La ca¨ªda de los pretorianos

El caso Pretoria, que destap¨® una supuesta trama de corrupci¨®n urban¨ªstica en el cintur¨®n de Barcelona, se deshace como los polos: lenta pero inexorablemente. Han pasado tres a?os y medio desde que la Guardia Civil irrumpiera en el Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet y detuviese, entre otros, a Bartomeu Mu?oz. El exalcalde del PSC es uno de los imputados que sigue inmerso en la causa, lo mismo que Maci¨¤ Alavedra y Llu¨ªs Prenafeta, dos hombres de confianza del expresidente de la Generalitat Jordi Pujol. Pero las expectativas creadas al inicio del proceso, cuando el juez Baltasar Garz¨®n lideraba la investigaci¨®n, se han venido abajo.

Empresarios, intermediarios y pol¨ªticos de Santa Coloma, Badalona y Sant Andreu de Llavaneres causaron un perjuicio de 44,7 millones de euros a las arcas p¨²blicas con pelotazos urban¨ªsticos entre 2002 y 2009. Esa era la tesis inicial. El devenir de la investigaci¨®n, sin embargo, ha desdibujado en gran parte ese relato. ¡°Las operaciones urban¨ªsticas que detall¨® Garz¨®n no estaban bien argumentadas; adem¨¢s, se equivocaron con los datos econ¨®micos. Todo eso se ha ido aclarando y ha hecho que muchos imputados se descuelguen¡±, sostiene el penalista Josep Riba, abogado del exconcejal colomense Manuel Dobarco, a¨²n imputado.

Los informes periciales han desmontado uno de los aspectos centrales del caso: la presunta malversaci¨®n de fondos procedentes de la UE. Esos informes han acreditado que los promotores pagaron un precio de mercado por los terrenos y que ¡°las obras municipales se ejecutaron; el dinero se destin¨® para lo previsto¡±, precisa Albert Boada, abogado de Pascual Vela. Este ¨²ltimo ejerc¨ªa como gerente de Servicios en Santa Coloma cuando estall¨® el esc¨¢ndalo. Es el ¨²ltimo de los nueve imputados para los que se ha decretado el archivo de la causa. Otros 11 siguen imputados. El juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz considera que no hay ¡°indicios suficientes¡± para acusar a Vela de fraude en la adjudicaci¨®n de guarder¨ªas y aparcamientos con el uso de fondos europeos.

El caso de Vela revela una forma de investigar la corrupci¨®n que, aunque eficaz, a menudo crea problemas. El caso Pretoria naci¨® por unos documentos hallados en el despacho de abogados Petrus ¡ªde ah¨ª el nombre¡ª pero se basa, sobre todo, en los pinchazos telef¨®nicos. En una de esas llamadas, el exgerente llega a afirmar: ¡°Esto es como si hicieras una factura falsa¡±. El abogado de Vela cree ¡°insuficiente¡± que se le atribuya un delito de falsedad documental bas¨¢ndose en esa afirmaci¨®n, sin ning¨²n documento que lo acredite.

El juez Ruz ha dejado fuera del proceso a nueve personas por falta de indicios o porque las acusaciones ¡°han quedado sin sustento¡±. Y los que siguen inmersos en Pretoria, como el exalcalde socialista, han visto c¨®mo las acusaciones han mermado su potencial. ¡°Lo que quedar¨ªa contra Mu?oz ser¨ªan presuntos peque?os sobornos que, en todo caso, deber¨ªa conocer un juzgado de Santa Coloma¡±, a?ade Riba. Por ejemplo, los tres sobres que el empresario Manuel Carrillo, tambi¨¦n imputado, entreg¨® a Mu?oz en julio de 2009. Los sobres conten¨ªan 6.480 euros que el empresario dio, presuntamente, a cambio de renovar la concesi¨®n del servicio de limpieza del Ayuntamiento.

Algunos de los protagonistas llegaron a pasar meses en prisi¨®n provisional. Tras su detenci¨®n, aparecieron ante las c¨¢maras de televisi¨®n esposados y sosteniendo una bolsa de pl¨¢stico en su traslado a la Audiencia Nacional. Aquel auto de prisi¨®n de Garz¨®n, junto a los escritos de la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n, apuntaban a una trama que, gracias a su influencia sobre cargos p¨²blicos, logr¨® que ciertos proyectos y adjudicaciones cayeran en manos de empresarios amigos a cambio de suculentas mordidas, que oscilaban entre ¡°el 3 y el 5%¡±, seg¨²n los informes. La Guardia Civil detall¨® el funcionamiento de la trama: se adjudicaba a alguien una operaci¨®n inmobiliaria, se cambiaba al adjudicatario, se recalificaba el proyecto y se vend¨ªa a un precio muy superior, lo que generaba unas plusval¨ªas enormes, de unos 10 millones por proyecto.

Los supuestos conseguidores fueron Alavedra, Prenafeta y el que est¨¢ considerado cerebro de la trama: el exdiputado del PSC Luis Garc¨ªa S¨¢ez, Luigi. Los ex hombres de confianza de Jordi Pujol desplegaron ¡°una actividad agotadora para conseguir voluntades en el ¨¢mbito pol¨ªtico¡±, especialmente en la Generalitat, seg¨²n la fiscal¨ªa. Luigi era ¡°una especie de consejero en la sombra que mediatizaba todas las decisiones¡± del alcalde y de otros cargos municipales. La investigaci¨®n sobre los tres se centra ahora en saber si cometieron blanqueo de capitales. La petici¨®n de comisiones rogatorias a para¨ªsos fiscales es una de las ¨²ltimas diligencias solicitadas por el magistrado. El caso, se?alan fuentes judiciales, avanza con cierta lentitud. ¡°La investigaci¨®n fue desproporcionada al principio y tambi¨¦n influye el hecho de que Ruz no haya llevado el tema desde el principio¡±, a?aden las mismas fuentes.

El caso Pretoria se centr¨®, precisamente, en tres grandes operaciones: Pallaresa (en Santa Coloma), Niesma (Sant Andreu de Llavaneres) y Badalona Building Waterfront. En el caso de estas dos ¨²ltimas, no se han podido probar las irregularidades, como lo prueba que los principales implicados est¨¦n ya fuera del proceso.