Siempre hay alguien m¨¢s a la derecha
Vidal-Quadras se suma a los partidos que luchan por romper la hegemon¨ªa conservadora del PP
Cuando Aleix Vidal-Quadras, en su apogeo como dirigente del PP en Catalu?a, ejerc¨ªa el liderazgo de la oposici¨®n espa?olista y conservadora a los Gobiernos de Jordi Pujol, sosten¨ªa, entre otras cosas, que todos los dem¨¢s partidos catalanes eran pujolistas y que la expansi¨®n del nacionalismo pujolista y de CiU era tan fuerte que hab¨ªa llegado a penetrar, incluso, en el propio PP. Seg¨²n dec¨ªa, en la organizaci¨®n catalana del PP hab¨ªa un sector filopujolista encabezado por el actual ministro del Interior, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz. La epidem¨ªa solo se ataj¨®, seg¨²n Vidal-Quadras, cuando ¨¦l se puso al frente partido.
Los a?os han pasado y lo que entonces pregonaba Vidal-Quadras sobre la expansi¨®n del pujolismo en los dem¨¢s partidos catalanes lo predica tambi¨¦n ahora Ciutadans, el partido que compite con ¨¦xito con el PP en la denuncia del nacionalismo catal¨¢n. Ahora, cuando ha decidido probar suerte con otro partido, Vidal-Quadras dice de la presidenta del PP en Catalu?a, Alicia S¨¢nchez-Camacho, algo muy parecido a lo que a?os atr¨¢s atribu¨ªa a Fern¨¢ndez D¨ªaz: que en realidad trabaja a beneficio de CiU y de Artur Mas con propuestas como la de mejorar la financiaci¨®n de la Generalitat que hace un par de a?os defend¨ªa ante el ministro Montoro.
Vidal-Quadras acusaba a Fern¨¢ndez D¨ªaz de conformismo, de practicar una pol¨ªtica de brazos ca¨ªdos frente a los Gobiernos de Pujol. Ahora hace lo mismo respecto al Gobierno de Mariano Rajoy y le acusa de blandura frente al independentismo catal¨¢n. Y frente a los restos de ETA. Quiz¨¢ tenga raz¨®n, porque a juzgar por los apoyos que Vidal-Quadras recibe a trav¨¦s de la red y en una parte de los medios conservadores existe una buena parte de la opini¨®n conservadora que comparte su posici¨®n.
Acusaba a Fern¨¢ndez D¨ªaz de conformismo, de practicar una pol¨ªtica de brazos ca¨ªdos frente a los Gobiernos de Pujol. Ahora hace lo mismo con el? Gobierno de Mariano Rajoy
La posici¨®n de Vidal-Quadras es dif¨ªcilmente rebatible desde la ¨®ptica del nacionalismo espa?olista. El Gobierno de Rajoy puede creer que ha puesto todos los diques ante el independentismo pero no puede evitar que haya quien le califique de tibio. No sucede solo con el nacionalismo. Pasa con el conservadurismo. Y con el socialismo. Siempre hay alguien m¨¢s a la derecha. Siempre hay alguien m¨¢s a la izquierda.
Muchas veces se trata solo de ret¨®rica. Y de una ret¨®rica que oculta argumentos pol¨ªticos distintos a la expansi¨®n ideol¨®gica, que es la v¨ªa de expansi¨®n de personajes como Vidal-Quadras. En el universo conservador espa?ol, Vidal-Quadras ha encontrado quien comparte sus puntos de vista. No es de ahora. Cuando abandon¨® el escenario pol¨ªtico catal¨¢n y fijo su residencia en Madrid, Vidal-Quadras encontr¨® los apoyos necesarios para continuar con su pr¨¦dica. Su anunciado ingreso en una nueva fuerza pol¨ªtica con personalidades afines abre la eventualidad de que se complique el futuro del cuasi monopolio del PP en su ¨¢mbito pol¨ªtico-ideol¨®gico. Es dif¨ªcil y prematuro pronosticar si la plataforma Vox a la que Vidal-Quadras quiere aportar su capital pol¨ªtico sumar¨¢ fuerza suficiente para romper por la derecha la hegemon¨ªa del PP en el universo conservador. Pero lo cierto es que, excepto en Euskadi y Catalu?a, donde compite parcialmente con el PNV y con CiU, el PP es en el resto de Espa?a un partido sin competencia en la parte del espectro pol¨ªtico que va del PSOE a la extrema derecha. De la misma forma que en Francia la derecha centrista ha visto c¨®mo le crec¨ªa una fuerza como el Frente Nacional de Le Pen cabe pensar que tambi¨¦n en la Espa?a donde el PP campea a sus anchas sin que nadie le dispute un voto por la derecha pueda levantarse una bandera que le discuta su espacio pol¨ªtico.
El sistema electoral espa?ol, que convierte en bipartitas m¨¢s de la mitad de las circunscripciones en las elecciones a Cortes, hace muy dif¨ªcil el acceso de nuevos partidos a las instituciones. La excepci¨®n es, sin embargo, la circunscripci¨®n ¨²nica espa?ola que rige para las elecciones al Parlamento Europeo, que se celebrar¨¢n en mayo. Ser¨¢n una buena ocasi¨®n para medir las posibilidades de Vidal-Quadras con una bandera distinta a la del PP si se decide a someterse al juicio del electorado. Pero otra cosa son las elecciones legislativas, que son las que de verdad podr¨ªan poner a prueba la permanencia o no de la hegemon¨ªa del PP en su parte de la Espa?a del bipartidismo. La de Vox es la segunda o tercera fuerza pol¨ªtica que surge con una cierta capacidad de ara?ar espacio pol¨ªtico al PP por la parte del nacionalismo espa?olista. La primera fue el partido de Rosa D¨ªez, UPyD. La segunda fue Ciutadans-Partido de la Ciudadan¨ªa, el partido dirigido por Albert Rivera. Ciutadans est¨¢ intentando superar la condici¨®n de partido regional a que le releg¨® el fracaso de su proyecto inicial de implantaci¨®n org¨¢nica y electoral en el conjunto de Espa?a. Ahora probar¨¢ de nuevo suerte con el Movimiento Ciudadano que Rivera promueve fuera de Catalu?a. El principal inter¨¦s pol¨ªtico de la decisi¨®n de Vidal-Quadras radica en ver si servir¨¢ o no para que el PP pierda votos y esca?os por su flanco derecho del nacionalismo espa?olista.
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