Varias familias ocupan en Aldaia un edificio de un banco tras un desahucio
La PAH pide a la entidad propietaria que ofrezca un alquiler social
Varias familias acompa?adas por miembros de la Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH) han ocupado esta ma?ana un edificio con seis viviendas en la localidad valenciana de Aldaia. El bloque, al que han llamado Ca Esperan?a [casa esperanza], es propiedad de un banco desde que se produjo el embargo a "un peque?o constructor que no pudo hacer frente a sus pagos¡±, seg¨²n fuentes de la PAH. Esta acci¨®n, forma parte de un conjunto de iniciativas que la plataforma considera su ¡°obra social¡±. Con esta ocupaci¨®n, la plataforma ha querido apoyar a sus compa?eros catalanes tras conocer la noticia de que el Tribunal de Estrasburgo ha paralizado el desalojo de un bloque de viviendas del banco malo en Salt (Girona), en el que viven 16 familias.
Las llaves siguen colgando en las peque?as cerraduras de los buzones blancos desde que alguien, qui¨¦n sabe cu¨¢ndo, los colocase. Las cocinas, con su flamante, aunque polvoriento, banco de granito, solo necesitan electrodom¨¦sticos para empezar a funcionar. El ascensor, impecable. Los ventanales, climalit. Hasta las bombillas est¨¢n colocadas en los plafones de cada descansillo. Pero el edificio, hasta este mi¨¦rcoles, estaba vac¨ªo.
Las dos ¨²ltimas semanas he dormido en un cajero ?scar Pizarro (31 a?os)
El objetivo de la iniciativa es que el banco propietario del edificio ofrezca a las familias estas viviendas en alquiler social por un precio que no supere el 30% de sus ingresos. Algunos de los nuevos vecinos se afanaban en limpiar las viviendas.
?scar Pizarro (31 a?os), contaba una historia dif¨ªcil: ¡°Yo estaba en un piso de alquiler y al no poder pagar me vi durmiendo en un cajero¡±. Llevaba dos semanas viviendo en la calle. "Hasta enero estuve viviendo en casa de un hombre en Alaqu¨¤s. Pero tuve que salir del piso y me fui a un albergue de Valencia. Estuve en San Juan de Dios seis meses y al volver de un curso de cocina que he hecho este verano en Calpe tuve que volver a la calle. En el CAST de Valencia me dijeron que hab¨ªa estado demasiado tiempo en el San Juan de Dios, porque lo habitual son 3 meses y que no me pod¨ªan seguir ayudando".
Un miembro de la PAH me acogi¨® de manera altruista en su casa en una habitaci¨®n Mar¨ªa Rodr¨ªguez (50 a?os)
Pero ?scar no se ha quedado quieto. ¡°He estudiado un FP de Carpinter¨ªa, he estado trabajando de recepcionista en un hostal un a?o, de reponedor de ropa en un gran centro comercial y mi ¨²ltimo trabajo han sido unas pr¨¢cticas en Calpe de ayudante de cocina¡±. Sonr¨ªe cuando explica lo que significa para ¨¦l tener una vivienda: ¡°Para m¨ª lo es todo porque no es que est¨¦ a punto de ser desahuciado, es que yo ya estaba durmiendo en la calle¡±.
¡°El bloque est¨¢ en un barrio obrero y nos parec¨ªa poco coherente que se encontrara en este estado. Ahora lo hemos recuperado: hemos recuperado L¡¯Esperan?a¡±, explicaba Celes Navarro, portavoz de la PAH. El edificio ocupado, ubicado en el barrio del Cristo, consta de seis viviendas ¡°nuevas pero sin agua ni luz¡±, y las personas que est¨¢n en proceso de habitarlas son ¡°ancianos, parejas con hijos y gente con deudas, de varias poblaciones valencianas", seg¨²n fuentes de la plataforma.
Quiero emprender una nueva vida aqu¨ª Juan Guill¨® (62 a?os)
Otra de las ocupantes del edificio, Mar¨ªa Rodr¨ªguez, madrile?a de 50 a?os, barr¨ªa sonriente y con fruici¨®n el portal, lleno de tierra acumulada durante el tiempo de abandono. Hasta hace unos meses viv¨ªa de alquiler en un piso y dej¨® de poder pagar: ¡°Llevo cinco a?os en el paro. Se me acab¨® el paro y me met¨ª en una habitaci¨®n. Y cuando se me acab¨® el dinero que me prest¨® mi familia, un miembro de la PAH me acogi¨® de manera altruista en su casa en una habitaci¨®n¡±. Asegura que no se niega a pagar un alquiler social, pero pide que este alquiler sea proporcionado. ¡°Si sobramos 400 euros o 300 euros no puede pedirme el banco que pague 500 euros de alquiler. Si no, ?qu¨¦ hago? Un d¨ªa me como una piedra, otro d¨ªa me como un mueble¡¡±.
¡°No me niego a pagar un alquiler social¡±, dec¨ªa otro de los nuevos vecinos, Juan Guill¨® (62 a?os), que fue desahuciado por el IVVSA en 2011. Este ilicitano acamp¨® frente a la Consejer¨ªa de Infraestructuras el pasado mes de marzo para pedir a la consejera Isabel Bonig una soluci¨®n a su situaci¨®n. Con una discapacidad del 46% y una deuda creciente, Guill¨® tiene un deseo: ¡°Quiero emprender una nueva vida aqu¨ª¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.