un pacto fiscal, es uno de los actores principales y est¨¢ acaparando gran parte de la agenda pol¨ªtica de los ¨²ltimos meses.
El modelo de financiaci¨®n y el debate territorial se han entreverado. Y el Estado auton¨®mico se cuestiona desde soberanismo y el recentralismo. ¡°No hay que construir un modelo muy distinto, sino cerrar el que tenemos desde hace 30 a?os¡±, opina Gri?¨¢n. Es decir, su propuesta federalista pasa por que en la Constituci¨®n se recojan y ¡°cierren¡± las competencias y su financiaci¨®n. Tambi¨¦n, convertir el Senado en una verdadera C¨¢mara territorial.
Andaluc¨ªa quiere ser una cu?a en el debate entre el centralismo y el independentismo para no quedarse atr¨¢s. Pero necesita que su voz se oiga. PSOE e IU buscan un 28-F 2.0. Quieren que desde la calle y a trav¨¦s del denominado pacto por Andaluc¨ªa se vuelva a reivindicar el papel de la comunidad de forma masiva. Gri?¨¢n ¡ªy su compa?ero de viaje Diego Valderas (IU), vicepresidente de la Junta¡ª insisten machaconamente en que el pacto tiene que ser ¡°de abajo a arriba¡±.
Ambas formaciones toman como referente las grandes manifestaciones de finales de 1977 en defensa de la autonom¨ªa plena de Andaluc¨ªa. Pero, hace 35 a?os, se respiraba un aire de esperanza por el comienzo de algo nuevo que los partidos supieron capitalizar. Ahora, el ambiente es de desesperaci¨®n ante un descarnado fin de ciclo. Y la desafecci¨®n ciudadana hacia los partidos es enorme, seg¨²n refleja el Bar¨®metro de Opini¨®n P¨²blica de Andaluc¨ªa. El reto est¨¢ en c¨®mo reconciliar la pol¨ªtica con la ciudadan¨ªa.
La sanidad p¨²blica como bandera para hacer oposici¨®n
La atenci¨®n de cada andaluz le costar¨¢ este a?o a la Consejer¨ªa de Salud una media de 985 euros. Es el presupuesto por persona y a?o que ha calculado para 2013 el departamento que dirige Mar¨ªa Jes¨²s Montero (PSOE), que, en una entrevista con este peri¨®dico, advert¨ªa hace unas semanas de que no hay compa?¨ªa privada que por ese dinero pueda ofrecer ¡°el nivel de prestaciones y de calidad¡± que ofrece Andaluc¨ªa. Desde una simple consulta con el m¨¦dico de familia a un trasplante de coraz¨®n. ?ste es pilar que define a la sanidad p¨²blica, un modelo solidario al que cada ciudadano contribuye en funci¨®n de su renta y sin cuestionarse si otro que aporte menos al sistema debe recibir las mismas prestaciones.
El Gobierno de coalici¨®n PSOE e IU ha hecho de la defensa de la sanidad p¨²blica un instrumento de oposici¨®n al Gobierno de Mariano Rajoy, alguna de cuyas medidas m¨¢s duras para afrontar la crisis est¨¢n relacionadas con la sanidad. La Junta ha recurrido ante el Tribunal Constitucional el real decreto ley de medidas urgentes en materia de Salud, mediante el que el Gobierno restringi¨® el derecho a recibir atenci¨®n sanitaria a distintos colectivos, entre ellos los inmigrantes irregulares. Mientras el Constitucional dirime sobre el asunto, Andaluc¨ªa ha seguido atendiendo a los sin papeles y mantiene activas alrededor de 40.000 tarjetas de Reconocimiento Temporal de Asistencia. El Gobierno y la Junta est¨¢n tambi¨¦n enfrentados en el Constitucional por la subasta de f¨¢rmacos puesta en marcha por el Ejecutivo andaluza y recurrida por el Estado. Pese a las trabas, la Junta se niega a renunciar a esta medida que se ha convertido en una declaraci¨®n de intenciones: en vez de buscar ingresos implantando nuevas tasas al usuario (como el euro por receta de Catalu?a y Madrid), Andaluc¨ªa ha optado por reducir el gasto a costa de los beneficios de la industria farmac¨¦utica.
Adem¨¢s de servir como contrapunto a las medidas del Ejecutivo de Rajoy, el Gobierno andaluz ha hecho de la defensa de la sanidad p¨²blica una bandera con la que distinguirse de las comunidades gobernadas por el PP. A su vez, los populares han iniciado una campa?a centrada en desacreditar la sanidad andaluza y desde hace semanas difunden datos y cifras, en muchos casos inciertas, con las que pretenden ilustrar que en Andaluc¨ªa se est¨¢n privatizando hospitales, como en Madrid, o cerrando guardias en zonas rurales, como en Castilla la Mancha.
La comunidad cuenta con 47 hospitales p¨²blicos y m¨¢s de 1.500 centros de salud. ¡°Todos son p¨²blicos, con gesti¨®n p¨²blica, personal p¨²blico y atenci¨®n p¨²blica¡±, repiten en las ¨²ltimas semanas los responsables auton¨®micos ante la confusi¨®n creada, que pasa por equiparar la privatizaci¨®n de hospitales y centros de salud de otras comunidades con las plazas concertadas por la Junta en 17 hospitales privados andaluces, a los que se destina alrededor del 3,7% del presupuesto de la consejer¨ªa.
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