?Es diferente aqu¨ª el mercado de trabajo?

?Es diferente el mercado de trabajo en el Pa¨ªs Vasco que en Espa?a? La pregunta es relevante porque a lo largo de esta crisis se ha argumentado que el primero podr¨ªa contar con factores diferenciales que le dotan de una mayor resistencia/resiliencia a los vaivenes del ciclo econ¨®mico. Veamos.

La evoluci¨®n del ciclo econ¨®mico sigue un patr¨®n casi id¨¦ntico: el Pa¨ªs Vasco entr¨® ligeramente m¨¢s tarde en la crisis (alrededor de 6 meses), le afect¨® de la misma manera e incluso de un modo m¨¢s fuerte a su industria y se est¨¢ recuperando algo m¨¢s tarde que el conjunto del Estado. Esta tendencia ha sido muy similar a las de otras crisis de demanda y, en nuestra opini¨®n, est¨¢ muy ligada a la mayor especializaci¨®n industrial de la econom¨ªa vasca (16,2% y 13,1% del empleo en industria y construcci¨®n en Espa?a en 2008, frente 24,2% y 9,7% en el Pa¨ªs Vasco); la ca¨ªda de la demanda tarda m¨¢s en llegar a los bienes industriales, pero llega, mientras que en el ciclo alcista la recuperaci¨®n es tambi¨¦n m¨¢s lenta. As¨ª, el llamativo dato de que el Pa¨ªs Vasco muestre una mucho menor tasa de paro en la actualidad (el 15,4%, frente al 26,3% en Espa?a) se debe fundamentalmente a su mejor situaci¨®n de partida, con unas tasas de desempleo que ya estaban casi un 50% por debajo de la espa?ola antes de comenzar la crisis y no, como en muchos casos se ha argumentado, porque su econom¨ªa se haya comportado mejor frente a la crisis

Por otro lado, en el Pa¨ªs Vasco el ajuste a la crisis se ha producido fundamentalmente en t¨¦rminos de empleo siguiendo una estructura muy similar a la de Espa?a y en las ant¨ªpodas de lo que ha pasado en pa¨ªses como Holanda, Italia, Portugal que a pesar de haber soportado intensamente la crisis han mantenido mucho mejor el empleo. As¨ª una ca¨ªda de 1 punto en el PIB implica una ca¨ªda de 2,5 puntos en el nivel de ocupaci¨®n (2,4 veces en Espa?a frente a s¨®lo el 0,2, 0,4 y 1,7 en los pa¨ªses europeos citados respectivamente) y la ca¨ªda acumulada del PIB de 6,3 puntos que ha causado la crisis ha supuesto un bocado de 15,8 puntos porcentuales en el nivel de empleo en el Pa¨ªs Vasco (7,5% de ca¨ªda de PIB y 17,8% del empleo en Espa?a).

Este particular fen¨®meno se explica en base a dos elementos estructurales de gran calado. El primero y m¨¢s estudiado es sin duda, la extrema rigidez y la complejidad del mercado de trabajo que dejaba muy poco margen a la negociaci¨®n de las condiciones laborales en funci¨®n de la evoluci¨®n del ciclo econ¨®mico. Como es l¨®gico este factor, salvo ligeras diferencias sectoriales, aplica igualmente en Espa?a y el Pa¨ªs Vasco que est¨¢n sometidos a la misma legislaci¨®n laboral. Pero tampoco se puede olvidar, sin embargo, que la propia estructura productiva, muy intensiva en mano de obra, hace que ajustarse en empleo haya sido la estrategia l¨®gica para muchas empresas. Esto resulta m¨¢s que obvio para el caso de Espa?a por su elevada especializaci¨®n en el sector de la construcci¨®n en el que la demanda se ha colapsado, pero tambi¨¦n para muchas empresas industriales vascas (y tambi¨¦n espa?olas) en sectores tecnol¨®gicamente maduros y poco intensivos en innovaci¨®n y conocimiento.

Siendo esto as¨ª, resulta incompleto el camino emprendido por el Gobierno de Espa?a que ha focalizado su pol¨ªtica en la consolidaci¨®n fiscal y las reformas estructurales, en particular, su reforma laboral como palancas para salir de la crisis, dejando de lado la pol¨ªtica de transformaci¨®n del tejido productivo. Del mismo modo, ser¨ªa muy decepcionante que el Pa¨ªs Vasco ampar¨¢ndose en una supuesta fortaleza de su mercado de trabajo que los datos no avalan, se acogiese al mismo tipo de pol¨ªticas.

Si alguna vez se hab¨ªa ido, resulta evidente que el momento de la pol¨ªtica industrial con may¨²sculas ha llegado, porque los nuevos tiempos demandan un tejido productivo diferente y m¨¢s intensivo en conocimiento. Un modelo en el que despedir no sea el recurso m¨¢s coste-eficiente para las empresas porque su capital acumulado se encuentra en sus personas y no en sus m¨¢quinas e infraestructuras. Para este tipo de iniciativas, el Pa¨ªs Vasco s¨ª parte con una clara ventaja respecto a Espa?a porque por su tradici¨®n y experiencia industrial cuenta con una mano de obra m¨¢s preparada (el 76% de los ocupados y 63% de los parados tienen formaci¨®n secundaria o terciaria en el Pa¨ªs Vasco, frente al 64% y 46% respectivamente en Espa?a).

Maite Mart¨ªnez Granado e I?aki Barredo Ardanza, economistas y socios de Naider.