Zancadas sobre el asfalto

Madrid 21 mayo de 1978. Primer marat¨®n popular de la ciudad. Pocas normas, bambas y tacones en la salida y dorsales dibujados a mano en cartulina cuando se acabaron los oficiales. Con sorpresa incluida: 7.000 personas apuntadas, incluidos ni?os. ¡°Tiene su explicaci¨®n¡±, aclaran desde Mapoma (organizadora del evento desde entonces), ¡°era la ¨¦poca de la transici¨®n y la gente tom¨® la calle en plan manifestaci¨®n. La segunda convocatoria baj¨® a 2.000 personas¡±. Aquel grupo de amigos amantes del atletismo que se embarc¨® en la aventura, con Francisco Perela a la cabeza, no pod¨ªa imaginar la senda que se hab¨ªa iniciado. Quiz¨¢ si intuirla. ¡°Se puso de moda incluso la palabra, se empez¨® a hablar de marat¨®n de cine, de baile, de lo que fuera¡±, sonr¨ªe Perela.

Madrid. 28 de abril de 2013. Aquel marat¨®n celebra hoy su 36 edici¨®n con r¨¦cord de participaci¨®n: 26.000 corredores, de los que 4.575 llegan del extranjero y 4.650 de otras comunidades. Zapatillas y equipamiento de las mejores marcas. Cada participante con su dorsal-chip, bolsa de corredor, regalo y camiseta, adem¨¢s de avituallamiento, 21 grupos de rock distribuidos por el recorrido, concierto final y un largo etc¨¦tera. Algo ha cambiado desde aquella primera apuesta: el running arrasa. En la San Silvestre Vallecana, por ejemplo, las inscripciones se agotan en una semana. Corren 40.000 personas, m¨¢s otras 10.000 que se cuelan sin dorsal, calcula la organizaci¨®n.

Cada a?o se celebran por las calles de Madrid 130 carreras populares, seg¨²n datos del Ayuntamiento. Unas 300 en toda la regi¨®n, calcula la Federaci¨®n madrile?a de atletismo, que aboga porque todas las carreras deber¨ªan estar inscritas en este organismo para garantizar que cumplen con todos los requisitos. La avalancha ha llegado a tal punto que en la urbe no cabe ni una prueba m¨¢s, aseguran desde el Consistorio. Este a?o se han visto obligados a rechazar unas 20. No por falta de ganas, sino de d¨ªas en el calendario. ¡°Hay fines de semana en los que se juntan tres o cuatro pruebas. Y no solo eso, tambi¨¦n se convocan manifestaciones, concentraciones, no tenemos m¨¢s remedio que ser restrictivos¡±, aclara Enrique Herrero, director general de Deportes del Ayuntamiento de Madrid.

¡°Todos los fines de semana hay unas 10.000 personas participando en pruebas por la ciudad¡±, indica V¨ªctor Mart¨ªnez, responsable de la empresa Laetus, que organiza desde hace 20 a?os este tipo de eventos deportivos, sobre todo triatlones y duatlones. ¡°Ahora uno de los grandes problemas con los que nos encontramos los que nos dedicamos a esto es encontrar una fecha o un lugar donde celebrarlas¡±, puntualiza.

En este escenario los miles de aficionados pueden elegir entre recorridos de lo m¨¢s variopinto y adaptados a las condiciones f¨ªsicas de cada uno, aunque los que m¨¢s triunfan son los de 10 kil¨®metros. Muchas de ellas a rebosar, como la San Silvestre convertida en un evento social de despedida del a?o. ¡°Yo hice el recorrido el a?o pasado en 38 minutos y mi mujer todav¨ªa no hab¨ªa salido¡±, advierte Fran Chico, responsable de Motorpress Ib¨¦rica, empresa editora de revistas como Runners y Sportlife, que se lanz¨® hace 10 a?os a preparar la Carrera de la Mujer. Una de las de mayor ¨¦xito.

¡°Nuestro p¨²blico era sobre todo masculino y pensamos en cu¨¢l ser¨ªa la forma de promocionar este deporte entre las mujeres. As¨ª surgi¨® la idea¡±, comenta Chico. A la primera edici¨®n se apuntaron 5.000 mujeres, muy por encima de las 500 que esperaban. ¡°S¨ª, son los culpables, entre comillas, de que se inscriban m¨¢s chicas¡±, sostiene Jes¨²s Gonz¨¢lez, de Lastlap, empresa que organiza la San Silvestre. Una prueba en la que el a?o pasado se inscribieron 12.000 mujeres, el 30% del total, 4.000 m¨¢s que el a?o anterior. La Carrera de la Mujer contin¨²a su periplo imparable. A la pr¨®xima convocatoria, el 5 de mayo, D¨ªa de la Madre, acudir¨¢n en Madrid 25.000, y un total de 85.000 en las ocho ciudades en las que se celebra.

Fue la primera prueba en la que particip¨® Eva Mar¨ªa Tom¨¦, que lleva cuatro a?os practicando running. ¡°Yo era deportista pero correr me costaba mucho y me lo plantee como un reto personal¡±. Ahora las carreras de 10 kil¨®metros no tienen ning¨²n secreto para ella y ha corrido su primera media marat¨®n. La afici¨®n se ha convertido en algo m¨¢s y con un grupo de amigas organiza quedadas. ¡°Empez¨® de casualidad, un d¨ªa en el que nos reunimos para entrenar, lo dijimos en twitter y la respuesta fue impresionante¡±, relata. A la ¨²ltima reuni¨®n asistieron 280 personas. A pesar de la tendencia al alza, las mujeres contin¨²an mirando con recelo a las distancias m¨¢s largas. En el marat¨®n de hoy solo el 15% son mujeres, cantidad que aumenta hasta el 25-30% en la media marat¨®n y que llega al 49% en la prueba de 10 kil¨®metros (las tres carreras se celebran juntas).

