La huelga asoma por EiTB

¡°Si no se reconoce la ultraactividad del convenio, habr¨¢ huelga en EiTB¡±. El comit¨¦ de empresa del ente p¨²blico de la radio y televisi¨®n vasca lo tiene claro y la direcci¨®n general lo sabe en el marco de unas relaciones inexistentes. ¡°Queremos saber si su ¨²nica postura es acogerse a la reforma laboral¡±, a?ade la representaci¨®n sindical, muy cr¨ªtica con el ¡°enfoque¡± que el ente aplica a las negociaciones del convenio. ¡°Y a partir de ah¨ª vamos a endurecer las medidas hasta poner en negro la tele¡±. De momento, el pr¨®ximo jueves volver¨¢n a movilizarse.

?La exigencia del comit¨¦ es n¨ªtida, pero muy alejada de la posici¨®n de la empresa: ¡°deben reconocer que el actual convenio sigue en vigor hasta que se firme el nuevo¡±, subrayan. En la discrepancia de partida es donde los trabajadores temen que radica el fundamento de la posici¨®n de EiTB: ¡°quieren acogerse a la reforma laboral¡±. Este peri¨®dico ha intentado sin ¨¦xito ponerse en contacto con Andoni Aramburu, director de Estrategia y Comunicaci¨®n del grupo para conocer si es as¨ª.

En el comit¨¦ recuerdan que su exigencia ¡°es viable¡± y solo depende de ¡°la voluntad de la otra parte¡± ya que ¡°la ultraactividad del convenio¡± ha sido admitida en otras entidades p¨²blicas vascas ¡°como Diputaci¨®n, Metro o Euskotren¡±, dicen.

La direcci¨®n sabe que el comit¨¦ ¡°est¨¢ dispuesto a parar la tele¡± si no se desatasca el impasse actual sobre el reconocimiento de la vigencia del actual convenio. La advertencia no es nueva en la estrategia sindical. En 1993 ya se conoci¨®. Entonces, el convenio colectivo que hab¨ªa sido firmado en 1991, con vigencia de dos a?os, establec¨ªa que la subida salarial ser¨ªa la misma que la aplicada a los sueldos de los funcionarios del Gobierno vasco. El incremento de los salarios de los funcionarios ha sido del 6,2 %. Los trabajadores de ETB exig¨ªan, sin embargo, que la subida fuera de 8,2 %.

¡°Si no reconocen la vigencia del convenio pondremos la tele en negro¡±, avisa el comit¨¦

Ahora todo es distinto. La pelea es conceptual. La direcci¨®n del ente debe decir si se acoge a la reforma laboral o se gu¨ªa por una f¨®rmula menos determinante y en l¨ªnea con la f¨®rmula ofrecida por el propio Gobierno vasco a empresarios y sindicatos antes del pasado 7 de julio y que, sin embargo, no tuvo ¨¦xito.

Un clima de conflictividad laboral tensionar¨ªa al m¨¢ximo la complicada situaci¨®n interna por la que ahora atraviesa EiTB, acuciada por una significativa ca¨ªda de audiencia, un aumento constante del d¨¦ficit y una divisi¨®n en su consejo de administraci¨®n por razones pol¨ªticas ¡ªla alusi¨®n a ETA en su plan estrat¨¦gico crea dos bloques¡ª y presupuestarias tras el rechazo a la previsi¨®n de cuentas del pr¨®ximo ejercicio.

La etapa de la directora general, Maite Iturbe, ha empeorado los datos de audiencia que dej¨® su antecesor, Alberto Surio, quien fue objeto desde su llegada de una permanente cr¨ªtica por parte del ¨¢mbito nacionalista. La desafecci¨®n reconocida de un determinado sector pol¨ªtico hacia EiTB durante el mandato de Patxi L¨®pez en el Gobierno vasco provoc¨®, junto a los efectos de una mayor competencia televisiva y los desaciertos en algunas ofertas, una ca¨ªda de la cuota de pantalla que lleg¨® a ser del 7,5% en el segundo canal, durante el tercer trimestre de 2011, considerado entonces ¡°muy preocupante¡±. En junio de 2009, ETB-2 hab¨ªa llegado a una cuota de pantalla del 14,2%.

Sin embargo, acuciado por el descalabro, Surio confi¨® la programaci¨®n a Peio Sarasola, hoy director de ETB. Supuso su vuelta a casa desde Antena 3 y alent¨® la recuperaci¨®n de la audiencia perdida. Esta mejor¨ªa permiti¨® al director general despedirse con una media acumulada del 10,7% y situar a la televisi¨®n vasca en castellano en la segunda opci¨®n en Euskadi despu¨¦s de Telecinco, recuperando de paso el liderazgo informativo perdido en enero de 2010.

Hoy, las cifras vuelven a ser inquietantes. En el segundo canal la cuota es de 8,8%, mientras apenas llega al 2% en ETB-1 y la televisi¨®n vasca es la cuarta opci¨®n en Euskadi. En paralelo, los seis primeros meses del a?o arrojaron un d¨¦ficit de seis millones. Como radiograf¨ªa de situaci¨®n, el comit¨¦ de empresa entiende que ¡°se siguen pagando los errores de la etapa de Andoni Ortuzar donde se hizo una televisi¨®n de un pa¨ªs rico¡±.

Pero esta ca¨ªda de audiencia no se ha trasladado al consejo de administraci¨®n. Desde la oposici¨®n al PNV, las cr¨ªticas en EiTB van por otras v¨ªas. En EH Bildu, su objetivo es la potenciaci¨®n del euskera y en ese aspecto admiten su ¡°satisfacci¨®n¡± por el esfuerzo que la direcci¨®n general ha prestado a este idioma, muy reforzado en la actual programaci¨®n. Adem¨¢s, se trata de una apuesta es admitida com¨²nmente: ¡°deber¨ªa ser la principal raz¨®n de un canal p¨²blico en Euskadi¡±, llega a decir un consejero no nacionalista. En cambio, las principales discrepancias de la izquierda abertzale se detienen en la pol¨ªtica de personal, compartiendo as¨ª la esencia de las quejas de los sindicatos mayoritarios LAB y ELA, como ya evidenciaron el pasado martes durante su rechazo a los presupuestos de 2014. Socialistas y populares, sin embargo, empiezan a preocuparse por el sesgo de algunas informaciones pol¨ªticas, en l¨ªnea con experiencias ya vividas en etapas anteriores al mandato de Surio y lo han denunciado en el consejo, aunque sin demasiado ¨¦xito. La aut¨¦ntica preocupaci¨®n del equipo de Iturbe radica en saber si el malestar sindical llegar¨¢ a explotar.