Caixabank culpa a los exgestores de Banco Valencia del fin de la entidad
La entidad valenciana, fundada en 1900, desaparece al ser absorbida por el Grupo La Caixa El juez Pedraz admite otra querella contra los exdirectivos
El Banco de Valencia desapareci¨® este mi¨¦rcoles, aunque formalmente su absorci¨®n por parte de Caixabank no se concretar¨¢ hasta mediados de julio, cuando la operaci¨®n haya recibido las autorizaciones necesarias. Hoy, sin embargo, se escenific¨® su final en una desangelada junta de accionistas, celebrada en el Museo de las Ciencias Pr¨ªncipe Felipe, y controlada por el Grupo La Caixa, que dispon¨ªa del 98,98% de las acciones. Aparte de los directivos de Caixabank, a la junta asistieron menos de un centenar de personas, la mayor¨ªa damnificados por la desastrosa y supuestamente delictiva gesti¨®n de los exresponsables de la entidad, que convirtieron la junta en algo parecido a un desahogo colectivo. El ¨²ltimo presidente del banco, Marcelino Armenter, que fue nombrado hace unos meses por Caixabank, apunt¨® precisamente hacia los exgestores del banco como culpables de su ruina.
La p¨¦rdida de Banco de Valencia, fundado en el a?o 1900, se suma a las registradas con Bancaja ¡ªque se insert¨® en Bankia antes de que esta fuese nacionalizada¡ª, con CAM ¡ªque fue adjudicada al Sabadell tras ser intervenida por el Banco de Espa?a¡ª y Ruralcaja, integrada ahora en Cajamar. La ¨²nica entidad aut¨®ctona que se mantiene en pie tras el vendaval de la crisis financiera y la monumental indigesti¨®n de ladrillo causada por la burbuja inmobiliaria, es Caixa Ontinyent, una microcaja de talla comarcal.
El antiguo orgullo de la burgues¨ªa valenciana solo mantendr¨¢ la marca en oficinas de las provincias de Valencia y Castell¨®, e incluso all¨ª compartir¨¢ r¨®tulo con la de Caixabank. En el resto de sucursales, incluidas las de Alicante, solo figurar¨¢ el nombre de la entidad catalana. La sede hist¨®rica del banco, en la calle de Pintor Sorolla, alojar¨¢ la direcci¨®n territorial de Levante del Grupo La Caixa, al frente de la cual se situar¨¢ Bibiano Mart¨ªnez, que fue nombrado recientemente director general de Banco de Valencia.
En el discurso de apertura de la junta, que hizo las veces de mensaje de despedida, Armenter lament¨® la ¡°dif¨ªcil situaci¨®n¡± en la que se han encontrado los accionistas del banco. El directivo defendi¨®, sin embargo, el canje de acciones acordado, por basarse en su valor de mercado. El intercambio se ha concretado en la entrega de 479 t¨ªtulos de Banco de Valencia por cada uno de Caixabank. Ello supuso valorar la acci¨®n de la entidad valenciana en medio c¨¦ntimo de euro.
Armenter record¨® la ¡°precaria situaci¨®n de la entidad¡± en el momento en que fue intervenido por el Banco de Espa?a, en noviembre de 2011, a petici¨®n de su propio consejo. La entidad presentaba entonces una ¡°situaci¨®n cr¨ªtica de liquidez¡± y una ¡°delicada situaci¨®n de solvencia¡± tras haber concentrado el riesgo en el sector inmobiliario. Armenter a?adi¨® al cuadro la ¡°falta de capacidad de gesti¨®n¡± de los antiguos responsables del banco.
Esos exdirigentes, entre los que destacan los expresidentes de la entidad Jos¨¦ Luis Olivas y Aurelio Izquierdo, as¨ª como el exconsejero delegado Domingo Parra, est¨¢n adem¨¢s imputados por varios delitos, que incluyen la administraci¨®n desleal, en la Audiencia Nacional.
El magistrado Santiago Pedraz ha asumido, adem¨¢s, seg¨²n un auto conocido ayer, la querella presentada contra 27 personas f¨ªsicas y jur¨ªdicas por Asociaci¨®n de Peque?os Accionistas del Banco de Valencia (Apabankval), entre los que se encuentran Olivas, Izquierdo y Parra. La querella presentada por el abogado Diego Mu?oz-Cobo es tan amplia que Pedraz se ha inclinado por abrir unas ¡°diligencias previas independientes¡±. El juez ya investigaba ocho querellas presentadas por el Fondo de Reestructuraci¨®n Ordenada Bancaria (FROB) as¨ª como el contenido de un informe elaborado por el Banco de Espa?a.
La gesti¨®n del Banco de Valencia ha tenido un alto coste para los accionistas, que ayer expresaron su malestar en tirantes intervenciones, y para los tenedores de obligaciones h¨ªbridas. Pero tambi¨¦n para los contribuyentes, ya que el Gobierno terminar¨¢ inyectando cerca de 6.000 millones de euros en el banco.
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