El tr¨ªo que movi¨® los hilos en los ERE
La investigaci¨®n judicial sit¨²a al exsindicalista Juan Lanzas como cerebro del fraude junto al ex director general de Trabajo Javier Guerrero y el directivo de Vitalia Antonio Albarrac¨ªn
Juan Lanzas vest¨ªa trajes muy distintos, de corte m¨¢s o menos refinado. Para reunirse con los empresarios, con los abogados de grandes bufetes, con sus compa?eros sindicalistas... Sin embargo, el m¨¢s elegante ¡ªe ins¨®lito para sus maneras campechanas¡ª era el de representante de la Junta de Andaluc¨ªa. Lo visti¨® en diversas ocasiones, entre ellas un viaje a Marruecos en 2006 para abrir v¨ªas de negocio pagado por la sociedad municipal Mercasevilla. Ante las autoridades marroqu¨ªes, Lanzas demostr¨® su desparpajo habitual como delegado del mismo Gobierno aut¨®nomo al que ha usurpado supuestamente 13,4 millones en comisiones ilegales.
Lanzas visti¨® m¨¢s veces ese traje institucional, pero siempre como asesor de la Junta y acompa?ado de su gran amigo Javier Guerrero, ex director general de Trabajo y que reparti¨® a su antojo 721 millones entre 2001 y 2010. Ambos formaron un d¨²o con una red clientelar a su alrededor que extendi¨® la corrupci¨®n desde la Consejer¨ªa de Empleo hacia sindicalistas, empresarios y pol¨ªticos. Borrachos de poder y amparados por la hegemon¨ªa del PSOE en la comunidad ¡ªque les daba cierta sensaci¨®n de impunidad¡ª ahora sus m¨¦todos se antojan burdos ante los indicios de repetidos pagos con sobres de dinero y transferencias bancarias directas a las cuentas de Guerrero. Sin embargo, lo cierto es que Lanzas incluy¨® hasta 24 intrusos (prejubilados ajenos a las empresas beneficiadas) y reparti¨® prebendas a diestro y siniestro. Nadie denunci¨® nunca estas pr¨¢cticas irregulares. ¡°El mutismo absoluto es un rasgo caracter¨ªstico del c¨ªrculo personal de Lanzas¡±, ha destacado la juez Mercedes Alaya.
Tras estos dos amigos que viajaron con sus esposas juntos a Egipto y China, se dibuja la sombra de Antonio Albarrac¨ªn, exdirectivo de la consultora Vitalia y antiguo jefe de Lanzas. Desde Madrid, Albarrac¨ªn negociaba los porcentajes para la intermediaria catalana, para Lanzas, y para ¨¦l mismo. Su tajada se canaliz¨® a trav¨¦s de Permar 21, firma creada para facturar cobros ficticios por 3,1 millones a Vitalia.
Guerrero era un torrente. De car¨¢cter engatusador, siempre de buen humor, siempre piropeador, incansable juerguista. Al mismo tiempo, ten¨ªa una mano izquierda magistral para las negociaciones y ante los despidos pon¨ªa de acuerdo a las partes m¨¢s enfrentadas. La generosidad de Guerrero a la hora de comprometer fondos p¨²blicos para los ERE era proverbial, y se complementaba con el car¨¢cter jovial de Lanzas. Juntos lograban que las caras agrias se esfumaran. Frente a ambos, Albarrac¨ªn aparec¨ªa en las negociaciones solo cuando hab¨ªa desacuerdos en los m¨¢rgenes de beneficios. Destilaba un estilo avasallador y cierta prepotencia de solucionador de problemas como Mr. Lobo, el carism¨¢tico personaje de Pulp Fiction.
Lanzas incluy¨® hasta 24 intrusos (prejubilados ajenos a las empresas beneficiadas) y reparti¨® prebendas a diestro y siniestro
Investigaci¨®n iniciada en 2010
El papel esencial de Juan Lanzas en la trama es conocido desde el principio del caso. Ya en oto?o de 2010, hace dos a?os y medio, la polic¨ªa le defini¨® como "persona clave" y receptor de p¨®lizas como intruso. En enero de 2012 la juez subray¨® indicios de "efectivo enriquecimiento il¨ªcito" por parte de Guerrero y Lanzas, pero no adopt¨® medidas para evitar que este ¨²ltimo ocultara o desviara parte de su patrimonio. ?Ha sufrido un retraso esta investigaci¨®n? Desde que las pruebas sobre su inmensa fortuna se han acumulado y hasta su reciente detenci¨®n, se han instruido causas contra decenas de intrusos, la juez pele¨® contra la Junta para acceder a las actas de los Consejos de Gobierno, cuatro Consejer¨ªas han remitido miles de documentos y se ha analizado las alertas de la Intervenci¨®n General sobre el fondo de los ERE.
