¡°La ¡®performance¡¯ es un arte impuro¡±
La artista imparte en Bilbao un seminario en el que anima a los estudiantes a inventar el arte de acci¨®n del siglo XXI
Esther Ferrer (San Sebasti¨¢n, 1937) interrumpe un par de veces al a?o su trabajo art¨ªstico para impartir seminarios sobre su forma de entender el arte de acci¨®n, la performance en la que ella fue la avanzadilla en los a?os 60 del siglo XX. Premio Nacional de Artes Pl¨¢sticas en 2008 y Gure Artea en 2012, Esther Ferrer exige una entrega total a los alumnos que esta semana asisten en Bilbao al que ha organizado la facultad de Bellas Artes de la Universidad del Pa¨ªs Vasco. "A ellos les toca inventar la performance de 2014, no copiar lo que se hac¨ªa en los a?os 60 y 70", dice.
Pregunta. ?C¨®mo se enfrenta al papel de profesora?
Respuesta. Intento que los que asisten al seminario consigan saber si la performance les interesa o no, que es dif¨ªcil de saber exactamente. Si dicen s¨ª, se trata de sumergirles en la performance y que ellos mismos conceptualicen lo que hacen y sepan si han conseguido lo que pretend¨ªan. Si no, que entiendan si ha fallado la idea, han tenido miedo o les han faltado los medios. Soy tan humilde como eso.
P. ?Se siente c¨®moda?
R. Durante mucho tiempo me negue a dar cursos. Que iba a ense?ar si no se nada, si yo me lo he inventado todo. Y adem¨¢s la performance no se ense?a, se practica. En Arteleku me convencieron. Me di cuenta que los chicos y chicas que ven¨ªan de Bellas Artes o de las escuelas de teatro, ten¨ªan grandes lagunas en el campo de la acci¨®n y ten¨ªan muchas cosas sobre las que reflexionar. Yo les exijo much¨ªsimo desde el primer momento; mirones no quiero en los seminarios. Es muy f¨¢cil criticar lo que hacen los otros pero es m¨¢s dif¨ªcil criticar lo que hace uno mismo. Y es de lo que se trata: primero hacen y luego hablamos. Es muy enriquecedor porque discutimos la acci¨®n,y las connotaciones que ha tenido, los intereses desarrollados o no desarrollados.
P. El material con el que trabajan es su propio cuerpo. ?Tarda un artista en conocer sus posibilidades?
R. Depende de la relaci¨®n que tenga cada uno con su cuerpo, como lo utiliza. Nosotros empezamos pensando que nuestro cuerpo nos pertenece y nos ha hecho reflexionar mucho a las mujeres. Parece evidente, pero les falta a las generaciones actuales. Tienen la ilusi¨®n de que todo est¨¢ conseguido, cuando est¨¢ en peligro todo. Las luchas de a?os 60 est¨¢n en peligro: el aborto, el derecho de huelga, la contracepci¨®n, muchos derechos est¨¢n en la cuerda floja en Europa. En Par¨ªs vamos a las manifestaciones y estamos todas las viejas. En otro d¨ªa en la del aborto por vez primera acudieron muchas chicas j¨®venes y tambi¨¦n chicos. Nuestra generaci¨®n tard¨® en ponerse en marcha pero nos tendr¨¢n que matar para que nos echemos atr¨¢s.
P. Su obra maneja el absurdo y el humor.
R. El teatro del absurdo me gusta mucho, pero adem¨¢s es que la vida me parece absurda. Yo no entiendo la sociedad en la que vivimos. Tratarlo en mi trabajo es como una vacuna que crea anticuerpos para defenderte de una enfermedad. Voy a trabajar con el absurdo a ver si lo entiendo. Es una v¨ªa de conocimiento. Es tan tonto como eso, pero es la verdad. Respecto al humor, nunca pretendo hacerlo, pero no me castro. Digo muchas tonter¨ªas todos los d¨ªas, me gusta re¨ªrme y que se r¨ªan los dem¨¢s. Y en mi trabajo tambi¨¦n. Si estoy pensando en una performance y decido hacer esto, no estoy pensando en que la gente se va a re¨ªr o no. Lo hago, y ya est¨¢. Si es divertido, mejor.
