El pragmatismo del PNV hecho realidad

¡°Va a ser un Alderdi Eguna feliz¡±. As¨ª lo cree la direcci¨®n del PNV al radiografiar el nervio de este partido ante la multitudinaria fiesta anual que celebra hoy, en las campas de Foronda (?lava). La vuelta al Gobierno vasco y una transici¨®n sin rechistar en el relevo del EBB proyectan una incuestionable unidad interna de la afiliaci¨®n que acepta complacida un pacto con los socialistas, hasta ayer sus enemigos, y el impulso a la aspiraci¨®n de Euskadi como naci¨®n europea, conscientes de que el camino por recorrer llevar¨¢ tiempo.

¡°Es el pragmatismo del PNV¡±, admit¨ªa esta semana un miembro del EBB cuando fue consultado por la dualidad que supone compatibilizar en el ideario el entendimiento con el PSE-EE y, al tiempo, activar la aspiraci¨®n identitaria. ¡°La militancia lo ve con normalidad porque es f¨¢cil de entender que se ha buscado la f¨®rmula para evitar el bloqueo que ten¨ªamos en el Parlamento y que como PNV tenemos nuestra v¨ªa para marcar un nuevo horizonte como pa¨ªs¡±, a?ad¨ªa.

En sus discursos de esta ma?ana, ante una afiliaci¨®n ¡°ilusionada por la vuelta al poder en el Gobierno despu¨¦s del disgusto por c¨®mo se hab¨ªa perdido¡±, I?igo Urkullu y Andoni Ortuzar apenas se referir¨¢n al pacto con los socialistas, seg¨²n quienes han podido ojear los primeros borradores. ¡°Las inquietudes siguen siendo las mismas que se?al¨® el lehendakari en su investidura: econom¨ªa, pacificaci¨®n y nuevo estatus¡±, recuerdan desde el EBB.

Cuatro a?os despu¨¦s de sostener una ac¨¦rrima enemistad pol¨ªtica, salpicadas de frecuentes descalificaciones, los burukides restan importancia al peaje que les ha supuesto atender las exigencias socialistas para propiciar un acuerdo de largo alcance y que ahora se enmarca en el prop¨®sito de la reactivaci¨®n econ¨®mica y de una nueva reforma fiscal. ¡°El PNV siempre ha apostado por el acuerdo, por la transversalidad y porque hab¨ªa que romper el bloqueo ya que nos llevaba a disolver el Parlamento y a adelantar elecciones en un momento econ¨®mico como ¨¦ste¡±, justifican desde el EBB.

Entre las diversas fuentes consultadas dentro de la familia nacionalista nadie ha cuestionado el significado pol¨ªtico de este pacto con el PSE. Ni siquiera cuando se les recuerda si Itxaso Atutxa, presidenta del BBB, hab¨ªa podido detectar una grieta de malestar en sectores de la militancia al reclamar ¡°mimo¡± hacia el acuerdo. ¡°Eso pertenece a la anterior legislatura¡±, dice un asesor del Gobierno vasco. ¡°La militancia estaba cabreada por la forma en que Ibarretxe sali¨® de Ajuria Enea porque hab¨ªamos ganado las elecciones, pero ahora entiende que con este bloqueo no se pod¨ªa continuar¡±.

En un partido como el PNV, la recuperaci¨®n del poder es suficiente para sellar la unidad interna. Por eso, un dirigente subraya que ¡°la diferencia con el Alderdi Eguna del a?o pasado es total¡±. ¡°Entonces nos enfrent¨¢bamos a unas elecciones, a¨²n no se hab¨ªa producido en relevo de Urkullu en el EBB y ahora ya estamos otra vez en el Gobierno y la gente ha respirado porque se ha superado el bloqueo¡±.

Esta frecuente alusi¨®n al bloqueo pol¨ªtico en el Parlamento no conlleva, en cambio, ninguna revisi¨®n cr¨ªtica del PNV sobre su apuesta inicial de gobernar en solitario. Para justificarlo, hay quien apunta: ¡°Los resultados de las elecciones eran endiablados para hacer alianzas y as¨ª hemos estado todo este tiempo hasta llegar al acuerdo que ser¨¢ bueno para el pa¨ªs¡±.

Ni siquiera en aquellos focos habitualmente propicios a la contestaci¨®n interna de ?lava y Gipuzkoa se escuchan ahora cr¨ªticas a la proyecci¨®n del partido. ¡°La elecci¨®n de Ortuzar ha sido de libro¡±, admiten desde San Sebasti¨¢n, donde, a modo ilustrativo de esta paz, destacan ¡°el clima y la alta asistencia¡± a las recientes conferencias del presidente del EBB en varios batzokis guipuzcoanos.

Asegurada as¨ª esta unidad, en el PNV se detecta una indisimulada satisfacci¨®n por el bal¨®n de ox¨ªgeno que aporta a corto y medio plazo el pacto con los socialistas. Diez meses despu¨¦s de la vuelta al Gobierno, sin un Presupuesto propio y sin apoyos en el Parlamento, en algunas consejer¨ªas empezaba a cundir la inquietud ¡°porque no podemos presentar planes de cierta ambici¨®n que son necesarios sin saber cu¨¢l iba a ser nuestra capacidad de inversi¨®n¡±. Y sobre todo Urkullu respira tras el desgaste sufrido.

Pero en su contacto con la militancia, el lehendakari y su sucesor en la presidencia del EBB aludir¨¢n entusiastamente a la reivindicaci¨®n (I am basque, yo soy vasco) que acompa?a el lema de este Alderdi Eguna. Ser¨¢, por tanto, la oportunidad de proyectar el alma nacionalista ante la respuesta ilusionante de los asistentes, precisamente cuando Urkullu ya ha llevado al Parlamento su proyecto de nuevo estatus pol¨ªtico. ¡°Se ha cumplido con lo prometido y en la recta final de la legislatura se constituir¨¢ la ponencia como estaba previsto¡±. Todos saben que no hay prisas, pero en medio del pacto con los socialistas bien que encaja.