El alcalde contrabandista bloquea el acceso a sus cuentas suizas
Sus recursos contra las comisiones rogatorias han llegado al Tribunal Federal de Suiza
Doce a?os despu¨¦s de su detenci¨®n por contrabando de medio mill¨®n de cajetillas de tabaco, los recursos judiciales en Suiza del exalcalde popular de Ribadumia, Jos¨¦ Ram¨®n Barral, Nen¨¦, han convertido el proceso en el m¨¢s antiguo de los instruidos en Vilagarc¨ªa y al borde de la prescripci¨®n. La comisi¨®n rogatoria para acceder a sus cuentas bancarias en el pa¨ªs helv¨¦tico ha sido el caballo de batalla de los varios jueces y fiscales por cuyas manos ha pasado el asunto durante todo este tiempo. Ahora, la Fiscal¨ªa de Pontevedra ha presentado un escrito al juzgado solicitando ¡°poner fin¡± a la instrucci¨®n para que el ministerio p¨²blico y el abogado del Estado puedan formular acusaci¨®n contra Nen¨¦ Barral y m¨¢s de 40 personas que supuestamente formaban parte de la red de contrabando que lideraba el expol¨ªtico.
Este giro en el proceso supondr¨¢ abrir una pieza separada con la documentaci¨®n que, despu¨¦s de un largo papeleo, ten¨ªan preparadas las autoridades judiciales suizas para enviar a Espa?a. Los abogados de Barral hab¨ªan recurrido la entrega de estos informes al juzgado arousano y, tras la desestimaci¨®n por parte de la justicia suiza, en febrero pasado apelaron a los tribunales federales, retrasando todav¨ªa m¨¢s la instrucci¨®n del caso.
Nada m¨¢s ser detenido Nen¨¦ como responsable del cargamento que lleg¨® al puerto de Vigo hace 12 a?os, el juzgado de Vilagarc¨ªa pidi¨® a la justicia suiza un informe de sus cuentas bancarias. El exalcalde y dos de sus hijas, tambi¨¦n implicadas, recurrieron todos los intentos de enviar a Espa?a la documentaci¨®n bancaria solicitada hasta agotar las v¨ªas legales. A¨²n as¨ª, el asunto est¨¢ en el aire y transcurrido tanto tiempo no se sabe c¨®mo terminar¨¢ el proceso, cu¨¢ntos de los detenidos ser¨¢n acusados y de qu¨¦ delitos. Entre los imputados tambi¨¦n se encuentra la esposa de Barral, su hermano Feliciano, que era presidente del PP local cuando fue detenido, adem¨¢s de tres guardias civiles, otros tantos aduaneros y ciudadanos de varias nacionalidades que supuestamente formaban parte de la red comandada por el exalcalde. Al menos uno de los implicados ya ha fallecido.
Aunque Barral todav¨ªa no ha sido acusado, sus andanzas en el mundo del contrabando eran popularmente conocidas ¡ª¨¦l siempre las ha negado¡ª y fueron objeto de varias investigaciones durante su larga carrera pol¨ªtica. La sonada detenci¨®n del presunto contrabandista le cost¨® el cargo al frente de la alcald¨ªa de Ribadumia, donde llevaba m¨¢s de 20 a?os, y tambi¨¦n su hermano tuvo que abandonar el puesto como dirigente pol¨ªtico.
Barral se enfrenta adem¨¢s a otro proceso por blanqueo de dinero abierto en un juzgado de Cambados. El Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA) localiz¨® inversiones en el sector e¨®lico en China y en acuicultura en Chile que supuestamente le incriminan. Desde una cuenta de un banco de Islas V¨ªrgenes brit¨¢nicas, Barral y sus tres hijas habr¨ªan movido hasta tres millones de euros. Seg¨²n la investigaci¨®n del SVA, el exalcalde cre¨® una empresa para la explotaci¨®n de parques e¨®licos en la ciudad de Qingdao, en la provincia de Shandong, al este de China, otra en Hong Kong y una tercera para producci¨®n de mejill¨®n en bateas en la costa chilena.
Desde Islas V¨ªrgenes se realizaron al menos dos transferencias con destino al sector energ¨¦tico. Una primera de 1,8 millones de d¨®lares y otra posterior de 1,2 millones, adem¨¢s de las que se hayan podido invertir en los proyectos marisqueros chilenos y que se est¨¢n rastreando. Tambi¨¦n en este asunto ser¨¢ crucial la colaboraci¨®n de la justicia china y brit¨¢nica para la obtenci¨®n de pruebas, aunque todav¨ªa no han contestado a ninguna de las comisiones rogatorias. Y es probable que en este caso Barral recurra tambi¨¦n a los tribunales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.