C¨ªrculo virtuoso
Un variopinto elenco musical da la cara por el C¨ªrculo de Bellas Artes, amenazado por la crisis y la disminuci¨®n de subvenciones. Kiko Veneno, Loquillo o Amaral cedieron sus voces por el centro cultural
"Al abandono t¨² me dejaste, al abandono t¨² me dejaste¡±, cantaba Tomasito mientras zapateaba fren¨¦tico y se levantaba la camisa. Seguro que no era la intenci¨®n de los autores de la canci¨®n, enfocada al desamor desgarrado, pero podr¨ªa ser el grito de despecho de la Minerva que corona el edificio del C¨ªrculo de Bellas Artes hacia unas administraciones que han recortado el 90% de sus aportaciones al centro cultural madrile?o.
Fue al final del minifestival organizado bajo el lema ¡°Da la cara por el C¨ªrculo, da la cara por tu cultura¡±, en el que actu¨® un variopinto all-star de la m¨²sica espa?ola, de Kiko Veneno a Loquillo, Coque Malla o Fuel Fandango, y en el que se pudo ver juntos sobre un escenario a Rosendo y su hijo, el cantante de reggae Rodrigo Mercado.
¡°Luchemos por el f¨²tbol, no dejemos que se muera. Tambi¨¦n hay que luchar por el Zara, el Bershka y el H&M, que no nos quedemos sin pantalones de pitillo¡±, vacilaba Joaqu¨ªn Reyes, presentador, parodiando las proclamas reivindicativas que se podr¨ªan haber escuchado durante la noche.
La mayor¨ªa de ellas, sin embargo, fueron m¨¢s sutiles e imaginativas. La que m¨¢s, probablemente, la de Silvia P¨¦rez Cruz, que emocion¨® cantando junto a Kiko Veneno Gallo rojo, gallo negro, el himno antifascista de Chicho S¨¢nchez Ferlosio. Instada antes de su actuaci¨®n a contar sus razones para estar en el edificio de la calle Alcal¨¢, la cantante catalana dej¨® que respondieran las palabras de Ferlosio: ¡°El gallo negro era grande, pero el rojo era valiente¡±.
Amaral fueron m¨¢s expl¨ªcitos: ¡°El C¨ªrculo es importante para nosotros, porque una de las primeras veces que vinimos a tocar a Madrid, por arte de birlibirloque acabamos tocando en este mismo teatro en un Festimad. Luego hemos venido muchas m¨¢s veces, y en la situaci¨®n actual nos tocaba estar aqu¨ª¡±, cont¨® Eva Amaral un rato antes de subir al escenario, desde donde Coque Malla deseaba ¡°que no sea m¨¢s que un mal sue?o que est¨¦ en el aire la existencia de este lugar¡±.
Que quede claro que el C¨ªrculo no se est¨¢ muerto ni agonizante, pero Juan Barja, director de la instituci¨®n, ve muy negro el futuro, de no revertirse la tendencia: el presupuesto ha ca¨ªdo en cinco a?os a la mitad (4,6 millones de euros), por la crisis (¡°hay menos alquileres de espacios del edificio y menos gente que paga entradas¡±) y por la abrupta bajada en las subvenciones: ¡°Un 90% menos. Por ahora la deuda que tenemos es insignificante, pero va a crecer. Y hablamos del ¨²nico centro cultural de este tama?o en Espa?a, junto al CCCB de Barcelona. Si no existiera, el Estado tendr¨ªa que crearlo¡±.
Sobre la tarima de la sala Fernando de Rojas se sucedieron las actuaciones a lo largo de casi cuatro horas: Sole¨¢ Morente aflamenc¨® Palabras para Julia, Eva Amaral se desga?it¨® con Revoluci¨®n, Rosendo pidi¨® un poco de Verg¨¹enza torera y Kiko Veneno volv¨ªa a aparecer para interpretar su Ser¨¦ mec¨¢nico por ti junto a Muchachito Bombo Infierno. Al final, Tomasito denunci¨® a los ¡°tiburones que se r¨ªen de nosotros¡± en Se?ores ladrones. Esta vez s¨ª estaba claro a qui¨¦n iba dirigida la invectiva del jerezano.
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