Galparsoro: ¡°Estamos ante un estado de desecho y no de derecho¡±

El presidente de CEAR Euskadi, Javier Galparsoro (Valladolid, 1956) se ha marchado de vacaciones con el m¨®vil encendido. Ni el mes estival puede con el entusiasmo de este abogado que anda inmerso en la preparaci¨®n de varios recursos en los que ha detectado ¡°errores injustificables¡± como el de la menor de tres a?os de Galdakao a la que denegaron la nacionalidad por no justificar ¡°buena conducta¡±.

Pregunta. ?Qu¨¦ est¨¢ pasando con las resoluciones de nacionalidad?

Respuesta. Los errores son consecuencia de la ligereza con la que se est¨¢n haciendo las cosas desde la Direcci¨®n de los Registros y del Notariado del Ministerio de Justicia. El Plan Intensivo de Nacionalidad (PIN) que puso el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, buscaba agilizar la tramitaci¨®n de 400.000 expedientes y lo ¨²nico que quieren es cumplir unas estad¨ªsticas. Decir que ya se han solventado el 90% de esos expedientes sin importar c¨®mo lo hacen.

P. ?Por qu¨¦ empiezan a salir ahora estos errores si el PIN lleva en marcha aproxim¨¢damente un a?o?

R. Es consecuencia de la privatizaci¨®n. Se ha tenido que digitalizar todo el proceso, con lo que eso supone. Y es ahora cuando empezamos a recibir las resoluciones, que por cierto, son muy lac¨®nicas. En una hoja y media se ventila el tema. Antes de que fueran los registradores de la propiedad quienes se encargaban de estos temas, las resoluciones se alargaban hasta 5 hojas.

P. ?C¨®mo viven los recortes en medio de un debate pol¨ªtico de sobresueldos?

R. Es un mal¨ªsimo ejemplo para nosotros. Es pat¨¦tico pensar que esa crisis que padecemos en lo econ¨®mico pueda resolverlo cualquiera de los mangurrianes que se est¨¢n aprovechando del dinero p¨²blico. Precisamente las instituciones nos deben un dinero que nos ha llevado a esta situaci¨®n tan cr¨ªtica en la que estamos en CEAR. Estamos ante un estado de desecho y no de derecho.

No estoy empe?ado en que entre cualquiera bajo la protecci¨®n de CEAR¡±

P. El refugiado que llega a Espa?a tiene que sorprenderse de que esto ocurra aqu¨ª.

R. Son tan dignos y humildes que callan lo que piensan. Est¨¢n tan sometidos que se ven como meros invitados. Por supuesto que se sorprenden de que esto est¨¦ ocurriendo en Europa, en una civilizaci¨®n adelantada.

P. ?Est¨¢ sacando la crisis lo peor de la sociedad y la pol¨ªtica?

R. Estamos haciendo un ejercicio de hipocres¨ªa. Por un lado los pol¨ªticos nos lanzan el mensaje de comprensi¨®n y recepci¨®n, de que no hay cupos de asilo, y por otro estamos dando ese derecho, porque no es un capricho, a 2500 personas. Y hay 42 millones de personas que est¨¢n siendo perseguidas en el mundo. ?Se cumple lo que alardeamos? Estamos exigiendo tal nivel de requisitos que gran parte de la gente que llega no puede demostrar que est¨¢ siendo perseguida.

P. ?Hay que flexibilizar los par¨¢metros?

R. Sin ninguna duda, tanto el de salida de su pa¨ªs de origen como el de llegada. Los pol¨ªticos dicen que si se abre el paraguas se colar¨ªa gente. Claro que puede ocurrir, pero nosotros somos gente seria. No tengo ning¨²n empe?o especial desde CEAR para que entre aqu¨ª cualquiera bajo la protecci¨®n internacional si no se lo merece. ?Qu¨¦ gano yo con eso?