Los m¨¦todos para lucrarse de este tr¨ªo han sido destapados ahora por la instrucci¨®n judicial, que la semana pasada les envi¨® a prisi¨®n acompa?ados de los dos exjefes de Albarrac¨ªn y due?os de Vitalia, Eduardo Pascual y Mar¨ªa Vaqu¨¦ como responsables ¨²ltimos del presunto desfalco de 50 millones en sobrecomisiones de las p¨®lizas pagadas por la Junta.
?C¨®mo disimularon con tanta presteza este descomunal desv¨ªo de dinero? Lanzas, despu¨¦s de 23 a?os en UGT y 12 con cargos, ten¨ªa influencias y ¡°el ingrediente esencial¡± de su amistad con Guerrero para ofrecer a los empresarios la financiaci¨®n de un ERE a cargo de la Junta. A cambio de autorizar la subvenci¨®n, Guerrero recibi¨® una p¨®liza de 198.000 euros a nombre de su suegra, 249.000 euros en transferencias desde Vitalia y otros 303.588 euros ¡°de procedencia desconocida¡±, seg¨²n la Guardia Civil.
Guerrero daba las ¨®rdenes de pago desde su despacho, y en toda la Direcci¨®n General de Trabajo no exist¨ªa un solo funcionario. Todos eran personal de confianza. ¡°La gente no comprende c¨®mo pod¨ªa hacer todo eso Guerrero. Ni la juez. La respuesta es porque lo hac¨ªa solo¡±, relata un ex alto cargo de Empleo sobre los a?os m¨¢s turbios. Ciertos expedientes con ayudas millonarias constaban de un par de folios y carec¨ªan de la solicitud del empresario. ¡°En Idea [la agencia p¨²blica pagadora] no se daban cuenta de que no hab¨ªa nada detr¨¢s de cada orden¡±, a?ade la fuente sobre las ¨®rdenes de transferencia a las aseguradoras.
Mientras repart¨ªan las subvenciones, el dispendio en ¡°coca¨ªna, fiestas y copas¡± minaron la credibilidad de Guerrero y propiciaron su declive. En la trama estas debilidades eran comunes: ¡°Algar¨ªn Lamela [testaferro de Lanzas] persona con importante adicci¨®n al alcohol¡±, subraya Alaya.
El exdirector iba cada vez a menos reuniones y sus apariciones estaban a menudo mojadas en alcohol. Finalmente, en 2007 ingres¨® en el hospital para una cura de desintoxicaci¨®n, pero su cese no lleg¨® hasta abril de 2008 ?La raz¨®n de este retraso? Tras a?os de condescendencia, el exconsejero de Empleo Antonio Fern¨¢ndez hab¨ªa intentado sustituirle en 2007, pero se top¨® con la oposici¨®n del poderoso PSOE de Sevilla, dirigido por Jos¨¦ Antonio Viera, diputado socialista a Cortes y consejero de Empleo entre 2000 y 2004. A esta oposici¨®n frontal se sumaron los sindicatos, beneficiados sin l¨ªmite por Guerrero y con una influencia desconocida hasta entonces en la Junta. Tanto UGT como CC OO se alzaron en armas para evitar que Guerrero abandonara su puesto. Cuando perdieron la batalla, organizaron un gran homenaje a Guerrero.
La mujer de Lanzas tambi¨¦n estuvo familiarizada con la cultura de los sobres. Cada mes recog¨ªa entre 20 y 25.000 euros
Hace ya un a?o que la Guardia Civil advirti¨® del "papel esencial" de Viera en la concesi¨®n de ayudas de la Sierra Norte sevillana. Pero a¨²n no hay noticias de ese atestado policial. Viera es aforado, por lo que su imputaci¨®n supondr¨ªa elevar la investigaci¨®n al Tribunal Supremo.
Mientras que el exdirector autorizaba los ERE con comisiones de hasta un 29% para beneficio de Vitalia ¡ªla consultora Uniter tambi¨¦n pesc¨® sobrecomisiones, pero no tan jugosas¡ª Lanzas ide¨® un m¨¦todo para canalizar tantos beneficios millonarios. Informes de consultor¨ªa y p¨®lizas falsas a cambio de sobres con dinero, cheques (por dos millones) transferencias y testaferros para blanquear con cautela. La juez relata uno de estos episodios: ¡°Algar¨ªn sac¨® de la Caixa cuarenta y tantos mil euros, los llev¨® a Mercasevilla donde una chica le dio un malet¨ªn lleno de dinero al que uni¨® el que previamente ¨¦l hab¨ªa sacado y lo llev¨® al hotel V¨¦rtice donde le esperaba Juan Lanzas¡±. Tanto Algar¨ªn como el exch¨®fer de Guerrero, Juan Francisco Trujillo, declararon haber recogido y entregado sobres con dinero para Albarrac¨ªn en Madrid. Mientras, una empleada de Vitalia acus¨® a Albarrac¨ªn de incluir a los intrusos y determinar las comisiones de cada ERE.
