¡°He sufrido una campa?a de acoso y de ataque sistem¨¢tico¡±
La decana del Colegio de Abogados de Madrid, Sonia Gumpert, cumple un a?o en su cargo y se enfrenta a un pol¨¦mico proceso por la externalizaci¨®n del servicio m¨¦dico
El Colegio de Abogados de Madrid (ICAM) vivi¨® la madrugada del 19 de diciembre de 2012 una de las jornadas m¨¢s convulsas de su historia. Las elecciones para elegir nuevo decano acabaron con la intervenci¨®n de la polic¨ªa. Despu¨¦s de cuatro d¨ªas de debate, la junta electoral nombr¨® a Sonia Gumpert (Madrid, 1966), que ahora ha visto refrendado su cargo por los jueces con el archivo de la denuncia interpuesta por la oposici¨®n. Un a?o despu¨¦s tiene reabierta una crisis en el colegio por el futuro inminente del servicio m¨¦dico, que se decide hoy jueves.
Pregunta. ?C¨®mo ha sido este primer a?o al frente del colegio?
Respuesta. Muy intenso. Empez¨® de una forma pol¨¦mica, pero ahora se ha solventado con un auto de la Audiencia Provincial que ha descartado con el sobreseimiento libre del procedimiento que se segu¨ªa iniciado contra nosotros y ha solventado cualquier problema sobre nuestra legitimidad.
P. Reconocer¨¢ que ha sido un a?o duro.
R. S¨ª, no solo por esta circunstancia que es dura y grave por la trascendencia pol¨ªtica y medi¨¢tica que ha tenido, sino tambi¨¦n por tomar las riendas de una instituci¨®n antigua, importante y que es una organizaci¨®n importante, con 72.000 colegiados. Eso ha supuesto un reto de trabajo important¨ªsimo, pero va muy bien porque ya hemos cumplido el 50% del programa.
P. En este a?o ha sufrido bajas incluso dentro de su junta de gobierno.
¡°Con la mutua se garantizan los m¨¦dicos¡±
Las lanzas contin¨²an en todo lo alto en el Colegio de Abogados de Madrid. El exdecano Antonio Hern¨¢ndez-Gil es la persona que estar¨ªa al frente de la mutua que gestionar¨¢ el servicio m¨¦dico en caso de que siga adelante el proyecto aprobado el 7 de noviembre de 2011. Detr¨¢s de esta gesti¨®n est¨¢ la asistencia sanitaria de unas 45.000 personas, que pagan unos 430 euros al a?o. Esto genera un negocio de unos 27 millones de euros, lo que lo convierte en muy apetecible para controlarlo.
Hern¨¢ndez-Gil afirma que ¡°con la mutua se garantiza el servicio m¨¦dico¡± para los abogados, ya que se podr¨¢ abrir a otras personas o colectivos de forma que aumenten los ingresos. ¡°Hay un peque?o y paulatino descenso de afiliados conforme pasan los a?os, por lo que debe abrirse a otros beneficiarios¡±, destaca el exdecano. Este recuerda que la mutua no tiene ning¨²n ¨¢nimo de lucro, como ocurrir¨ªa con una aseguradora privada. Mantiene adem¨¢s que, en caso de que hubiera beneficios o se cerrara en un futuro, el patrimonio cedido revertir¨ªa de nuevo al colegio, que es el que lo ha cedido.
La mutua recibi¨® el visto bueno del Ministerio de Econom¨ªa el 18 de diciembre de 2012, en plenas elecciones, y deber¨ªa haberse creado en el plazo m¨¢ximo de un a?o. Al dilatarse este proceso, la junta rectora ha pedido una pr¨®rroga de seis meses, que le han concedido. Detr¨¢s de su constituci¨®n y su inicio existe un problema como es el que los colegiados con m¨¢s de 50 a?os de afiliaci¨®n no pagan ninguna cuota. Esto supone un mill¨®n de euros que desembolsar¨ªa al a?o el colegio. ¡°Es un servicio que se ha dado hasta ahora, por lo que ese gasto ya existe. La pregunta es saber que pasar¨ªa con estos beneficiarios en caso de que se pase a una entidad privada¡±, se cuestionaba Hern¨¢ndez-Gil.
¡°El servicio ha sido un activo muy importante del colegio y no se debe perder¡±, resume el exdecano, quien recuerda que su equipo y ¨¦l no tiene ¡°la menor voluntad de permanecer al frente de la misma¡±.
R. Ha habido un principio muy pol¨¦mico que ha generado una posici¨®n dura, incluso para los miembros de la junta de gobierno. Ha habido dos personas que se han apartado por la imputaci¨®n y la carga de trabajo. Otros dos se marcharon por los objetivos y el programa de nuestra candidatura.
