El poeta Manuel Ruiz Amezcua lega su obra a la Biblioteca Nacional

¡°La suya es una poes¨ªa dolorida pero no sin esperanza. En los tiempos de hoy cuesta mucho trabajo mantener la cabeza levantada. Quiz¨¢ la poes¨ªa sea la mejor palanca. Una novela nunca da la sensaci¨®n de poder levantar el mundo. La poes¨ªa s¨ª. Como esta suya¡±. Jos¨¦ Saramago ensalzaba as¨ª, en febrero de 2005, la poes¨ªa de Manuel Ruiz Amezcua (J¨®dar, Ja¨¦n, 1952), en una de las m¨¢s de 500 cartas que ahora llegar¨¢n a la Biblioteca Nacional de Espa?a tras el acuerdo alcanzado para la donaci¨®n del archivo personal del poeta jiennense. ¡°Es un reconocimiento a mi poes¨ªa y una magn¨ªfica puerta para su difusi¨®n¡±, comenta Ruiz Amezcua, autor de m¨¢s de una veintena de libros de poes¨ªa y ensayos desde que en 1974 viera la luz su primer poemario, Humana ra¨ªz.

El inventario literario que Ruiz Amezcua va a legar a la Biblioteca Nacional se completa con un archivo documental y sonoro de sus apariciones en prensa, radio y televisi¨®n. ¡°Me hubiera gustado que los documentos se hubieran quedado en mi tierra, pero no he tenido la misma receptividad¡±, admite el autor jiennense, que sigue as¨ª los pasos de su paisano Antonio Mu?oz Molina.

Las casi cuatro d¨¦cadas de producci¨®n literaria de este poeta se recogen ahora en una quinta y aumentada edici¨®n de Singularidad en la poes¨ªa de Manuel Ruiz Amezcua (Comares), donde autores como Julio Caro Baroja, Fernando Fern¨¢n-G¨®mez, Paco Rabal, Antonio Lobo Antunes o Jos¨¦ Saramago glosan sobre la poes¨ªa comprometida e inconformista de Ruiz Amezcua. ¡°Estamos ante un autor independiente e insobornable, que ha decidido vivir al margen de esas pol¨ªticas po¨¦ticas, aunque no tanto como para no atreverse valientemente a denunciarlas, evidenciar lo que ¨¦l considera su falta de sustancia¡±, explica el coordinador del libro, el profesor Miguel ?ngel Garc¨ªa.

Adem¨¢s, toda la creaci¨®n po¨¦tica de Ruiz Amezcua se va a compilar muy pronto en una antolog¨ªa de la mano de Galaxia Gutenberg-C¨ªrculo de Lectores, un privilegio del que s¨®lo pueden presumir los grandes autores de referencia de la literatura espa?ola. Su ¨²ltima aportaci¨®n ha sido Baeza la nombrada, un breve poemario donde, de la mano del Club Unesco, Ruiz Amezcua hace una alegor¨ªa de la esperanza con versos dedicados a la ciudad Patrimonio Mundial y al arquitecto renacentista Andr¨¦s de Vandelvira. ¡°Mi verdad no est¨¢ en un sue?o,/ sino en much¨ªsimos sue?os¡±, escribe en uno de sus poemas.