La Zona Franca de C¨¢diz registra m¨¢s de 24 millones de euros de p¨¦rdidas
La deuda de 190 millones y la devoluci¨®n de 39 agravan la situaci¨®n del recinto
La Zona Franca de C¨¢diz ha visto agravarse su situaci¨®n econ¨®mica en solo seis meses. El 31 de julio el informe anual de cuentas registraba p¨¦rdidas de 21.350.266 euros, cuatro veces m¨¢s que el a?o anterior. En los ¨²ltimos meses, lejos de reconducirse esta situaci¨®n, ha empeorado hasta incrementar las p¨¦rdidas hasta los 24.275.201 con las cuentas ya consolidadas de 2012. La deuda se ha disparado de 128 a 190 millones de euros. El PSOE cree que es inminente ¡°la muerte econ¨®mica¡± del Consorcio mientras que el PP trata de culpar a los anteriores responsables socialistas, al recordar que el organismo estatal tendr¨¢ que devolver 39 millones de fondos del Ministerio de Industria por no haberles dado uso.
Las cuentas de la?Zona Franca de C¨¢diz se aprobaron el pasado jueves en un pleno, aunque los dos miembros del PSOE votaron en contra. Ya hace seis meses advirtieron de la gravedad de las cifras, que reflejaban una merma significativa del poder econ¨®mico del Consorcio, con la multiplicaci¨®n por cuatro de las p¨¦rdidas, una situaci¨®n atribuida a la p¨¦rdida del valor de los suelos y edificios propiedad de la Zona Franca, que se ha deteriorado en apenas un a?o en 14 millones de euros por la depresi¨®n del mercado inmobiliario espa?ol.
En el informe de gesti¨®n del 31 de julio faltaba la auditor¨ªa de la Intervenci¨®n del Estado, que s¨ª se incluye en las cuentas consolidadas aprobadas en pleno. El interventor certifica los problemas econ¨®micos y los concreta poniendo ejemplos como los surgidos en un pol¨ªgono industrial de Benaocaz, con deficiencias en su construcci¨®n y pagos pendientes de casi cuatro millones, o el parque de Palmones, en Los Barrios, valorado en 6,9 millones. El informe lamenta que no se hayan dispuesto de tasaciones actualizadas que permitan evaluar el valor recuperable de estos activos, con lo que la cifra de p¨¦rdidas podr¨ªa ser incluso mayor que la marcada.
El interventor tambi¨¦n destaca las dificultades para medir la cuenta de ganancias y p¨¦rdidas por la falta de claridad en la disoluci¨®n de sociedades que depend¨ªan de Zona Franca como Rilco o Quality Food. Rilco s¨ª ha podido ser disuelta, una vez ha concluido el juicio penal contra los ex delegados del Estado de la Zona Franca, aunque el abogado del Estado ha recordado que hay pendiente un recurso al Tribunal Supremo que podr¨ªa afectar a esta decisi¨®n. De hecho, esa sentencia definitiva es lo que ha impedido hasta ahora a la Zona Franca cobrar los 4,3 millones que el Tribunal de Cuentas conden¨® a pagar a los dos exdelegados. Dinero que deber¨ªa ir a las arcas del Consorcio, aunque el interventor no ha podido determinar qu¨¦ consecuencias tendr¨¢ en un futuro.
Tambi¨¦n se ha disuelto Quality Fish y Quality Service pero no Quality Food porque la instrucci¨®n que investiga las irregularidades detectadas en esta sociedad por la v¨ªa penal sigue adelante. Si la resoluci¨®n de este caso resultara contraria a los intereses de la Zona Franca, tendr¨ªa que abonar 13 millones de euros al expropietario de esta empresa de alimentaci¨®n, Manuel Garc¨ªa Gallardo, quien ha ganado todas sus reclamaciones por la v¨ªa mercantil.
¡°Lo que va a llegar es la muerte irreversible de la Zona Franca. No hay peor gesti¨®n posible. No va a ser posible mantenerla porque no se est¨¢ impulsando la actividad empresarial que es el verdadero objeto del Consorcio¡±, lament¨® la concejala socialista, Marta Mel¨¦ndez.
La alcaldesa y presidenta del Consorcio, Te¨®fila Mart¨ªnez, del PP, evit¨® pronunciarse sobre los datos de esta grave situaci¨®n econ¨®mica pero s¨ª culp¨® al anterior responsable de la Zona Franca, el socialista, Jos¨¦ de Mier, por la obligatoriedad de devolver al Ministerio de Hacienda ayudas a la reindustrializaci¨®n valoradas en 39 millones de euros por proyectos subvencionados que no fueron ejecutados. El actual delegado trata de llegar a un acuerdo con el Gobierno para devolver esos fondos en un plazo de entre siete y diez a?os.
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