Del intercambio de favores entre Albarrac¨ªn y Guerrero proviene la contrataci¨®n de un hermano del directivo de Vitalia como abogado que trabajaba para la Consejer¨ªa de Empleo. Su fichaje se realiz¨® a trav¨¦s de la sociedad Umax Consultores, dirigida por Ulpiano Cuadrado, buen amigo de Guerrero. Otro favor m¨¢s, otro hoy por ti ma?ana por m¨ª.
El conseguidor Lanzas logr¨® p¨®lizas para numerosos familiares, sindicalistas y pol¨ªticos que aparecieron como intrusos: entre ellos sindicalistas de UGT y CC OO y el exdelegado del Gobierno en Burgos y C¨¢diz, C¨¦sar Bra?a. Al margen de las p¨®lizas, los sindicatos recibieron 4,2 millones de las comisiones de los ERE desde Vitalia. Lanzas llamaba ¡°su equipo¡± a Vitalia y el bufete Estudios Jur¨ªdicos Villas¨ªs, para el que tambi¨¦n trabaj¨®.
Guerrero atesor¨® cuatro inmuebles y tanto Lanzas como Albarrac¨ªn adquirieron 16 cada uno.
Como muestra de su desparpajo y poco disimulo al quebrar la ley, para que los trabajadores de Matadero de Fuenteobejuna se beneficiaran del Convenio Especial con la Seguridad Social, Lanzas ¡°mont¨® a todos en un autob¨²s y se les hizo en la mencionada empresa los contratos simulados¡±, se?ala su auto de prisi¨®n.
La mujer de Lanzas, Patrocinio Sierra, tambi¨¦n estuvo familiarizada con la cultura de los sobres. Cada mes iba a recoger entre 20 y 25.000 euros en sobres al chal¨¦ de la familia Ruiz Mateos en Madrid. En total, tres millones por cinco ERE subvencionados para dos bodegas, la f¨¢brica de postres Dhul y el Hotel Cervantes, donde Lanzas pas¨® sus vacaciones un verano.
Para blanquear sus beneficios, Lanzas dirigi¨® un equipo de testaferros singulares, entre ellos Manuela Castillo. ¡°Persona que limpiaba las instalaciones de la empresa, hija de una antigua pareja de Eduardo Leal [testaferro de Lanzas]¡±.
La juez ya ha advertido de que al margen de Guerrero, la trama corrupta pag¨® sobornos a diferentes altos cargos de la Administraci¨®n andaluza. Lanzas ¡°ampli¨® su ¨¢rea de influencia¡± al exdelegado de Empleo Antonio Rivas, seg¨²n Alaya, e incluy¨® un concu?ado suyo como intruso. Sin embargo, la juez no ha dado nombres y la investigaci¨®n patrimonial realizada a Rivas y Fern¨¢ndez no ofreci¨® signos de lucro il¨ªcito.
Durante las vacas gordas Guerrero atesor¨® cuatro inmuebles y tanto Lanzas como Albarrac¨ªn adquirieron 16 cada uno. En total, 36 inmuebles, la mayor¨ªa de los cuales ser¨¢ embargada en breve.
Hoy Guerrero carece de ingresos y no tiene liquidez. Su desparpajo hizo que volviera a declarar de nuevo la semana pasada ante la juez pese a la tajante orden de su abogado para que guardara silencio, lo que ha provocado que el letrado le abandone. Pero Guerrero es as¨ª y sigue pensando que su colaboraci¨®n con la justicia puede reportarle beneficios y que ciertas tropel¨ªas tienen una explicaci¨®n plausible. ?Se recuperar¨¢n los fondos p¨²blicos? Vitalia invirti¨® parte de sus beneficios en el ladrillo en pa¨ªses extranjeros y los investigadores hallaron 80.000 euros bajo una cama en una casa de Lanzas. Esa calderilla da idea de la entidad de esta supuesta malversaci¨®n.
En su primera etapa tras dejar UGT, Lanzas negoci¨® con los empresarios de La Raza comercializar aceite. El plan no cuaj¨®. En una iron¨ªa del destino, a?os m¨¢s tarde los empresarios realizaron la grabaci¨®n oculta que desencaden¨® el caso Mercasevilla, origen del caso de los ERE.
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