Urkullu se garantiza su reforma fiscal tras sumarse el PP al pacto con el PSE

El lehendakari, I?igo Urkullu, se aleja este martes de Euskadi en su primer viaje fuera de Europa como jefe del Ejecutivo vasco rumbo a EE UU, con el frente econ¨®mico, el que desde el primer minuto ha fijado como su objetivo, despejado en lo que a la pol¨ªtica se refiere. Lo hace despu¨¦s de asegurarse, un d¨ªa antes, que la reforma fiscal pactada por su partido y el PSE se materialice en las tres provincias vascas gracias al apoyo del PP, que aportar¨¢ los votos que faltaban a nacionalistas y socialistas en Gipuzkoa y ?lava a cambio de peque?as modificaciones que no cambian en lo sustancial ni en la filosof¨ªa el pacto. El acuerdo a tres, con PNV, PSE y PP, es un nuevo hito en los acuerdos de Euskadi que garantiza que las tres provincias vascas cuenten con la misma fiscalidad.

Los socialistas aseguran que solo se introducen "matices" en lo ya acordado

El arranque del curso ha sido dulce para un lehendakari cuyo mandato se ha visto caracterizado en sus primeros nueve meses por los duros golpes de su minor¨ªa, como el de la retirada de unos presupuestos abocados a la devoluci¨®n por parte del Parlamento debido a la postura contraria de toda la oposici¨®n. En tan solo un mes, el panorama ha cambiado sustancialmente. Su minor¨ªa se vio atenuada a mediados de septiembre al firmar un acuerdo socioecon¨®mico con el PSE. Tambi¨¦n logr¨® blindar la atenci¨®n sanitaria de la Rioja Alavesa con La Rioja ¡ªa cambio de prestar m¨¢s especialidades a los riojanos¡ª y de paso consigui¨® la foto que ning¨²n otro lehendakari: la imagen con un apaciguado presidente riojano, Pedro Sanz, hist¨®ricamente muy cr¨ªtico con el Gobierno vasco, en la residencia oficial de Urkullu, Ajuria Enea.

A la paz con la comunidad vecina le sigui¨® la semana pasada un acuerdo con las tres diputaciones de Bizkaia, Gipuzkoa y ?lava ¡ªdirigidas por PNV, Bildu y PP, respectivamente¡ª para repartir el nuevo objetivo de d¨¦ficit y realizar nuevas inversiones, el cap¨ªtulo m¨¢s da?ado por los recortes. Ayer, en v¨ªsperas de su viaje, consigui¨® de la mano del PP de Arantza Quiroga, muy afanado en sumarse al acuerdo, los votos suficientes para materializar la reforma fiscal que aportar¨¢ m¨¢s recursos a las arcas p¨²blicas.

Los cambios se centran en rentas del ahorro y deducciones por vivienda y en el Impuesto de Sociedades

Aunque todos los firmantes lo niegan, la realidad es que el clima de ¡°entendimiento¡± que impera entre los firmantes allana el camino para aprobar los presupuestos en una comunidad aut¨®noma en la que todas las principales instituciones est¨¢n gobernadas en minor¨ªa ¡ªsalvo el Ayuntamiento de Bilbao¡ª. Es lo que ha buscado el lehendakari, que en su traje del jefe del Ejecutivo ha reclamado dar ¡°estabilidad institucional¡± a todas las instituciones vascas. Ayer mismo asegur¨®, en un acto en honor del primer lehendakari, Jos¨¦ Antonio Agirre, nombrado en 1936, que es preciso dar continuidad a su filosof¨ªa, que le permiti¨® ¡°formar y dirigir un Gobierno vasco de unidad en los momentos m¨¢s dif¨ªciles de nuestra historia¡± y apost¨® por el ¡°acuerdo institucional como herramienta para lograr los objetivos de la naci¨®n vasca¡±.

Con el debate soberanista que Urkullu ha dejado convenientemente en manos de un PNV sin muchas prisas por impulsarlo, el lehendakari presentar¨¢ a senadores, congresistas y acad¨¦micos en Washington y Nueva York el modelo Euskadi en su nueva etapa en paz, tal y como resaltan sus colaboradores, cuando se cumplen dos a?os del cese de ETA ¡ªque pill¨® a su predecesor precisamente en EE UU¡ª.

Un proceso de paz y convivencia que la comunidad aut¨®noma est¨¢ a¨²n lejos de contagiarse de esos acuerdos transversales que s¨ª ha logrado su clase pol¨ªtica en materia econ¨®mica. El plan de paz del Ejecutivo ha logrado poner de acuerdo a la oposici¨®n porque todos est¨¢n en contra. La ponencia de paz del Parlamento, que ya solo defienden el PNV y el lehendakari, se encuentra congelada con el ¨²nico apoyo de EH Bildu. Y la izquierda abertzale ha exhibido este pasado fin de semana, tras la operaci¨®n policial contra el colectivo de apoyo a los presos Herrira, su fuerza en la calle con una manifestaci¨®n en Bilbao.