¡°Espa?a os lleva en el coraz¨®n¡±

¡°No es f¨¢cil comprender y aceptar esta realidad¡±, reconoci¨® ayer el arzobispo de Santiago, Juli¨¢n Barrio, en el funeral por las 79 v¨ªctimas del accidente ferroviario. ¡°Galicia y Espa?a y m¨¢s all¨¢ de nuestras fronteras os lleva en su coraz¨®n¡±, a?adi¨®, ante los familiares de los fallecidos, vecinos de Angrois que intentaron socorrerles en el primer momento, los profesionales que llegaron luego, y una larga lista de autoridades.

Los Pr¨ªncipes de Asturias, que el pasado viernes viajaron a Santiago para reconfortar a las familias y a los heridos y felicitar a los h¨¦roes de Angrois, regresaron ayer a la capital gallega, acompa?ados por la infanta Elena, duquesa de Lugo, para asistir al funeral en la catedral. Tambi¨¦n se desplazaron a Santiago el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy y su esposa, y los ministros Jorge Fern¨¢ndez-D¨ªaz (Interior), Ana Pastor (Fomento) y Alberto Ruiz-Gallard¨®n (Justicia). Adem¨¢s del presidente de la Xunta, Alberto N¨²?ez-Feij¨®o, y el alcalde de Santiago, ?ngel Curr¨¢s, tambi¨¦n asistieron los mandatarios de las comunidades de donde eran originarias las v¨ªctimas: Pa¨ªs Vasco, Andaluc¨ªa, Cantabria, La Rioja, Castilla-La Mancha, Castilla y Le¨®n, Canarias, Comunidad Valenciana, Madrid, y Extremadura. Desde Catalu?a se desplaz¨® la vicepresidenta de la Generalitat. Por parte del PSOE acudieron Alfredo P¨¦rez Rubalcaba y Soraya Rodr¨ªguez.

Los bancos de la catedral se acabaron y de pie se quedaron los hombres y mujeres de uniforme (polic¨ªas, bomberos, guardias civiles¡­) que el pasado mi¨¦rcoles se ¡°desvivieron¡± por intentar socorrer a las v¨ªctimas, como record¨® el arzobispo: ¡°Fueron signos de luz en el misterio de la muerte¡±.

Barrio deseo una pronta recuperaci¨®n a los heridos ¡ª22 siguen en estado cr¨ªtico¡ª y record¨® tambi¨¦n a las v¨ªctimas del accidente de autob¨²s en Italia.

Tras la misa, don Felipe, do?a Letizia, Rajoy, su esposa, Feijo¨® y Curr¨¢s se acercaron a dar el p¨¦same, uno por uno, a los familiares. Durante veinte minutos, los Pr¨ªncipes abrazaron, besaron y cogieron de la mano a m¨¢s de un centenar de hombres y mujeres inconsolables: mayores, j¨®venes; de Galicia, de fuera...como las v¨ªctimas.

Cientos de personas siguieron el funeral por una pantalla en la plaza de Quintana. A la del Obradoiro segu¨ªan llegando, como cualquier otro d¨ªa, peregrinos. Muchos dejaron flores y velas en la verja de la catedral. Y uno de ellos enrrosc¨® en los hierros un preciado documento: la prueba de que hab¨ªa llegado a Santiago, y junto a ¨¦l, este mensaje: ¡°El sue?o del peregrino es llegar al final del camino. A vosotros no os dejaron. Fuerais donde fuerais el 24 de julio tambi¨¦n ¨¦rais peregrinos. Por eso os ofrezco mi compostelana. Ya conseguir¨¦ otra. ?nimo a vuestras familais. Besos a los hospitalizados y a los valientes que ayudaron ?gracias!¡±.