Una pista junto a Do?ana

El espacio a¨¦reo de Huelva acoger¨¢ en 2015 el vuelo de aviones no tripulados de media y gran capacidad. Algunos, como el Milano, poseen una autonom¨ªa de 20 horas y pueden elevarse a 26.000 pies (m¨¢s de 8.000 metros). Estos dispositivos se crear¨¢n en el primer centro espa?ol de experimentaci¨®n de este tipo de aeronaves, conocidas como drones, que est¨¢ ubicado junto a la sede que el Instituto Nacional de T¨¦cnica Aeroespacial (INTA) tiene en el paraje del Arenosillo (Mazag¨®n, Moguer). Esta ubicaci¨®n ha generado las cr¨ªticas de la organizaci¨®n ecologista WWF por la proximidad de la zona con el Parque Nacional de Do?ana.

El denominado proyecto Ceus del Centro de Ensayos de Sistemas No Tripulados est¨¢ promovido por el INTA en cooperaci¨®n con la Agencia de Innovaci¨®n y Desarrollo (IDEA) de la Junta y el Ministerio de Econom¨ªa y Competitividad. Se trata de un gran laboratorio donde se practicar¨¢n ensayos, validaciones y simulaciones con prototipos capaces de despegar, volar y aterrizar autom¨¢ticamente sobre la pista de dos kil¨®metros de la que dispondr¨¢ el complejo.

En Europa, solo Gran Breta?a y Suecia poseen instalaciones de estas caracter¨ªsticas. Villacarrillo (Ja¨¦n) cuenta con el centro Atlas, en el que tambi¨¦n participa la agencia IDEA, pero especializado en aviones no tripulados ligeros. El futuro centro del Arenosillo, escogido por su cercan¨ªa al mar y la escasa saturaci¨®n del espacio a¨¦reo, ser¨¢ el ¨²nico de Espa?a destinado a aeronaves de grandes dimensiones.

El responsable del Ceus y subdirector del Arenosillo, ?lvaro G¨®mez, subray¨® la importancia del complejo aeron¨¢utico. ¡°Los drones son el futuro¡±, considera G¨®mez. ¡°La industria aeron¨¢utica reclama esta tecnolog¨ªa. Hablamos de aeronaves que pueden estar en vuelo semanas y eso es impensable con un piloto a bordo¡±, indica.

Estos ¡°robots a¨¦reos¡±, como los califica Jaime Cabeza, jefe de ¨¢rea de sistemas no tripulados del INTA, han sido empleados para misiones de seguridad y defensa, como los entrenamientos del Ej¨¦rcito de Tierra para misiones en Afganist¨¢n. El Ej¨¦rcito del Aire los ha empleado para el adiestramiento de sus pilotos y para la realizaci¨®n de simulaciones. Sin embargo, dada la efectividad de las aeronaves para la captaci¨®n de informaci¨®n (est¨¢n dotados, entre otros mecanismos, de radares, y sensores infrarrojos) est¨¢n desarrollando un gran potencial para su uso civil, lo que abre nuevas oportunidades a la industria.

Entre las aplicaciones civiles m¨¢s destacables figuran la gesti¨®n de desastres naturales, vigilancia de fronteras, la lucha contra incendios forestales o el narcotr¨¢fico, la inspecci¨®n de instalaciones, recogida de datos meteorol¨®gicos y muestras ambientales, cine, elaboraci¨®n de mapas digitales o realizaci¨®n de vuelos en entornos agresivos.

El proyecto Ceus cuenta con una inversi¨®n de 40 millones de euros, pagados con fondos europeos, dinero del propio INTA y de la Agencia IDEA y est¨¢ previsto que genere 250 puestos de trabajo directos y 500 indirectos. Para su puesta en marcha a¨²n quedan pendientes algunos pasos administrativos, como la Declaraci¨®n de Impacto Ambiental, pero el subdirector del INTA, Bartolom¨¦ Marqu¨¦s, espera que las obras del centro puedan comenzar entre mayo y junio de 2014.

Para facilitar ese camino, el Consejo de Gobierno andaluz ha declarado ¡°la prevalencia del inter¨¦s p¨²blico cient¨ªfico-tecnol¨®gico sobre el forestal¡±. Con ese tr¨¢mite, se proceder¨¢ a la desafecci¨®n de 75 hect¨¢reas de pinar del monte p¨²blico de titularidad del Ayuntamiento de Moguer. Se salda as¨ª el principal escollo para los promotores del proyecto, pero no para los ecologistas, que difieren de la idoneidad del suelo elegido. ¡°No nos oponemos al desarrollo de la tecnolog¨ªa, que apoyamos especialmente para fines pac¨ªficos, pero estamos en desacuerdo con su ubicaci¨®n¡±, explica Juanjo Carmona, responsable de WWF en Do?ana. La iniciativa recoge que ¡°solo puede ejecutarse en terreno forestal de Moguer, un t¨¦rmino que linda con zonas de mucho menor valor desde el punto de vista ambiental, lo que supone no tener que deforestar 75 hect¨¢reas de monte¡±, explica. El dirigente ecologista subraya que la elecci¨®n del lugar para este proyecto demuestra, a su vez, ¡°el escaso valor¡± que la Administraci¨®n da a salvaguardar el monte p¨²blico.

La organizaci¨®n no entiende por qu¨¦ Do?ana tiene que ser siempre la diana de todos los proyectos, con relaci¨®n a la iniciativa del gasoducto. Juanjo Carmona se?ala que para la organizaci¨®n ecologista no existe esa prevalencia del uso cient¨ªfico frente al forestal. Por eso, subraya que han presentado alegaciones a la Declaraci¨®n de Impacto Ambiental. WWF estudia qu¨¦ otras medidas, incluso legales, pueden adoptar para que la iniciativa no se sit¨²e en zona de monte p¨²blico. Carmona destaca que la propia Junta ¡°reconoce en el expediente de descatalogaci¨®n que es incapaz de aportar datos cient¨ªficos para demostrar si en la zona contigua a la se?alada para el proyecto hay condiciones adversas, como el viento, para desarrollar la iniciativa, como aduce la empresa¡±.