El Sergas alega que no puede reunir los contratos de la etapa de Feij¨®o

La Xunta no enviar¨¢ al Parlamento los papeles que pidi¨® la oposici¨®n para determinar si los hospitales gallegos concedieron contratos a las empresas del narcotraficante Marcial Dorado o de su testaferro Manuel Cruz entre 1992 y 1998, la ¨¦poca en la que ambos eran amigos y compa?eros de viajes de ocio de Alberto N¨²?ez Feij¨®o y cuando est¨¦ era el secretario general de la Conseller¨ªa de Sanidade. El PSdeG hab¨ªa requerido la documentaci¨®n relativa a los contratos que los centros sanitarios p¨²blicos mantuvieron con empresas de suministro de combustible o material inform¨¢tico. El objetivo era conocer si las suministradoras de carburante de Dorado y su mara?a de sociedades contrataron con la administraci¨®n en la ¨¦poca en que se suced¨ªan los paseos en yate, viajes al extranjero y fiestas de fin de a?o con Feij¨®o y Cruz.? La Conseller¨ªa de Sanidade eludi¨® remitir esa documentaci¨®n a la C¨¢mara y en su lugar plane¨® una comparecencia a petici¨®n propia del actual n¨²mero dos del Sergas, Antonio Fern¨¢dez Campa, en la comisi¨®n de Sanidad del Parlamento gallego. Durante una hora y media, el alto cargo de la Xunta se someti¨® a las preguntas de la oposici¨®n pero no lleg¨® a aclarar si los papeles fueron destruidos, como dio a entender el presidente ayer en el hemiciclo cuando dijo: ¡°Nada hay anterior a 2003¡±.

Hoy el secretario general de Sanidade aleg¨® que los expedientes solicitados por los socialistas corresponden a ¡°16.000 operaciones contables por un importe de 96,5 millones de euros y 600 terceros [proveedores]¡±. ¡°Es inmanejable¡±, explic¨® en varias ocasiones Fern¨¢ndez Campa. Pero el alto cargo de Sanidade en ning¨²n momento aleg¨®, como s¨ª hizo el presidente ayer, que todas las facturas anteriores a 2003 fueran destruidas. Fern¨¢ndez Campa argument¨® que ¡°con car¨¢cter general las operaciones contables, transcurridos seis a?os, se pueden expurgar¡±. Detall¨® que el ¡°procedimiento de archivo fue modificado en 2000 por una circular en la que se establec¨ªan las normas de la documentaci¨®n a remitir al Consello de Contas y de c¨®mo conservarlas. No toda la documentaci¨®n tiene que ser expurgada¡±. Esa argumentaci¨®n monopoliz¨® toda su comparecencia, con una exposici¨®n inicial y dos turnos de respuestas a los cuatro grupos parlamentarios (PP, PSdeG, AGE y BNG). Los partidos de la oposici¨®n tacharon de burla y espect¨¢culo lamentable la actitud de la Xunta y anunciaron que seguir¨¢n reclamando la documentaci¨®n al Parlamento por los cauces reglamentarios.

Visto que no iban a obtener las respuestas que buscaban, socialistas, nacionalistas y AGE preguntaron varias veces a Fern¨¢ndez Campa, que ahora ocupa el mismo puesto que ten¨ªa Feij¨®o durante su amistad con Dorado, si ver¨ªa razonable relacionarse tambi¨¦n ¨¦l con un narcotraficante detenido ya varias veces por contrabando. Le plantearon si tambi¨¦n ¨¦l tiene amigos de esa cala?a y si continuar¨ªa en la Administraci¨®n de destaparse una historia parecida. Todos esos interrogantes quedaron en el aire.

En su turno, el portavoz de Sanidad del PP, Miguel Santalices, recurri¨® a su experiencia como exdirector de tres hospitales distintos para recordar que la gesti¨®n de los suministros en esos centros a finales de los a?os noventa no estaba centralizada y que cada centro contrataba a distintos proveedores. Asegur¨® que cada hospital ten¨ªa un interventor y que durante el tiempo que estuvo como gerente bajo la supervisi¨®n de Feij¨®o nunca recibi¨® ninguna instrucci¨®n del ahora presidente para contratar con una empresa.