¡®Art design¡¯ infiltrado en el siglo XVIII
Obras contempor¨¢neas dialogan con la colecci¨®n borb¨®nica del Museo de Artes Decorativas
Las vetustas piezas que rumian en silencio el paso del tiempo en el Museo Nacional de Artes Decorativas ¡ªdatan de la ¨¦poca borb¨®nica del siglo XVIII¡ª, deben andar perplejas ante los extra?os objetos contempor¨¢neos que se han infiltrado entre ellas. Hasta el 30 de marzo, 36 obras de artistas y dise?adores actuales establecen un di¨¢logo a trav¨¦s de los siglos.
¡°Desde la Revoluci¨®n Industrial hasta el d¨ªa de hoy, hay profesionales que han cruzado la l¨ªnea entre el arte y el dise?o, que han hecho piezas de arte con utilidad o de dise?o con bagaje art¨ªstico¡±, explica Jos¨¦ David P¨¦rez Fern¨¢ndez, uno de los directores de la plataforma organizadora Product Design Madrid. ¡°Hemos intentado hacer dialogar piezas del XVIII y del art design contempor¨¢neo".
En una sala que representa una alcoba rococ¨® con una gran cama levantina en su centro, encontramos, en curioso contraste, a Vov¨®, de Angelica Eriksson para Escandinavo-Tropical, una especie de mecedora para cuidar macetas. O Inconsciencia, de Paul Manriq, una l¨¢mpara construida sobre uno de los grandes hitos del dise?o espa?ol: una fregona.
Las piezas de esta muestra son algunas de las seleccionadas en la Feria de Dise?o Industrial PDM2, celebrada en noviembre en el Colegio de Arquitectos de Madrid. La exposici¨®n est¨¢ comisariada por la italiana Rossana Orlandi.
Una mesa que se echa una apacible siesta sobre sus propias sillas y un sof¨¢ que, cansado de mantener el tipo, se retuerce sobre s¨ª mismo, son las dos piezas de la artista mexicana de ra¨ªces japonesas Hisae Ikenaga, pertenecientes a su serie Malformaciones de F¨¢brica. Una veintena de artistas y dise?adores brasile?os comparan sus piezas de cer¨¢mica inspiradas en Raphael Bordallo Pinheiro, referente del Art Noveau y Art Dec¨® portugu¨¦s, con las cer¨¢micas tradicionales del museo. Mar¨ªa Jos¨¦ Guti¨¦rrez Encina y las l¨¢mparas de ne¨®n OnNEON aportan la l¨¢mpara Chandeliers, una versi¨®n en el¨¦ctrico ne¨®n rojo del cl¨¢sico modelo chandelier.
?Y qu¨¦ es este neblinoso concepto del art design? ?D¨®nde acaba el arte y comienza el dise?o, y viceversa? ¡°Es un concepto dif¨ªcil, nadie lo sabe bien. Hay una l¨ªnea que separa ambos¡±, explica P¨¦rez Fern¨¢ndez, ¡°y hay interlocutores que la cruzan en un sentido o en otro¡±. Jorge Penad¨¦s, autor de la silla port¨¢til Nomadic Chair (colocada junto a otras del siglo XVIII) aboga por el fin pr¨¢ctico: ¡°Creo que el dise?o siempre ha de tener una utilidad. La frontera entre arte y dise?o es cada vez m¨¢s difusa, pero a m¨ª me gusta que una l¨¢mpara alumbre, que una mesa sirva para comer, y que una silla sirva para sentarse en ella¡±.
¡°Hay quien cree que exposiciones como esta pueden confundir a los visitantes sobre lo que es dise?o y lo que es arte¡±, dice Vicente Porres, de Noviembre Estudio (su l¨¢mpara de humo Little Talks ocupa, sobre un tocador, el centro de un vetusto gabinete del museo), ¡°pero estas pol¨¦micas son beneficiosas. De este tipo de preguntas surgieron, por ejemplo, las vanguardias¡±. Porres adem¨¢s ofrece una esclarecedora met¨¢fora:
¡ª ?Te gustan los coches de choque?
¡ª Pues s¨ª.
¡ª ?Y vas chocando tu coche contra todo lo que te encuentras?
¡ª Pues no.
Para el dise?ador, esto ¨²ltimo, irse chocando con todo, es el dise?o art¨ªstico. ¡°Poder ir haciendo cosas que normalmente no me puedo permitir en el trabajo cotidiano¡±, explica, ¡°cosas que realmente me emocionan, que me sirven como expresi¨®n, al margen del trabajo m¨¢s enfocado en el cliente y en el mercado. Esa libertad¡±.
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