P. ?Ha recibido presiones por la forma de dirigir el colegio?
R. Directas, no porque me habr¨ªa ido al juzgado, pero s¨ª he sufrido una campa?a de acoso y de ataque sistem¨¢tico tan absurdo como decirnos desde el d¨ªa uno que est¨¢bamos incumpliendo el programa. No me ha preocupado mucho respecto al colectivo porque los abogados inmediatamente han sabido reconocer el absurdo de estos mensajes. Ha habido gente de nuestro equipo que se ha apartado de nuestros objetivos y han empezado una campa?a de acoso, de acusaciones, de manipulaciones, de medias mentiras, de ataques personales. No han parado en medios para lanzar mensajes de desprestigio personal y profesional y por tanto contra la instituci¨®n.
P. Habla de un colectivo cr¨ªtico, pero ha sido muy continuista durante a?os. ?No cree?
R. Pero porque no hab¨ªa alternativa que les interesaran. De hecho, el porcentaje de participaci¨®n en las elecciones era siempre baj¨ªsimo porque no hab¨ªa candidaturas con las que los abogados se identificaran. Esa es nuestra gran virtud. Somos como la mayor¨ªa de los colegiados madrile?os.
P. Los jueces de lo penal le han dado la raz¨®n. Est¨¢ abierto el proceso contencioso. ?Actu¨® ¨¦ticamente aquella noche?
R. S¨ª, sin ninguna duda. Lo que hicimos fue llamar a la participaci¨®n de los abogados, lo que era nuestro derecho, adem¨¢s de nuestra obligaci¨®n, al igual que las dem¨¢s candidaturas. La diferencia es que nosotros no nos fuimos al juzgado y ellos s¨ª, porque nosotros ganamos y ellos perdieron. Es un poco fariseo que nos reprochen haber llamado a la participaci¨®n de los abogados. Me parece de juzgado de guardia.
P. ?Cree que tambi¨¦n se archivar¨¢ el proceso contencioso?
R. S¨ª, no se estimar¨¢ la demanda por la sencilla raz¨®n de que aqu¨ª no hay reglamento electoral por la misma raz¨®n de que estos mismos que ahora denuncian irregularidades son los mismos que no han desarrollado un reglamento electoral.
P. ?Qu¨¦ ocurre con el servicio m¨¦dico?
R. El servicio m¨¦dico est¨¢ en un proceso de externalizaci¨®n que se inici¨® en la junta general del 7 de noviembre de 2011, de forma que saliera fuera del colegio. Nos lo encontramos cuando llegamos al colegio y ya parcialmente ejecutado. Y adem¨¢s en una parte importante como es la constituci¨®n de la mutua para funcionar en el ramo del patrimonio y la aportaci¨®n del patrimonio por valor de seis millones de euros que el colegio acord¨®. En ese punto que nos corresponde ejecutar, detectamos varios puntos que queremos someter a los colegiados.
P. ?Qu¨¦ puntos son esos?
R. El primero es someter a su votaci¨®n algo que no se explic¨® el 7 de noviembre y es que si los colegiados quieren aportar una cantidad anual a ese servicio. Ser¨ªa de un mill¨®n de euros y est¨¢ dentro del plan de la mutua. Queremos darles la voz y el voto.
P. Pero no es el ¨²nico.
R. Hay un planteamiento que no se ha reflejado convenientemente en los estatutos como era la posibilidad de retorno al colegio de esos seis millones de euros, en el caso de que se liquidara la mutua en un futuro. Por ¨²ltimo, hay una cuesti¨®n que es la de garantizar y exigir a quien va a ser el gestor en el futuro que adopte medidas que no nos constan como acordadas para que el servicio m¨¦dico sea viable. Los expertos nos dicen que el servicio es deficitario y que no ve qu¨¦ medidas prev¨¦ la mutua para hacerlo rentable y sacarlo adelante. No quiero decir que no existan. Ahora mismo no nos constan como previstas.
P. Pero hay dos posturas bien diferenciadas.
R. La junta est¨¢ convocada con dos propuestas alternativas y excluyentes. La primera es la mutua, que es la que viene derivada del 7 de noviembre. En el caso de que esto no se acordara por los colegiados, tenemos un plan b para no vernos obligado a cerrar el servicio. La segunda alternativa es la externalizaci¨®n en otro operador, porque el servicio m¨¦dico no se puede quedar en el colegio.
P. ?Puede no tener p¨¦rdidas el servicio m¨¦dico?
R. Puede tenerlo, pero fuera del colegio. Dentro solo puede venderlo a los colegiados, no a los de fuera. Es ah¨ª donde se produce ese desequilibrio entre los j¨®venes, que no tienen coste, y los mayores, que s¨ª lo tienen.
P. ?Est¨¢n utilizando los que se quieren quedar con la mutua el discurso del miedo?
R. Estoy recibiendo mensajes demag¨®gicos y manipuladores que dicen que lo que no es la mutua es privatizar el servicio m¨¦dico, cuando no es cierto. Se lanzan mensajes que parten del desconocimiento del proceso en curso o de una manipulaci¨®n del mismo. Hablar de privatizaci¨®n es falso y demag¨®gico, porque lo que se trata es de vincular este proceso al pol¨¦mico proceso de la sanidad p¨²blica. Y esto no tiene nada que ver. El servicio m¨¦dico del colegio siempre ha sido privado. Es absurdo privatizar lo que ya es privado.
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