La ley proh¨ªbe la trituraci¨®n masiva de contratos que aleg¨® Feij¨®o

Estupefactos dej¨® ayer Feij¨®o a los archiveros de la Xunta cuando, apelando a sus conocimientos de Derecho Administrativo, afirm¨® en el Parlamento que la Administraci¨®n no conserva ning¨²n expediente anterior a 2003 porque la ley solo obliga a custodiarlos durante diez a?os. Lo hac¨ªa para disculpar que su Gobierno no facilite el listado de adjudicaciones realizadas por el Sergas en los noventa, en aquellos a?os en los que ¨¦l era n¨²mero dos de este organismo y compa?ero de vacaciones y amigo del contrabandista Marcial Dorado. La Lei de Patrimonio Cultural, sin embargo, dice algo muy distinto. ¡°Integran el patrimonio documental de Galicia los documentos de cualquier ¨¦poca generados, conservados o reunidos en el ejercicio de su funci¨®n por cualquier organismo de car¨¢cter p¨²blico existente en Galicia, as¨ª como por personas privadas, f¨ªsicas o jur¨ªdicas, gestoras de servicios p¨²blicos (...)¡±, dictamina esta norma en su art¨ªculo 77. Y en el 80.3 remacha: ¡°Bajo ning¨²n concepto se podr¨¢n destruir los documentos mientras subsista su valor probatorio de derechos y obligaciones de las personas y de los entes p¨²blicos¡±.

¡°Si es cierto lo que dice el presidente de la Xunta, malo, porque es ilegal¡±, advierte To?o Fern¨¢ndez, funcionario del cuerpo especial de archivos de la Xunta y miembro de la junta de personal por la CIG. Los expedientes de contrataci¨®n de la Xunta solo podr¨ªan ser destru¨ªdos, explica, tras ser valorados por una comisi¨®n de evaluaci¨®n que a¨²n no ha sido creada en Galicia, una comunidad que carece incluso de una ley de archivos que ordene la custodia de documentos p¨²blicos bajo el criterio de funcionarios especializados, no de pol¨ªticos.

Fern¨¢ndez explica que si la Administraci¨®n funcionase como dice Feij¨®o, triturando todos los expedientes p¨²blicos con m¨¢s de diez a?os de vida, Galicia no tendr¨ªa historia. Las toneladas de documentos administrativos que se generan en la comunidad tienen su ciclo vital: durante el primer lustro de existencia se conservan en las oficinas donde se generaron; durante otro periodo que puede durar de cinco a 15 a?os se custodian en el archivo de la conseller¨ªa de turno; de ah¨ª pasarn al Arquivo Xeral da Xunta, una nave en el pol¨ªgono del Tambre de Santiago con casi 11 kil¨®metros de estanter¨ªas, el lugar donde se tendr¨ªa que decidir si los documentos tienen valor hist¨®rico y deben ser preservados en el Arquivo de Galicia, con sede en la Cidade da Cultura.

Pero Fern¨¢ndez admite que en esta cadena la Administraci¨®n gallega no es un ejemplo de diligencia en la conservaci¨®n de documentos y que existe bastante descontrol por la falta de personal especializado. No todas las conseller¨ªas cuentan con t¨¦cnicos de la escala de archivos y los expedientes pasan por diversas manos, incluidas las de empresas contratadas temporalmente para esa labor. ¡°En ese maremagnum puede haber eliminaciones o documentos que se pudren...¡±, denuncia el archivero de la Xunta. El asunto de las fotos de Feij¨®o con el contrabandista m¨¢s c¨¦lebre de las r¨ªas baixas volvi¨® ayer de nuevo al Parlamento. La oposici¨®n hab¨ªa reclamado cuando estall¨® el esc¨¢ndalo documentaci¨®n a la Xunta sobre la red de proveedores de combustible e inform¨¢tica de los hospitales gallegos durante los noventa cuando el ahora presidente de la Xunta compart¨ªa jornadas de navegaci¨®n, viajes al extranjero y fiestas con Marcial Dorado y el testaferro de este, Manuel Cruz, a la vez ch¨®fer de la Xunta. Lo que el PSOE trata de determinar con esa documentaci¨®n es si en la madeja de sociedades de Dorado y Cruz hubo alguna empresa que vendiera gasoil para la la calefacci¨®n a los centros sanitarios gallegos, una sospecha muy extendida entre los socialistas gallegos.

Pero los papeles que reclam¨® el PSdeG no van a llegar a corto plazo a la C¨¢mara. En lugar de enviarlos, la Conseller¨ªa de Sanidad envi¨® ayer al Parlamento al secretario general, Antonio Fern¨¢dez Campa, a justificar por qu¨¦ su departamento no remiti¨® esa documentaci¨®n. En hora y media de comparecencia, el alto cargo de Sanidade se someti¨® a las preguntas de la oposici¨®n pero no lleg¨® a aclarar si los papeles fueron destruidos, como dio a entender el presidente el mi¨¦rcoles en el hemiciclo cuando dijo: ¡°Nada hay anterior a 2003¡±.

El secretario general aleg¨® que los expedientes solicitados por los socialitas corresponden a ¡°16.000 operaciones contables por un importe de 96,5 millones de euros y 600 terceros¡±. ¡°Es inmanejable¡±, explic¨® en varias ocasiones. En ning¨²n momento aleg¨® c¨®mo s¨ª hizo Feij¨®o que todas las facturas anteriores a 2003 fueron destruidas. El n¨²mero dos de la conseller¨ªa argument¨® que ¡°con car¨¢cter general las operaciones contables, transcurridos seis a?os, se pueden expurgar¡±. Detall¨® que el ¡°procedimiento de archivo fue modificado en 2000 por una circular en la que se establec¨ªan las normas de la documentaci¨®n a remitir al Consello de Contas y de c¨®mo conservarlas. No toda la documentaci¨®n tiene que ser expurgada¡±. Campa asegur¨® que ni la Conseller¨ªa de Sanidad ni el Sergas firmaron contratos con las empresas de Marcial Dorado siempre aludiendo a los servicios centrales, puesto que seg¨²n ¨¦l la revisi¨®n hospital por hospital entre 1992 y 1998 de todas las compras de combustible y material inform¨¢tico es inviable. ¡°Estas operaciones o contratos de las que se solicita copias, hablamos de hace 15 o 20 a?os, la mayor parte no se conserva en los centros del SERGAS y son ejercicios fiscalizados por el Consello de Contas¡±.

La explicaci¨®n monopoliz¨® su comparecencia, con exposici¨®n inicial y dos turnos de respuestas a los cuatro grupos parlamentarios (PP, PSdeG, AGE y BNG). Los partidos de la oposici¨®n tacharon de burla y espect¨¢culo lamentable la actitud de la Xunta y anunciaron que seguir¨¢n reclamando la documentaci¨®n al Parlamento por los cauces reglamentarios.

Visto que no hay rastro de los papeles que ped¨ªan, socialistas, nacionalistas y AGE preguntaron varias veces a Fern¨¢ndez Campa, que ahora ocupa el mismo puesto que ten¨ªa Feij¨®o durante su amistad con Dorado, si ver¨ªa razonable relacionarse tambi¨¦n ¨¦l con un narco detenido varias veces por contrabando. No encontraron respuesta.