¡°No entiendo la libertad sin cultura y este pa¨ªs nunca ha apostado por ella¡±
Este notario es una 'rara avis' por estos pagos. Abri¨® una fundaci¨®n cultural antes de embarcarse en la organizaci¨®n de la Copa del Am¨¦rica
Manuel Chirivella (Valencia, 1957) es una rara avis por estos pagos. Notario y coleccionista de arte contempor¨¢neo, abri¨® una fundaci¨®n en un palacete g¨®tico en el barrio de Velluters de Valencia, junto a su mujer, Alicia Soriano, para exhibir sus obras y las de otros, antes de embarcarse en organizar la Copa del Am¨¦rica en 2007 en su ciudad, ¡°un hito¡± que no se vendi¨® bien, en su opini¨®n. Aspira a que sus dos hijos contin¨²en la labor de la fundaci¨®n que alberga fondos de Equipo Cr¨®nica, Saura, Genov¨¦s, Siclia o Sempere.
Pregunta. ?De ni?o ya quer¨ªa ser notario?
Respuesta. Jamas quise ser notario por afici¨®n, aunque me gusta el derecho. Quer¨ªa tener tiempo libre para m¨ª, para dedicarlo a mis aficiones.
P. ?C¨®mo se aficion¨® al arte?
En sus momentos importantes, el IVAM era un referente clar¨ªsimo
R. Con mi mujer. Empezamos hace m¨¢s de 30 a?os a comprar y me fui aficionando cada vez m¨¢s.
P. ?Est¨¢ a favor de la gesti¨®n cultural privada-p¨²blica?
R. Hay que utilizar a la gente y apoyar las iniciativas. Por ejemplo, sale m¨¢s barata una exposici¨®n si la hacemos nosotros que si la hace la administraci¨®n... En Espa?a, la cultura ha sido utilizada como propaganda. Todas las comunidades quer¨ªan tener su propio museo de arte contempor¨¢neo, y ?qu¨¦ colgaban dentro?
P. Valencia fue la primera en tenerlo, con el IVAM
La crisis desprestigia todo aquello que huele a rancio
R. En los momentos importantes, el IVAM era un referente clar¨ªsimo. De hecho, cuenta con una gran colecci¨®n detr¨¢s.
P. ?A qu¨¦ afecta m¨¢s la crisis, al arte o a las notar¨ªas?
R. Afecta a todos. Los notarios vivimos de las transmisiones y transacciones de las partes. Hoy, con la crisis del ladrillo en Espa?a, pr¨¢cticamente los due?os de los inmuebles son los bancos, como consecuencia de los impagos de las hipotecas. Si los bancos no ponen ese paquete inmobiliario en la calle, y para eso tienen que dar financiaci¨®n, cosa que no hacen, se forma un tap¨®n imposible.
P. En las presentaciones de las exposiciones de su fundaci¨®n se muestra muy cr¨ªtico...
R. Porque la cultura es la primera v¨ªa para pensar que somos seres libres, no entiendo la libertad sin la cultura y este pa¨ªs nunca ha apostado por ella de verdad, ni por la investigaci¨®n ni la innovaci¨®n; si no habr¨ªa muchas m¨¢s fundaciones privadas. La cultura es la primera en ser recortada. Basta ver la subida del IVA hasta el 21%. He o¨ªdo en campa?as electorales recientes que se iban a suprimir las diputaciones y no se ha hecho; el Senado, y tampoco; que se iban a adelgazar las administraciones y no creo que se ha haya hecho. En lo que s¨ª se ha recortado de verdad es en sanidad, educaci¨®n y cultura.
P. Dice que no se podr¨ªa vivir sin cultura... ?Y sin notarios? Hay muchos pa¨ªses que no tienen...
R. Hay dos grandes modelos: el notariado anglosaj¨®n y el latino. En este ¨²ltimo est¨¢ Espa?a, Alemania, Francia, Italia... En otros pa¨ªses, como EE UU o Suecia, hay notarios pero no por oposici¨®n sino que son abogados habilitados, una especie de funcionario mediador. Los notarios podr¨ªan suprimirse, pero se deber¨ªan hacer much¨ªsimos cambios legales.
P. ?Y esa percepci¨®n de que el notario cobra un past¨®n solo por estampar una firma?
R. Que sea una pasta es discutible. El ¨²ltimo arancel es de 1989 y el anterior hac¨ªa m¨¢s de 60 a?os que no se modificaba. Es verdad que el arancel penaliza mucho las transmisiones de peque?a cuant¨ªa, porque de cero a 6.000 euros la cantidad es fija; en cambio, en operaciones de mucha m¨¢s cuant¨ªa no es tan creciente el arancel.
