La obra social de la caja urge ingresos estables para no quebrar en 2019

La obra social de la antigua caja de ahorros gallega, heredada y desarrollada hoy por la Fundaci¨®n Novacaixagalicia, mengua por el ¡°desgaste de sus recursos¡± ahora que, desde diciembre, ya nada tiene que ver con Novagalicia Banco y debe vivir de sus ahorros y de los ingresos por alquiler de locales o venta de entradas. De seguir a este ritmo, no podr¨¢ continuar m¨¢s all¨¢ de 2019 a no ser que alguien compense su d¨¦ficit anual de entre cinco y siete millones de euros. As¨ª lo revel¨® ayer en la comisi¨®n parlamentaria de investigaci¨®n sobre las cajas el gerente de la fundaci¨®n, Pedro Otero.

Tambi¨¦n ayer los trabajadores de la entidad, primero a trav¨¦s de un comunicado remitido a todos los grupos pol¨ªticos y luego con la comparecencia de uno de sus representantes, reclamaron ¡°un flujo de rentas¡± fijo para la fundaci¨®n. Para ello, apelan al presidente Alberto N¨²?ez Feij¨®o, y al ministro de Econom¨ªa, Luis de Guindos, para que cumplan su compromiso de lograr un sistema de financiaci¨®n estable y pongan fin al ¡°proceso de transici¨®n¡± en que est¨¢ la entidad nombrando un patronato sin ¡°disputas pol¨ªticas o localistas¡±.

Coincidieron en sus peticiones los gestores y ex gestores de la obra social, aunque se mostraron menos pesimistas asegurando que, pese a las dificultades, ¡°sigue viva¡±. Pedro Otero record¨® que, cuando la antigua caja fusionada se qued¨® con apenas el 6,84% de Novagalicia Banco, la obra social ten¨ªa margen para funcionar sin nuevas aportaciones hasta 2016. Ahora, ya sin participaci¨®n en la entidad financiera y tras nuevos ajustes, la liquidez con que cuenta la fundaci¨®n ¡°permite garantizar la continuidad en un horizonte de siete a?os¡±. Eso se lograr¨ªa con p¨¦rdidas anuales de entre cinco y siete millones de euros, porque como record¨® Otero ¡°toda obra social es por esencia deficitaria¡±. Para cubrir ese d¨¦ficit y permitir que la entidad siga trabajando m¨¢s all¨¢ de 2019 sin abandonar l¨ªneas de actuaci¨®n es para lo que el gerente pidi¨® ¡°el apoyo de las Administraciones y del banco", aunque ¨¦ste ya no tenga vinculaci¨®n.

De producirse el fin de la fundaci¨®n, ¡°probablemente este pa¨ªs se retrase 20 o 30 a?os¡±, hab¨ªa asegurado horas antes Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa Iglesias, responsable de la obra social de Caixa Galicia. En la misma l¨ªnea se pronunci¨® Guillermo Brea, al frente de la obra social de Caixavigo, Caixanova y la Novacaixagalicia ya fusionada hasta hace un a?o. Tanto Garc¨ªa Iglesias como Brea destacaron la necesidad de mantener todas las actividades. El primero record¨® que ¡°lo que dejan las cajas a nivel de obra social no es gasto, es patrimonio¡±, mientras que el segundo advirti¨® de que ¡°si la obra social no existiese, la Xunta tendr¨ªa que hacer una aportaci¨®n a la sociedad¡± similar.

Ambos coincidieron con los trabajadores en reclamar a las Administraciones que ¡°doten de un buen patronato a la fundaci¨®n¡±, necesario para obtener unos ¡°ingresos recurrentes¡±. Y Brea pidi¨®, como tambi¨¦n sugiri¨® Otero, ¡°presionar¡± a quien compre Novagalicia Banco para que aporte fondos a la obra social. El portavoz del PP, Pedro Puy, no concret¨® sin embargo cu¨¢ndo las Administraciones van a nombrar el patronato de la fundaci¨®n y se limit¨® a apelar de forma gen¨¦rica al deseo de ¡°dotar entre todos de unos estatutos¡± a la entidad.

Sobre el destino de las indemnizaciones millonarias que cobraron los exdirectivos de las cajas, los tres gestores y los partidos coincidieron en que si la justicia exige devolverlos, el dinero deber¨ªa destinarse a la obra social. El BNG destac¨® que alg¨²n directivo lleg¨® a cobrar el doble de lo que necesitar¨ªa la obra social cada a?o para evitar su d¨¦ficit.

En la comisi¨®n tambi¨¦n compareci¨® ayer Carlos Pr¨ªncipe, alcalde vigu¨¦s de 1991 a 1995 y hoy pediatra alejado de la primera l¨ªnea pol¨ªtica. Para ¨¦l, las cajas desaparecieron por la mala gesti¨®n de sus responsables, en particular de Julio Fern¨¢ndez Gayoso, responsable de Caixanova, al que acus¨® de ¡°artificios contables¡± y una ¡°gesti¨®n clientelar¡±.