El ¨¦xito de estas iniciativas ha ido acompa?ado del florecimiento de multitud de negocios, que podr¨ªan conformar un sector econ¨®mico. Una situaci¨®n que Perela, fundador del marat¨®n madrile?o, contempla con tristeza. ¡°Nuestra idea no era convertirlo en un negocio, pero la gente ha visto que es una forma de sacar dinero¡±, opina.

Existen empresas organizadoras, marcas de ropa con l¨ªneas deportivas, touroperadores que desplazan a los corredores y acompa?antes a otros lugares del mundo, managers que mueven a sus deportistas de ¨¦lite por el circuito para dar prestigio a las pruebas o ferias comerciales en las que se recogen los dorsales. Adem¨¢s de sociedades implicadas en el montaje: vallas, lonas, avituallamiento, publicidad, voluntarios... A lo que hay que a?adir el impacto econ¨®mico positivo para los lugares donde se celebran. En Madrid, el marat¨®n dejar¨¢ unos 12 millones de euros contando el gasto en hoteles, restaurantes, transporte y comercio, calcula el Ayuntamiento.

¡°Ya que vas a Nueva York, Tokio, Boston o a Madrid aprovechas para conocerlo¡±, explica Luis Hita, un maratoniano que cre¨® Marathinez Tours, para facilitar la participaci¨®n en carreras que se celebran en otros pa¨ªses. Ofrecen el hotel con la inscripci¨®n, traslado a la salida del marat¨®n, asesoramiento a los corredores y organizan actividades para los acompa?antes. Es el turismo deportivo. ¡°En Nueva York y Londres tenemos 120 inscripciones, en otras como Boston son 30. Viene todo tipo de personas, desde un superejecutivo al currito¡±, explica. Un paquete de vuelo, cinco noches en hotel al lado de la meta, dorsal y traslados para el prestigioso marat¨®n de Nueva York cuesta 1.898 euros.

¡°El running en s¨ª es un negocio. Calzado, l¨ªneas de ropa, puls¨®metros, chips, programas de entrenamiento¡­ Pero la organizaci¨®n no tanto¡±, sostiene Chico, de la Carrera de la Mujer. Desgrana alguna de las cifras. El IVA es del 21%, las camisetas dependiendo de la calidad cuestan de 2,50 a 8 euros y el seguro se cifra entre 0,80 y 1,25 euros. Cantidades a las que hay que sumar avituallamiento, personal de organizaci¨®n y un largo etc¨¦tera.

Un argumento repetido por todos los organizadores que se financian por varias v¨ªas: patrocinios, ayudas municipales y las inscripciones de los participantes. Aunque, a?aden, con la crisis el apoyo de las administraciones p¨²blicas se ha reducido, por no decir que casi ha desaparecido. Esponsor e inscripciones tambi¨¦n se est¨¢n resintiendo, sobre todo en las carreras con menos tir¨®n.

El precio por participar empieza a ser un motivo de queja recurrente por parte de los corredores. La media de una prueba de 10 kil¨®metros est¨¢ en 10 euros. Precio que se encarece cuanto m¨¢s reconocimiento ha alcanzado el evento. Gratuitas se encuentran muy pocas. La ventaja de la proliferaci¨®n de carreras es que se puede elegir. La carrera Liberty, la ¨²nica dise?ada para que tambi¨¦n puedan correr personas con discapacidad junto a los dem¨¢s deportistas, por ejemplo, lleva seis ediciones y sigue costando ocho euros, dicen sus organizadores.

En las grandes distancias la tarifa sube. Un dorsal en la marat¨®n de hoy ha costado entre 50 y 85 euros, dependiendo de la fecha de adquisici¨®n. La media marat¨®n sale por 20 euros y fuera de plazo llega a los 40. Los 10 kil¨®metros se cotizan entre los 15 euros de los m¨¢s madrugadores a los 25. Las tres pruebas se celebran a la vez. ¡°Esto es como todo, hay que ver lo que ofrecen y comprobar si el precio es razonable. Desde que recoges el dorsal, el avituallamiento, el servicio de llegada o el guardarropa¡±, opina Hita.

El Ayuntamiento madrile?o tambi¨¦n pone su parte. Primero dando el visto bueno al proyecto. Y el d¨ªa de celebraci¨®n con agentes municipales, vallas, servicios de limpieza y sanitarios. En el marat¨®n de hoy la seguridad se ha incrementado tras el atentado del marat¨®n de Boston con 400 polic¨ªas nacionales, 390 municipales, 60 agentes de movilidad y 250 miembros del Samur. A ellos se suman 105 empleados y 34 m¨¢quinas de limpieza, 286 contenedores de residuos, adem¨¢s de 150 voluntarios. Las empresas han empezado a abonar este a?o al Ayuntamiento una tasa por ocupaci¨®n de la calle, pero solo por las zonas donde instalen publicidad.

Lo que est¨¢ claro es que correr engancha. La media de edad del aficionado est¨¢ por encima de los 30 a?os. Parece alta, pero es un deporte que requiere sacrificio y los m¨¢s j¨®venes prefieren otro tipo de actividad. Los motivos para lanzarse al ruedo son diversos, estr¨¦s, perder peso, superaci¨®n, y casi siempre precisa de un peque?o empuj¨®n por parte de alg¨²n amigo. ¡°Pero una vez que te haces corredor es para toda la vida¡±, avisa Chico.