P. ?Como manejan los j¨®venes los hilos de la performance?
R. En los seminarios me encuentro con mucha gente nunca se ha visto enfrentada a la situaci¨®n perform¨¢tica. Emplean los medios que les resultan m¨¢s f¨¢ciles, en los que se sienten m¨¢s seguros. Entre los profesionales, en los festivales, gente con 40 a?os menos que yo pero que ya trabaja, es evidente que ha habido cambios en este mundo. ?No van a estar 50 a?os repitiendo lo mismo! La situaci¨®n pol¨ªtica y social es diferente, la situaci¨®n de la mujer artista ha cambiado, est¨¢ la tecnolog¨ªa, el mundo funciona a una velocidad vertiginosa comparado con los a?os 60. M¨¢s de uno y de dos integra la tecnolog¨ªa o Internet en la performance y me parece muy bien. La performance trata de llevar lo cotidiano al arte. Hoy lo cotidiano es la tecnolog¨ªa, el m¨®vil, el ordenador, Internet y se tiene que integrar. Es un lenguaje diferente y en consecuencia el mundo de la acci¨®n es diferentes.
P. ?Y el resultado?
R. Hay cosas buenas y malas. Das una patada en el suelo y salen tres millones de performances. Est¨¢ en todas partes porque se ha convertido en una moda. Hay bueno, malo y peor; hay quien se suma al carro siguiendo la moda y otros que les interesa, lo piensan y lo desarrollan. Pero en todas las manifestaciones art¨ªsticas pasa igual. En el teatro, en la poes¨ªa, en la pintura hay quienes hacen lo que se lleva y quienes crean lo que se va a llevar. Ha pasado siempre y pasar¨¢. No hay que preocuparse.
P. Para una artista que ha sido pionera ...
R. Yo no me considero pionera de nada. Pero bueno, me lo dicen, s¨ª. Te da una tolerancia, una capacidad de analizar la evoluci¨®n de la performance desde que empezamos en los a?os 60 hasta hoy. Uno de los cambios evidentes ha sido la teatralizaci¨®n. Nosotros, cuando empezamos,? tratabamos de alejarnos de la teatralizaci¨®n y ahora se esta convirtiendo en una nueva forma de teatro. La performance ha nutrido el teatro, es verdad. Empez¨® alej¨¢ndose del teatro y ahora el c¨ªrculo se cierra y se est¨¢ acercando. No es exactamente el mismo teatro ni la misma performance pero est¨¢n m¨¢s cerca. La performance es un arte impuro, como un albergue espa?ol donde puedes meter lo que quieras.? Yo no soy nada purista. Los puristas son los que nunca han hecho performance y hablan de la performance. Hacen clasificaciones y definiciones; es su trabajo y est¨¢ muy bien como m¨¦todo pedag¨®gico, pero si te lanzas al ruedo la realidad se impone.?
P. Usted no ha documentado sus acciones.
R. Nunca me he negado; no me he preocupado de hacerlo. No le he dado la importancia a fotograf¨ªar o hacer un v¨ªdeo. Ahora tiene m¨¢s importancia que la obra: si no tienes la documentaci¨®n no existes aunque hayas hecho muchas cosas. En los a?os 60 no hab¨ªa v¨ªdeo, ?qui¨¦n ten¨ªa una c¨¢mara de fotos en Espa?a? Hoy la gente que va a una performance como los turistas que fotograf¨ªan sin ver; se pasan la acci¨®n fotografiando.
P. ?Desnaturaliza la performance que quede un testimonio?
R. No, son cosas diferentes. Econ¨®micamente era un desastre, no produc¨ªa dinero. Trabaj¨¢bamos casi por nada. Hoy se venden lo que yo llamo "productos derivados": las fotos, los v¨ªdeos, las grabaciones. Una de las cosas que ha hecho que la performance se transforme es el inter¨¦s de las instituciones. En ese momento se formatiza, diseca la performance a los par¨¢metros que le interesan.
P. Su car¨¢cter ef¨ªmero se pierde.
R. Hay mucha gente trabajando ah¨ª, aunque sean minoritarios. No ha que tener miedo.
P. ?Detecta que la comercializaci¨®n condiciona mucho a las nuevas generaciones?
R. Desde luego, ya se lo ense?an en las escuelas de Bellas Artes. No se aqu¨ª, pero en Francia ense?an como funcionan los circuitos del arte para subsistir, donde pedir becas, por ejemplo. Yo no he rellenado un impreso para pedir una beca en mi vida y tengo 76 a?os. Pero es normal porque quieren trabajar y necesitan dinero.
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