Feij¨®o siembra nuevas dudas sobre la relaci¨®n de Dorado con la Xunta

Salieron a relucir desde fotograf¨ªas de j¨®venes muertos por la droga hasta supuestas conversaciones privadas del presidente de la Xunta con sus adversarios pol¨ªticos que el propio Alberto N¨²?ez Feij¨®o no tuvo inconveniente en desvelar. Ante la valla del Parlamento gallego, un grupo de afectados por las preferentes vaciaba bolsas de harina, y dentro, en la tribuna de invitados del hemiciclo, madres contra la droga contemplaban con gesto compungido la enorme bronca. Pocas veces Feij¨®o hab¨ªa tenido que soportar ataques tan despiadados como los que oy¨® ayer en la comparecencia parlamentaria para explicar su vieja amistad con el contrabandista Marcial Dorado. ¡°Usted es una mentira¡±, le espet¨® el l¨ªder socialista, Pachi V¨¢zquez. ¡°Siento una profunda indignaci¨®n por pertenecer al mismo g¨¦nero que usted¡±, grit¨® el portavoz de Alternativa Galega de Esquerdas (AGE), Xos¨¦ Manuel Beiras, quien lleg¨® a derramar unas l¨¢grimas cuando record¨® que amigos suyos hab¨ªan muerto de sida y abandon¨® el hemiciclo antes de terminar el debate. Tampoco se qued¨® cort¨® Feij¨®o al replicar a sus opositores, que le reclamaron reiteradamente la dimisi¨®n: ¡°Ustedes no merecen sus actas de diputados¡±.

?Pero la mayor sorpresa del d¨ªa la aport¨® el presidente de la Xunta. En sus explicaciones, Feij¨®o admiti¨® por vez primera que empresas vinculadas a Dorado han tenido relaciones econ¨®micas con la Administraci¨®n gallega. El reconocimiento lleg¨® de forma indirecta, envuelto en un ataque a la oposici¨®n. Feij¨®o revel¨® que las empresas vinculadas a Dorado recibieron ¡°m¨¢s dinero con el bipartito que con todos los Gobiernos de Fraga¡±, en los que el actual presidente dirig¨ªa el Servizo Galego de Sa¨²de (Sergas). Entre 2005 y 2009, cuando gobern¨® Galicia la coalici¨®n de socialistas y nacionalistas, firmas del narcotraficante recibieron ¡°ayudas para solidaridad¡±, explic¨® el l¨ªder del PP gallego, ¡°fue la segunda subvenci¨®n m¨¢s importante de una orden de ayudas del bipartito¡±. EL PA?S pidi¨® reiteradamente al gabinete de comunicaci¨®n de Feij¨®o que detallase el dinero p¨²blico recibido por las empresas de Dorado en las distintas etapas de Gobierno, pero ninguna de las llamadas obtuvo respuesta.

Feij¨®o tambi¨¦n admiti¨® varios de los viajes con Dorado de los que ha ido informando este peri¨®dico: Cascais (Portugal), Ibiza y el paisaje nevado que el presidente primero identific¨® como Andorra ¡ªlugar habitual de blanqueo de dinero para los clanes gallegos¡ª y luego como los Picos de Europa. Y a?adi¨® uno m¨¢s a Tenerife. Tambi¨¦n revel¨® a la C¨¢mara que este diario le pregunt¨® hace unos d¨ªas si viaj¨® a Inglaterra y a Suiza con Dorado y que lo hab¨ªa desmentido.

Tanto el socialista Pachi V¨¢zquez como el portavoz del BNG, Francisco Jorquera, mostraron desde la tribuna numerosos recortes de la prensa nacional anteriores a 1995 ¡ªcuando se conocieron Feij¨®o y el contrabandista¡ª, en los que se se?alaba a Dorado como sospechoso de narcotr¨¢fico. Pero el presidente se aferr¨® a su argumento de que ¨¦l no sab¨ªa qui¨¦n era su compa?ero de fiestas, vacaciones y viajes. Incluso dijo que ¡°si hubiese tenido la m¨ªnima informaci¨®n, no habr¨ªa posado para esa foto¡±. Y reiter¨® que, entre 1997 y 1998, cuando supo que su ¡°compa?ero de ocio¡± estaba bajo investigaci¨®n judicial, cort¨® la relaci¨®n con ¨¦l.

Ah¨ª llegaron las contradicciones del presidente, porque, poco despu¨¦s, admiti¨® que tal vez hubiese hablado con Dorado entre 2001 y 2003, fechas en las que existen pinchazos policiales, seg¨²n el juez. ¡°No puedo recordarlo bien, pero puede que me llamara para felicitarme alguna Navidad o alg¨²n cumplea?os¡±, dijo. Tambi¨¦n admiti¨® que aunque no sab¨ªa qui¨¦n era Dorado pregunt¨® a la persona que los hab¨ªa presentado, el ch¨®fer de conselleiros de la Xunta Manuel Cruz, si era testaferro del contrabandista, como qued¨® acreditado a?os despu¨¦s. ¡°Se lo pregunt¨¦ porque algunos amigos me comentaron que podr¨ªa tener negocios con ¨¦l¡±, confes¨® el presidente, lo que sirvi¨® a Jorquera para ironizar: ¡°Si deja la pol¨ªtica, mejor no se haga detective privado¡±.

Por primera vez desde que estall¨® el esc¨¢ndalo, Feij¨®o pidi¨® disculpas. ¡°Me equivoqu¨¦. No fui prudente¡±, admiti¨®. Pero ah¨ª se acab¨® la autocr¨ªtica. El presidente volvi¨® a parapetarse tras el juez que encarcel¨® a Dorado, Jos¨¦ Antonio V¨¢zquez Ta¨ªn, para insistir por en¨¦sima vez en que ¡°la infamia termin¨®¡± una vez que el juez ha se?alado que no vio nada delictivo en las fotos. A partir de entonces, se dedic¨® a repartir estopa a este peri¨®dico y a sus adversarios, que incluy¨® hasta alusiones a los tiempos en que el BNG se relacionaba con Herri Batasuna.

Pese a las reiteradas preguntas de Pachi V¨¢zquez, tampoco aclar¨® qui¨¦n pagaba los viajes. En realidad, no contest¨® a ninguna pregunta, excepto a las 23 que se autoformul¨® en su intervenci¨®n inicial. Cuando ya no hab¨ªa lugar a la r¨¦plica, dej¨® caer que V¨¢zquez le hab¨ªa propuesto hace tiempo un pacto de silencio sobre el caso Campe¨®n, en el que est¨¢n implicados miembros de ambos partidos. El PSdeG lo desminti¨® luego en un comunicado. Y frente a las alusiones a la escandalera que mont¨® en su d¨ªa por la foto de Anxo Quintana en el yate del empresario Jacinto Rey, Feij¨®o tambi¨¦n revel¨® que la pasada semana, justo despu¨¦s de la rueda de prensa en la que dio explicaciones sobre el caso Dorado, recibi¨® en su despacho al exl¨ªder del BNG. No aclar¨® el motivo.