Fallece Carlos P¨¦rez, conservador del IVAM y el Reina Sof¨ªa
Experto en vanguardias, impuls¨® en el Muvim el dise?o gr¨¢fico, la fotograf¨ªa y la ilustraci¨®n
Pedagogo, experto en arte y vanguardias y, en resumen, descubridor de artistas e historias para nuevos p¨²blicos a trav¨¦s de exposiciones y libros, Carlos P¨¦rez Garc¨ªa (Valencia, 1947) falleci¨® el d¨ªa de Navidad en su casa de la Finca Roja de Valencia y ser¨¢ incinerado este viernes a las 11.00 en el tanatorio municipal. La ¨²ltima vez que apareci¨® en p¨²blico fue en el colegio mayor Rector Peset de Valencia el d¨ªa 28 de noviembre con ocasi¨®n de la presentaci¨®n de Buffalo Bill romance, un libro de Media Vaca espectacular como el mundo del circo al que se aproxima, erudito por el detalle de las historias que cuenta y enlaza, vanguardista como la poes¨ªa de Vicente Huidobro que recoge, e inclasificable porque se sale de los cauces trillados en el arte de la edici¨®n.
En la intervenci¨®n improvisada que, desde la silla de ruedas en la que circulaba, tuvo ese d¨ªa en la Sala de la Muralla del colegio, rodeado de cuadros de su amigo Rafael Ram¨ªrez Blanco colgados en las paredes, Carlos P¨¦rez avis¨® de que, dadas las circunstancias y en referencia a su enfermedad, era mejor dedicarse a escribir cosas cortas. A pesar de ese prop¨®sito, aprovech¨® una breve y parcial recuperaci¨®n en su delicado estado de salud para embarcarse temporalmente en un nuevo proyecto sobre Edward Lear, el poeta del nonsense, e imaginar y hasta planificar un viaje a Corf¨², isla que este fant¨¢stico autor visit¨® en varias ocasiones.
Lear comparte algunas de las caracter¨ªsticas propias del mundo de P¨¦rez: una escritura que puede hacer a la vez las delicias de ni?os y adultos, amor por la ilustraci¨®n y el dibujo, su particular relaci¨®n con la m¨²sica y las canciones, y el sentido del humor est¨¢n entre ellas. Al igual que en el libro sobre Buffalo Bill, en el anterior, el escritor y pedagogo valenciano hilvanaba el imaginario del circo y las vanguardias, mano a mano con el dibujante Miguel Calatayud. Kembo, cuyas ilustraciones merecieron la inclusi¨®n en la Honour List 2012 del Consejo Internacional para el Libro Juvenil que otorga los prestigiosos Premios Andersen, rend¨ªa homenaje al universo circense, jazz¨ªstico y cinematogr¨¢fico.
El piano donde toc¨® jazz, blues o foxtrot en otros momentos, los carteles de circo que cuelgan en las paredes, o los juguetes que reposan en las estanter¨ªas de la casa de la finca donde ha compartido la ilusi¨®n de una Valencia moderna con su esposa Margarita y su hija Marta, son parte sustancial de ese mundo.
Entre Kembo y Buffalo Bill, Carlos P¨¦rez fue condecorado en el Institute Fran?ais de Valencia como Caballero de la Orden de las Artes y las Letras de Francia porque, como dijo el consejero cultural de la embajada gala, hab¨ªa hecho "m¨¢s que diez directores del Instituto Franc¨¦s juntos" y hab¨ªa llevado "el esp¨ªritu franc¨¦s a las instituciones muse¨ªsticas espa?olas". Un buen ejemplo fue la exposici¨®n El cartel moderno franc¨¦s del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sof¨ªa (MNCARS), en colaboraci¨®n con Fran?ois L¨¦v¨¨que.Trabaj¨® como conservador del Institut Valenci¨¤ d'Art Modern (IVAM) y del MNCARS. Tras su etapa madrile?a, volvi¨® a Valencia como responsable del programa expositivo del Museu Valenci¨¤ de la Il¡¤lustraci¨® i de la Modernitat (Muvim). Anim¨® la programaci¨®n de este ¨²ltimo con un vigor sin precedentes ajustado a las se?as de identidad de su nombre, ilustraci¨®n y modernidad. En el Reina Sof¨ªa vincul¨® las artes pl¨¢sticas y el dise?o gr¨¢fico a otras de sus querencias: la m¨²sica contempor¨¢nea, con la producci¨®n de espect¨¢culos musicales. En paralelo, particip¨®, asimismo, en proyectos desarrollados por otros museos, como los Picasso de Barcelona y M¨¢laga.
Previo a su trayectoria muse¨ªstica, aunque muy relacionado con ¨¦sta, es el dise?o de materiales did¨¢cticos, con influencias de Maria Montessori y la Bauhaus, as¨ª como la puesta en marcha del Taller de l'Infant, un proyecto colectivo que fabric¨® y comercializ¨® estos dise?os vanguardistas en los a?os setenta. A mediados de los ochenta fue director general de Servicios Sociales de la Generalitat Valenciana. La inquietud social es tambi¨¦n una constante de su biograf¨ªa: los trabajadores del Taller eran discapacitados que percib¨ªan un salario semanal, como recuerda Artemio Sandoval en Buffalo Bill Romance.
Carlos P¨¦rez so?¨® con que Valencia dejara de ser lo que ¨¦l denomin¨® como "la capital de la Tierra de la Modernidad Imposible" y acarici¨® esa realidad en la primera etapa del IVAM, en cuyo departamento de Did¨¢ctica y Comunicaci¨®n empez¨® a trabajar en 1989. En esa ¨¦poca puso en marcha dos exposiciones sobre Torres Garc¨ªa y sus juguetes de vanguardia, que pasaron por el IVAM, la Instituci¨®n Libre de Ense?anza de Madrid y La Pedrera de Barcelona, en esa l¨ªnea central que refleja su pasi¨®n por el di¨¢logo entre la pedagog¨ªa y el arte modernos, la misma que manifiesta una peque?a gran obra de 1992 titulada Alfabestiari, escrita y dibujada al alim¨®n con su amigo Francesc P¨¦rez i Morag¨®n, donde el "animal m¨¢s bello del mundo" es invisible.
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