Barcelona se queda sin la CMT

Barcelona perder¨¢ la sede de la Comisi¨®n Nacional de Telecomunicaciones (CMT). El Senado dio el pasado martes la puntilla al organismo y al proceso de descentralizaci¨®n demandado por el ex presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, e iniciado por el ex presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero hace ocho a?os, que permiti¨® ubicar por primera vez un organismo estatal fuera de Madrid. La desaparici¨®n de la CMT es fruto de la creaci¨®n del nuevo macroregulador ideado por el Ministerio de Econom¨ªa, aprobado en el Congreso y el Senado gracias a los votos del PP, que fue apoyado tambi¨¦n por CiU y el PNV.

¡°Hemos hecho todo lo posible para salvarlo¡±, asegura Pere Macias, diputado de CiU. La federaci¨®n nacionalista ha dado su apoyo a la reforma tras introducir una enmienda que comprometer¨ªa al Gobierno central a mantener en la capital catalana la direcci¨®n de instrucci¨®n de los asuntos de supervisi¨®n regulatoria en los sectores de las telecomunicaciones y servicios audiovisuales. Macias admite que ese compromiso puede quedarse ¡°en nada o en todo¡±. Depender¨¢ del decreto que apruebe el Gobierno central para desarrollar el estatuto interno de la nueva Comisi¨®n Nacional de los Mercados y de la Competencia, que aunar¨¢, adem¨¢s de la CMT, las comisiones nacionales de Energ¨ªa (CNE) y Competenia (CMC), adem¨¢s de otros reguladores previstos.

Por contra, el grupo de Entesa pel Progr¨¦s intent¨® introducir una enmienda que permitiera crear dentro del nuevo regulador la Comisi¨®n Nacional de Comunicaciones ¡ªintegrada por la actual CMT, el Consejo Estatal de Medios Audiovisuales y la Comisi¨®n del Sector Postal¡ª, que tendr¨ªa su sede en Barcelona. La propuesta fue rechazada por el PP y por CiU.

El expresidente de la Generalitat y senador Jos¨¦ Montilla no entiende por qu¨¦ ¡°CiU no ha dado la batalla¡± en una iniciativa que devuelve las decisiones regulatorias en materia de telecomunicaciones a Madrid. En su opini¨®n, aunque se acabe manteniendo la direcci¨®n, esta ser¨¢ f¨¢cilmente ¡°deslocalizable¡±, ya que ¡°no ser¨¢ necesario ni elaborar una nueva ley¡±.

Fuentes conocedoras del funcionamiento de la CMT avalan esa versi¨®n, b¨¢sicamente por uno de los argumentos que ha utilizado el Gobierno para llevar a cabo la reforma: la racionalizaci¨®n de recursos y un ahorro estimado de 30 millones de euros. Actualmente trabajan en la sede barcelonesa 140 personas. Las mismas fuentes aseguran que el mantenimiento de la direcci¨®n de instrucci¨®n podr¨ªa estar integrada por unas cincuenta persona y cuestionan la posibilidad de que se mantenga la estructura que se encargaba de sistemas, personal y an¨¢lisis. ¡°Hay nervios en la plantilla¡±, aseguran.

Pese a estar desde finales de 2005 en Barcelona, la CMT estren¨® sede propia en Barcelona en 2010, en el distrito tecnol¨®gico 22@. Un edificio de 12.000 metros cuadrados que cost¨® 62,5 millones de euros y que ahora tiene tres plantas desocupadas. El Ministerio de Econom¨ªa no respondi¨® a este diario sobre los efectos que tendr¨¢ la ley.

¡°Cuando hay cosas que no les agradan se dedican a hacer contrareformas¡±, opina la senadora de ERC Esther Capella. Su denuncia coincide con la de Jordi Guillot (ICV): dice que tras la decisi¨®n hay una ¡°recentralizaci¨®n y regubernamentalizaci¨®n¡±, los organismos independientes pierden competencias que vuelven a asumir los ministerios.

La marcha de la CMT coincidir¨¢ en el a?o en que Barcelona se estrena como capital mundial de la telefon¨ªa m¨®vil, cartel que tiene asegurado hasta 2018 y que gan¨® con la sede de la CMT como una de las bazas para convencer a los organizadores. Las fuentes consultadas admiten que la llegada de la CMT no sirvi¨® para que en Barcelona se ubicasen las grandes operadoras de telecomunicaciones, como se pretend¨ªan. ¡°Si hubiera habido m¨¢s sensibilidad otras compa?¨ªas hubieran venido aqu¨ª¡±, se?ala el director general de Telecomunicaciones de la Generalitat, Carles Flamerich, quien sostiene como un mal menor que Barcelona se haya asegurado una direcci¨®n general y acusa a Madrid de ¡°voracidad centralista¡±. S¨ª que tuvo efectos sobre los despachos jur¨ªdicos, que en los ¨²ltimos a?os han desarrollado en Barcelona sus ¨¢reas especializadas en telecomunicaciones. ?Y el futuro? ¡°La CMT ten¨ªa m¨¢s importancia pol¨ªtica que empresarial¡±, se?ala Ramon Salabert, presidente de la asociaci¨®n empresarial 22@Network. ¡°No le doy ninguna trascendencia¡±, se?ala.