P. Se privilegia a los que m¨¢s tienen.
R. En el arancel notarial, sin duda.
P. Los pol¨ªticos est¨¢n muy desprestigiados en la crisis, ?tambi¨¦n los notarios?
R. La crisis desprestigia todo aquello que huele a rancio. Es verdad que las notar¨ªas pueden oler un poco a rancias. Pero a diferencia de los pol¨ªticos, primero se gana la plaza por oposici¨®n y cuando un se?or viene al despacho sabe lo que le va a cobrar el notario... Hay much¨ªsima m¨¢s claridad en un notario, siendo una figura discutible, que en un pol¨ªtico, que es m¨¢s difuso.
P. Usted es un promotor de la sociedad civil con inquietudes pol¨ªticas. ?Cree que la sociedad se moviliza suficientemente?
R. No tiene m¨¢s remedio que movilizarse. Ahora que se habla tanto de la marca Espa?a, The Economist publica un art¨ªculo que dice que Espa?a es corrupta. Qui¨¦n nos va a creer... La gente tiene que movilizarse necesariamente.
P. ?C¨®mo? ?A trav¨¦s de los partidos tradicionales?
R. De los partidos y de una conciencia ciudadana nueva, que pueda asociarse de otras maneras, que son coadyuvantes de los partidos. A su vez, esas maneras han de servir como acicate moral a los partidos para que se den cuenta de que la gente no est¨¢ demasiado contenta con la representaci¨®n moral y ¨¦tica que ejercen.
P. ?C¨®mo se implic¨® en la Copa del Am¨¦rica de 2007?
R. Yo era el vicepresidente de la Federaci¨®n Espa?ola de Vela. Cuando surgi¨® el proyecto, se pusieron en contacto conmigo para que la federaci¨®n fuera coadyuvante. Me impliqu¨¦ desde el primer momento y una vez constituida la sociedad Desaf¨ªo Espa?ol, me nombraron vicepresidente, siendo el presidente Jos¨¦ Ignacio S¨¢nchez Gal¨¢n, de Iberdrola.
P. ?Aprovech¨® Valencia aquella oportunidad?
R. No todo lo que pod¨ªa, aunque los datos son reveladores de su fuerte impacto. La Copa de Am¨¦rica implic¨® que m¨¢s de 3.000 familias estuvieran en Valencia a?os, no solo durante la competici¨®n. Incluso algunos siguen radicados aqu¨ª porque se contin¨²an construyendo barcos de regatas. Eso supuso un movimiento enorme. Recuerdo un dato que me dio el jefe de comunicaci¨®n del Alinghi \[equipo suizo que compiti¨® como equipo anfitri¨®n en Valencia, al no permitirse la competici¨®n en lagos\]: S¨®lo este equipo contrat¨® con 10.000 empresas en la provincia de Valencia. Adem¨¢s, la competici¨®n atrajo a la gente al mar. El ¨²ltimo fin de semana hubo 260.000 personas. Fue un hito.
P. Tal vez la poblaci¨®n no tiene esa sensaci¨®n. ?Se vendi¨® mal?
R. Porque se vendi¨® paralelamente a la F¨®rmula 1 que no tiene nada que ver con los par¨¢metros citados; ni creo que le haya aportado a Valencia el mismo plus que la Copa del Am¨¦rica, porque s¨®lo es un fin de semana y porque es mucho m¨¢s elitista, en contra de los que se puede imaginar. Los barcos son elitistas pero todo el conglomerado que los rodea no. Desde los tripulantes a sus familias, pasando por las visitas guiadas de colegios o de ancianos para ver las bases de los barcos.
P. ?Y qu¨¦ pas¨® al final para no que se volviera a repetir en Valencia una edici¨®n m¨¢s ambiciosa?
R. Nosotros proyectamos con ellos \[el vencedor Alinghi\] una Copa del Am¨¦rica para que se quedara en Valencia. Esto no se ha dicho: Nos exigieron que para que la sede continuara en Valencia que el equipo espa?ol fuera el challenguer of record \[el desafiante de referencia\]. Montamos el reglamento, con una Copa de la Am¨¦rica popular, con barcos con motor, que pudieran tener uso despu¨¦s. Y hubo 19 inscritos, el mayor n¨²mero de la competici¨®n, en esa edici¨®n que se abort¨® por el recurso de los americanos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.