La Universidad de Santiago vuelve a la ¨¦poca de antes de Internet
Los recortes dejan a las facultades sin suscripciones a revistas cient¨ªficas electr¨®nicas. Solo se gasta un tercio de los 20 millones para I+D
Los empleados del servicio de fotocopias de la Universidad de Santiago (USC) se encerraron hace unos d¨ªas Intentaban llamar la atenci¨®n sobre el dr¨¢stico recorte de personal por la reducci¨®n de los puntos de atenci¨®n de reprograf¨ªa: pasan de 19 a 7. ¡°Pero si no hay ni para papel¡±, asegura un profesor, quien afirma que uno de sus colegas de Medicina se lleva los folios de casa para los ex¨¢menes. No hay para papel; el servicio de fotocopiadoras se desmantela; se abarata, con menos personal, el de limpieza; el profesorado roza m¨ªnimos (se acaban los interinos porque no se les renueva y no se amortizan las jubilaciones); las bibliotecas abandonan suscripciones a revistas y publicaciones peri¨®dicas y la partida para investigaci¨®n inicia su ca¨ªda libre. El presupuesto investigador de la USC pas¨® de 74,4 millones en 2009 (se repart¨ªa entre 2.598 actividades) a 53,4 millones en 2012, con 1.834 actividades, seg¨²n datos del ¨²ltimo informe de gesti¨®n, de diciembre pasado. En el documento queda de manifiesto que la USC ha prescindido de 650 personas de las que casi 500 estaban fuera de plantilla; esto es, personal dedicado a proyectos de investigaci¨®n.
?El plan de financiaci¨®n del Sistema Universitario de Galicia (SUG) qued¨® ¡°destrozado con la ley de presupuestos de 2013¡±. Lo afirma, con los datos en la mano, el portavoz del Personal de Administraci¨®n y Servicios (PAS) en el Claustro y representante del colectivo A Trabe, Antonio P¨¦rez. Los 290 millones de euros consignados para las tres universidades gallegas (Santiago, A Coru?a y Vigo) se quedaron en 250 y la subvenci¨®n fija de la Xunta para la USC pas¨® de 123,7 millones de 2012 a 106 millones en 2013. La aportaci¨®n para investigaci¨®n (I+D+I) en las tres universidades se mantiene de momento. Claro que ¨²nicamente sobre el papel, con 45,2 millones de euros de los que 20 le corresponden a la USC; en la pr¨¢ctica se ejecuta un tercio, reconocen los distintos colectivos universitarios consultados.
El recorte presupuestario le ha dado la vuelta a la Universidad gallega. No es solo que se hayan cerrado un buen n¨²mero de l¨ªneas de investigaci¨®n; lo preocupante es que ¡°las que se mantienen lo hacen con el nivel m¨ªnimo de prestaci¨®n¡±, sostiene la presidenta de la junta de Personal Docente e Investigador (PDI), Alba Nogueira. La profesora alerta del retorno a la era pre-Internet. ¡°Toda la modernizaci¨®n para la investigaci¨®n que supuso el acceso on line se viene abajo como consecuencia del cierre de suscripciones a revistas cient¨ªficas¡±, denuncia Nogueira. ¡°La Xunta cancel¨® la aportaci¨®n anual de un mill¨®n de euros para las tres universidades y nos quedamos sin herramientas de trabajo. Es como si cerraran los laboratorios en las facultades de ciencias¡±.
Las colecciones de las universidades gallegas se frenaron ya entre 2011 y 2012, y Nogueira asegura que los profesores que tienen proyectos de investigaci¨®n a¨²n vigentes intentan comprar publicaciones ¡°m¨¢s gen¨¦ricas¡± para contribuir de esa forma ¡°a llenar los huecos¡± a los que aboca la falta de presupuesto de las bibliotecas. La denuncia sobre este descabezamiento del soporte investigador la abanderaron ya a finales de 2009 los tres rectores. Advert¨ªan de que los recortes supon¨ªan cancelar, en aquel momento, 11 bases de datos referenciales que daban acceso a m¨¢s de 29 millones de art¨ªculos cient¨ªficos y a 1.700 revistas electr¨®nicas de distintos ¨¢mbitos del conocimiento ¡°esenciales en la formaci¨®n y desarrollo¡± de profesores e investigadores. La Conseller¨ªa de Educaci¨®n respondi¨® de inmediato tildando de tergiversaci¨®n las cifras. ¡°Desde las universidades se transmite falta de realismo y da la sensaci¨®n de que no son capaces de asimilar la situaci¨®n financiera del pa¨ªs¡±, contraatac¨® la Xunta.
Investigadores y comerciales
¡°La reducci¨®n del presupuesto en investigaci¨®n est¨¢ en torno al 50%¡±, sostiene el representante del PAS en el Claustro de la USC, Antonio P¨¦rez. Y matiza acto seguido que ¡°apenas se aprecia de momento; vivimos a¨²n del efecto del pasado porque el frenazo tarda en evidenciarse: de momento funciona la inercia¡±. P¨¦rez precisa que se est¨¢n finalizando a¨²n ahora los proyectos de investigaci¨®n iniciados en 2010, lo que da una apariencia de normalidad al ritmo investigador de la universidad gallega aunque ¡°una vez que estos se cierren ya definitivamente, el frenazo ser¨¢ demoledor: los tres a?os siguientes nos pondr¨¢n a la altura de 2003-2004¡±.
Braceando por evitar este regreso al pasado al que la falta de financiaci¨®n de la Xunta parece abocar a la universidad, los investigadores ¡°buscan ellos mismos el dinero para financiar los proyectos: act¨²an como comerciales¡±, explica P¨¦rez la situaci¨®n actual de la investigaci¨®n en Galicia que conlleva, en su opini¨®n, a una ¡°desmotivaci¨®n generalizada¡±.
La falta de financiaci¨®n es, parad¨®jicamente, paralela al aumento de las jubilaciones, que no se cubren. La portavoz del personal docente, Alba Nogueira, cifra en una media de 40 anuales las que se registran en la USC ¡°pero por cada 10 que se jubilan solo se puede contratar a uno¡±. Nogueira alerta de que la falta de renovaci¨®n del profesorado es ¡°alarmante¡± ¡ªespecialmente en Santiago ya que las otras universidades gallegas son m¨¢s j¨®venes¡ª porque ¡°repercute en la calidad de la docencia y en la falta de oportunidades¡±. El goteo de las bajas del profesorado conlleva que cada vez se impartan menos m¨¢steres ¡°y que las materias ya no las den en muchos casos los especialistas titulares, sino profesores de afines¡±; esto es, ¡°menos calidad acad¨¦mica¡±.
La realidad es que la gesti¨®n de la crisis es complicada: en el ejercicio anterior el recorte alcanz¨® el 30% y ahora se aplica otro 40% en las suscripciones electr¨®nicas. En la red de datos para actualizaci¨®n de equipos inform¨¢ticos ¡°no se invierte un euro desde 2010¡±, afirma el portavoz del PAS. El personal, docente y administrativo, ya alert¨® hace unos meses del horizonte de asfixia financiera de la universidad compostelana. La deuda alcanza los 59,9 millones de euros (le debe 34,1 a los bancos y los 25,8 restantes son anticipos reembolsables al Ministerio) mientras que los derechos pendientes de cobro (las deudas a su favor) no superan los 16,3 millones. ¡°Y los recortes que nos aplica la Xunta¡±, lamenta Alba Nogueria, ¡°no permiten contribuir a que disminuya nuestra deuda, sino solo la suya. El esfuerzo de ahorro ni siquiera sanea la universidad¡±.
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