Cenizas de historia bajo sospecha
La Guardia Civil busca el foco del fuego en el archivo de Los Palacios El alcalde sigue creyendo que no fue fortuito
En los aleda?os del Ayuntamiento de Los Palacios y Villafranca (Sevilla, 38.000 habitantes) todav¨ªa ol¨ªa a quemado ayer a mediod¨ªa. Hac¨ªa m¨¢s de 24 horas que los bomberos hab¨ªan dado por extinguido el fuego que ha arrasado el archivo municipal, pero los legajos abrasados de papel impregnan el aire de ceniza y olor a chamusquina. De vez en cuando, un bombero mueve los restos de alg¨²n tomo y, al cogerlo, empieza a salir humo. ¡°No hay ya llamas, pero con el calor acumulado es como si el papel fuera tost¨¢ndose y puede volver a prender¡±, explica un agente de la Guardia Civil, que investiga si el incendio fue accidental o intencionado.
Los agentes tardar¨¢n varios d¨ªas en tener la respuesta. Mientras no existan datos objetivos, solo hay sospechas y rumores entre los vecinos y los responsables municipales. El fuego ha coincidido con una investigaci¨®n abierta por la fiscal¨ªa contra la gesti¨®n del anterior alcalde, el socialista Antonio Maestre, al que acusa de presuntos delitos de malversaci¨®n de fondos, fraude en subvenciones y falsedad documental. Aunque la mayor¨ªa de la documentaci¨®n del Ayuntamiento desde 1990 est¨¢ informatizada, en el fuego se han perdido los originales de expedientes y mandamientos de cobros y pagos implicados en la investigaci¨®n. El actual alcalde, Juan Manuel Valle (IP-IU), no dud¨® el jueves en sugerir la posibilidad de que los autores del incendio intentaran destruir pruebas.
La fiscal¨ªa investiga la gesti¨®n del anterior gobierno municipal
El exregidor, que niega su vinculaci¨®n con el fuego, ha amenazado con querellarse contra quien le relacione con los hechos y el alcalde fue ayer algo m¨¢s cauto. Pero sigue casi convencido de que el suceso no fue fortuito. ¡°Yo no he hecho acusaciones contra nadie. Solo son sospechas de que puede ser intencionado. Pero vamos a respetar la presunci¨®n de inocencia¡±, asegura Valle a escasos metros del dispositivo en el que agentes de la Guardia Civil, bomberos, protecci¨®n civil y operarios municipales siguen sacando tacos de papel quemado.
En los 100 metros cuadrados que ocupaba el archivo se guardaban las actas municipales desde 1890 y algunos documentos hist¨®ricos. El archivero municipal, Julio Mayo, respir¨® aliviado al cerciorarse de que el Libro del Becerro, del siglo XVII, que contiene el acta por el que los vecinos de Villafranca de la Marisma obtuvieron del rey Felipe IV su propia jurisdicci¨®n frente a los Duques de Arcos, se?ores de Los Palacios, se ha salvado. Estaba en una caja que lo protegi¨® de las llamas y el jueves fue llevado a un banco. All¨ª han quedado depositados tambi¨¦n dos libros con la documentaci¨®n de los racionamientos de alimentos y productos de primera necesidad que se daban a las familias del pueblo en la posguerra.
La documentaci¨®n est¨¢ informatizada, pero se han perdido los originales
Aunque se han conservado algunas de las joyas, el archivero cree que el 90% de la documentaci¨®n almacenada est¨¢ seriamente afectada por las llamas, el agua y la espuma que emplearon los bomberos en la extinci¨®n. Una cadena formada por bomberos, operarios y protecci¨®n civil van sacando legajo a legajo desde el interior del archivo, ubicado en la planta baja del edificio. Los que no son m¨¢s que cenizas que se van deshaciendo por el camino van a una cuba de obra cuyo contenido acabar¨¢ en el vertedero. Los menos da?ados se dejan en un cami¨®n que los lleva a una nave municipal donde voluntarios dirigidos por el archivero trabajan ya para intentar recuperarlos.
Dentro del edificio, agentes de criminal¨ªstica de la Guardia Civil examinan paredes, estanter¨ªas, ventanas. Cualquier punto que pueda servir para localizar el foco del fuego y que de pistas sobre si fue intencionado. El alcalde asegura que sus sospechas no tienen solo en el punto de mira a los implicados por la fiscal¨ªa. ¡°En los dos ¨²ltimos a?os hemos sufrido muchos sabotajes. Un incendio en una choza, vandalismo, pintadas con insultos¡±, cuenta. El archivo solo est¨¢ separado de la v¨ªa p¨²blica por unas ventanas a pie de calle y la Guardia Civil tampoco descarta una gamberrada. ¡°Es imposible saberlo. Aqu¨ª quedan muchos d¨ªas de trabajo. Muchos¡±, dice un agente.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.