¡°Prefiero el escenario a una tarifa plana de orgasmos¡±
La artista multitarea estrena junto a Buenafuente ¡®Espain. Dolor del bueno¡¯, un ecl¨¦ctico canto de libertad que alterna copla, cabaret y mon¨®logos
Elsa Rovayo (Ceuta, 1976) es chiquitilla, vivaracha y huesuda, con unos ojos rasgados que se comen el mundo de pura curiosidad. Le sucede lo que a su alter ego art¨ªstico, La Shica: ni la una ni la otra pueden parar un solo minuto quietas. Elsa se trae un traj¨ªn de cachivaches por las calles de Lavapi¨¦s (banquetas, bolsas, trapos) porque viene de ensayar Espain. Dolor del bueno, el espect¨¢culo que ha urdido junto al humorista televisivo Andreu Buenafuente y que recala este viernes y s¨¢bado en el Teatro Espa?ol. Y La Shica gesticula mucho mientras intenta explicar en qu¨¦ consiste ese invento raro e inclasificable: que si copla actualizada o posmoderna, que si baile y cabaret, que si mon¨®logos sobre este pa¨ªs fant¨¢stico y desquiciante que nos ha tocado en suerte. As¨ª de ecl¨¦ctica y el¨¦ctrica es nuestra interlocutora, mujer descacharrante pero curranta total, un h¨ªbrido inconcebible de Lola Flores, Chavela, Bj?rk, Beyonc¨¦, Storm Large y Robe Iniesta. Elsa, La Torbellino, anota sus ideas en post-its con forma de coraz¨®n o en las notas de un tel¨¦fono inteligent¨ªsimo que esconde bajo una delirante funda de perlitas. Como ¨²nico testigo de la charla, una gata vestida de Audrey Hepburn nos observa desde la tela de su bolso, ojipl¨¢tica. No es para menos.
Pregunta. ?Lo suyo con Buenafuente es una reedici¨®n de La extra?a pareja?
Respuesta. Total. ?l es una moderna de Reus, un gafapasta. En principio nada que ver conmigo, pero los dos venimos de sitios peque?os y hemos aprendido experimentando en la vida m¨¢s que estudiando en los libros. Ah, y a los dos nos ha dado por la pintura, aunque ¨¦l es mucho m¨¢s brillante que yo. Se pasa el d¨ªa mand¨¢ndome mierdas de dibujitos al Aifoun. Es un tipo fresco, con inteligencia emocional. Me gusta mucho y lo admiro un huevo.
P. ?Usted cree que lo de Espain se entiende bien?
R. Pens¨¢bamos que s¨ª y ha resultado que no. Pain es dolor en ingl¨¦s, pero como aqu¨ª todos vamos a la misma academia de ingl¨¦s que la alcaldesa¡ Quer¨ªamos explicar que todo lo bueno duele, porque el m¨²sculo de sufrir y el de ser feliz es el mismo. Dolor del bueno es el de la copla, que le canta con intensidad hasta al fracaso o a la muerte. Me gusta la gente de aqu¨ª porque es libre para llorar, para plasmar sus sentimientos a pie de calle.
P. ?De esta se nos est¨¢ volviendo usted patriota?
R. Es que aqu¨ª dices Espa?a y ya piensas en la bandera del aguilucho¡ Y no. A m¨ª me apasiona este pa¨ªs. No es el mejor, pero es maravilloso. La gente tiene su puntito de maldad, pero el ingenio lo compensa todo. Y nada me gusta tanto como re¨ªr.
P. Amar este pa¨ªs, ?no equivale ahora mismo a encabronarse?
R. ?Uy, mucho! El pa¨ªs es como la familia: yo quiero mucho a mi t¨ªa, pero a veces me entrar¨ªan ganas de meterle la cabeza en el cubo de la fregona. Estos d¨ªas he dejado de leer los peri¨®dicos, porque entre la Infanta y lo del aborto me estaba poniendo de muy mala hostia. Y yo, sobre el escenario, me siento artista enfermera. Mi misi¨®n es curar, y para curar no me puedo estar cagando en t¨®.
P. ?Cura al espectador o aprovecha para curarse usted tambi¨¦n?
R. A m¨ª la vida real me costar¨ªa mucho si no fuera porque est¨¢ la otra, la art¨ªstica. El amor es una cosa enorme, pero tiene el tama?o de un garbanzo si lo comparas con una noche en la que acuden los duendes. El sexo es una mierda frente a un d¨ªa en que el p¨²blico y los artistas se enchufan. Prefiero el escenario a una tarifa plana de orgasmos.
P. As¨ª que estos d¨ªas, en el Espa?ol, vivir¨¢ usted una catarsis¡
R. Toca sentir m¨¢s que pensar. Olvidarse de la educaci¨®n, tan castrante, y darse uno permiso para ser libre. En Espain intento demostrar que el cuerpo produce una qu¨ªmica fabulosa, que es una farmacia en s¨ª mismo, sin necesidad de que le metamos pastillas. El ser humano es la cosa m¨¢s maravillosa del mundo, as¨ª que no nos cortemos el rollo. Dicho lo cual, me pongo nerviosa solo de pensar en la gente que ha pisado esas tablas. El Espa?ol es una catedral. Y s¨ª: ?estoy ji?ada!
Espain. Dolor del bueno. Viernes 31 y s¨¢bado 1, a las 20.00, en el Teatro Espa?ol (c/ Pr¨ªncipe, 25). Entradas, de 5 a 20 euros.
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