La pasi¨®n de Carmen Castilla
¡°Defensora de lo p¨²blico, progresista y luchadora¡±, la l¨ªder de UGT debe explicar pronto el caos del sindicato
Enfermera, abogada, psic¨®loga, con m¨¢steres y premios. La poseedora de tan brillante curr¨ªculo acad¨¦mico es Carmen Castilla ?lvarez. Hace una semana, una desconocida. Hoy, una estrella medi¨¢tica. ?Qui¨¦n sabe si fugaz!
Su vida ha cambiado radicalmente. Hace siete d¨ªas, un pelot¨®n de fot¨®grafos captaba su rostro sonriente junto a la estatua de Pablo Iglesias en la sede regional de UGT. Acababa de ser elegida secretaria general de la rama andaluza del sindicato m¨¢s antiguo del pa¨ªs. Justo en el momento m¨¢s dram¨¢tico de su historia. La justicia, la Junta y la UE investigan el presunto mal uso de fondos p¨²blicos. Su reputaci¨®n est¨¢ por los suelos. Adem¨¢s, y desde mucho antes de que se conociera la existencia de facturas falsas, sufre un acoso despiadado de la derecha m¨¢s ultramontana del pa¨ªs.
?Por qu¨¦ una mujer que ocupaba importantes cargos en el sistema hospitalario p¨²blico renuncia a una vida profesional m¨¢s que satisfactoria, para hacerse cargo del barco a la deriva que es UGT? ?Ambici¨®n? ?Poder? No lo parece.
Nacida en ?cija hace 45 a?os, en el seno de una familia numerosa, es la menor de ocho hermanos. Su padre falleci¨® cuando iniciaba sus estudios universitarios, que termin¨® de manera sobresaliente gracias al sistema p¨²blico de becas.
Quiz¨¢ sea esa una de las claves del cambio radical de su trayectoria personal. Lo p¨²blico. ¡°Soy una firme defensora de lo p¨²blico, progresista y luchadora¡±, dijo Castilla al poco de ser elegida secretaria general. Y a?adi¨®: ¡°Me apasiona el mundo sindical¡±. Pasi¨®n por el sindicato.
?La creemos? ?Son solo bellas palabras que el viento arrastrar¨¢ en cuanto se enfrente a la cruda realidad de una organizaci¨®n renqueante, arruinada y bajo sospecha? De momento, esta misma semana la Junta le ha reclamado 1,8 millones de euros por dos subvenciones indebidamente justificadas y la Comisi¨®n Europea ha suspendido un pago a UGT mientras investiga el uso de otras ayudas.
Como era de esperar, ¡°la derecha reaccionaria¡± que, en palabras de Castilla, acosa al sindicato, ha comenzado a disparar desde el mismo instante en que fue elegida. Los primeros espadas del pelot¨®n ultramedi¨¢tico la acusan de ser una mujer engre¨ªda, que presume de rubia, de aparentar menos a?os de los que tiene, de estar pagada de s¨ª misma. Alguno afirma que su nombramiento es ¡°una salida folcl¨®rica¡±. Por cierto: ?escribir¨ªan estos machistas recalcitrantes lo mismo de un hombre? El m¨¢s graciosillo de estos plumillas va m¨¢s all¨¢: se pregunta ¡°cu¨¢ndo le van a meter fuego a la sede trincona de la UGT¡±.
El resto, la ciudadan¨ªa que cree que los sindicatos son necesarios, conf¨ªa en que sus primeras palabras no se las lleve el viento. Castilla ha afirmado que cuando tenga todos los datos de la investigaci¨®n interna, los har¨¢ p¨²blicos y llevar¨¢ a los tribunales a quienes hayan cometido alg¨²n acto il¨ªcito. Es su obligaci¨®n colaborar con la justicia.
Pero como la justicia es lenta, deber¨¢ explicar con prontitud y claridad qu¨¦ ha pasado en la UGT andaluza, cu¨¢l es el alcance real de lo defraudado. Una explicaci¨®n que no puede demorarse mucho, porque cuanto m¨¢s se demore, m¨¢s se hunde el barco. Y sin esperar al resultado final de la investigaci¨®n judicial, deber¨¢ poner de patitas en la calle a quienes hayan mancillado la honorabilidad del sindicato centenario.
Al tiempo, deber¨¢ atender a la prioridad primordial de un sindicato: la defensa de los desfavorecidos, de los parados, de los que teniendo trabajo perciben salarios miserables, de las mujeres que sufren la desigualdad salarial, de los j¨®venes sin empleo ni futuro¡ Esa debe ser la pasi¨®n de Carmen Castilla. Una mujer apasionada que renunci¨® a una brillante carrera profesional para pilotar un barco oxidado.
@JRomanOrozco
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