Estrategias contra el fracaso escolar

¡°No hac¨ªa nada, no trabajaba, y adem¨¢s, soy repetidor¡±, explica un alumno de segundo de ESO del Instituto Berenguer Dalmau de Catarroja (Valencia) cuando se le pregunta por qu¨¦ entr¨® en el programa Pigmali¨®n. ?Y ahora, qu¨¦ tal? ¡°Mejor¡±, responde. ¡°Es que soy una vaga¡± , justifica otra alumna. ¡°Yo sent¨ªa que necesitaba ayuda en los estudios¡±, se?ala una tercera. ¡°Me ayuda con los deberes de sociales¡±, cuenta otro. Al preguntarle a otro qu¨¦ hace en las sesiones del programa dice que ¡°hablar¡±, pero le cuesta m¨¢s soltarse para revelar de qu¨¦. Importante: Es la hora del recreo y emplean su tiempo de esparcimiento hablando una experiencia en la que algunos llevan ya dos cursos.

Delante tienen varios compa?eros de los ciclos formativos de Infantil e Integraci¨®n Social del centro, que son sus mentores. Se re¨²nen durante el recreo de una a tres veces por semana, renunciando a la hora del patio. El programa empez¨® con siete alumnos y ahora son m¨¢s de 30, de primero y segundo de la ESO, que comparten 20 mentores. Algunos de estos son exalumnos, como ?scar Moreno. ¡°Un mentor no es ni un profesor de repaso ni un trabajador social, quiz¨¢ un t¨¦rmino medio¡±, explica este estudiante de segundo de Filosof¨ªa que ha vuelto a su antiguo instituto para ejercer de mentor, con ¡°la idea de que la educaci¨®n implica a toda la sociedad¡±.

Estudiantes de FP hacen de hermanos mayores de alumnos de la ESO

¡°Este es un macroproyecto de centro¡±, recalca Mar¨ªa Jos¨¦ Pascual, la orientadora. Pigmali¨®n tiene que ver con la transici¨®n de Primaria a Secundaria, con el ¨¦xito escolar y con la convivencia, corroboran tambi¨¦n Mar¨ªa Jos¨¦ Gascue?a, coordinadora del ciclo de FP, Eugenia Lafuente, profesora de ¨¦ste y Encarna Cuenca, profesora de Pl¨¢stica de quien vino la idea inicial. Pigmali¨®n parte de ¡°una visi¨®n de proximidad y de confianza mutua¡± para desarrollar en los alumnos menores ¡°las competencias personales y sociales que les permitan evitar o superar situaciones de riesgo¡±. Para los mentores o hermanos mayores supone ¡°adquirir competencias mediante la participaci¨®n comunitaria¡±. Adem¨¢s, se facilita apoyo a las familias y el profesorado implicado realiza un curso de competencia emocional.

Subrayan el respaldo del claustro, del consejo escolar, de la direcci¨®n del centro y dicen que ¡°sin los tutores no ser¨ªa nada¡±. Las profesoras de FP especifican que no es un apoyo escolar, sino ¡°apoyo a la integraci¨®n en el centro¡±. Habilidades sociales, motivaci¨®n, empat¨ªa, resoluci¨®n de conflictos y arraigo son claves. ¡°Anclaje¡±, es el t¨¦rmino que esgrimi¨® Cuenca cuando present¨® la idea. Aunque el proyecto est¨¢ en proceso de evaluaci¨®n interna, ya notan mejoras en los chicos. No es anecd¨®tico que, tras un conflicto surgido entre dos pandillas, autobautizadas como moros y cristianos, varios alumnos del programa aceptaran jugar un partido de f¨²tbol en el que cada uno eleg¨ªa como compa?ero de equipo a alguien ¡°que le ca¨ªa mal¡±. Todo un desaf¨ªo a la buena convivencia.

Son muchos los centros, profesores y familias que, como en este instituto de Catarroja, caminan en contra de esas estad¨ªsticas que sit¨²an a la Comunidad Valenciana en la zona roja de los indicadores relacionados con el fracaso escolar. Es cierto que, como ha resaltado la Administraci¨®n educativa, el abandono escolar temprano entre los 18 y 24 a?os, ha bajado notablemente hasta situarse por debajo de la media nacional. Tambi¨¦n es mejor que la media espa?ola la proporci¨®n de alumnos que terminan la educaci¨®n primaria con 12 a?os. Y lo mismo pasa con la poblaci¨®n que termina la FP de grado medio a la edad que corresponde: Un 26,6% en el curso 2011-12, cuarta posici¨®n auton¨®mica y cuatro puntos por encima de la media nacional. Esas ser¨ªan las buenas noticias.

Los padres ayudan en el aula en las comunidades de aprendizaje

Las malas noticias llegaron esta semana con la actualizaci¨®n de las estad¨ªsticas ministeriales, que vuelven a situar la tasa bruta de graduados en secundaria (el porcentaje que lo hace en el curso que inicia con 15 a?os) en el 37%, a la cola del Estado y m¨¢s o menos como en el mismo punto que en el curso 2008-09. Tampoco era buena noticia la tasa de Bachillerato, situada en el 47,3%, tambi¨¦n en la zona de cola, mientras la media nacional est¨¢ en un 52,1%. Adem¨¢s, descollamos como repetidores de curso en una Espa?a que tiene una tasa muy superior a la media europea, cuando la OCDE acaba de recordar en su Education Policy Outlook que ¡°la repetici¨®n de curso no es eficaz en la mejora de los resultados¡± y puede ¡°contribuir al abandono temprano¡±, adem¨¢s de ¡°resultar cara para el sistema¡±.

Son datos estad¨ªsticos que requieren medidas acordes a la magnitud del problema. La Consejer¨ªa de Educaci¨®n esgrime los llamados contratos-programa (a trav¨¦s de los que los centros reciben m¨¢s recursos materiales y humanos) como talism¨¢n para la mejora de resultados. Sus responsables han relacionado reiteradamente los centros que tienen suscrito el contrato-programa con mejores resultados en las pruebas diagn¨®sticas auton¨®mica que pasan anualmente a casi 100.000 alumnos de cuarto de Primaria y segundo de ESO, p¨²blicos y concertados.

En el marco de los contratos-programa, cada centro toma iniciativas, como sucede con Pigmali¨®n. ¡°Dentro de las acciones para prevenir el abandono, el fracaso o el absentismo, los centros tienen autonom¨ªa para adoptar ciertas medidas¡±, explica la orientadora del Berenguer Dalmau de Catarroja. En este mismo muncipio se encuentra colegio de Infantil y Primaria Jaume I el Conqueridor, que hace tres a?os pas¨® a formar parte de una red de comunidades de aprendizaje actualmente en expansi¨®n en la Comunidad Valenciana. ¡°Inspecci¨®n nos ha dicho que el proyecto se tiene que insertar en el contrato-programa¡±, se?ala su director, Vicent Moreno.

Un instituto atrae y motiva al alumnado a trav¨¦s de varios proyectos europeos

Tuteladas desde el Centro de Investigaci¨®n en Teor¨ªas y Pr¨¢cticas Superadoras de Desigualdades (CREA) de la Universidad de Barcelona, el objetivo de estas comunidades de aprendizaje es ¡°la superaci¨®n del fracaso escolar y la eliminaci¨®n de conflictos¡±, en palabras de su impulsor, el soci¨®logo Ram¨®n Flecha. Con este proyecto, ¡°la escuela se abre y las familias se involucran en el proceso de aprendizaje¡±, explica Moreno, y ¡°los resultados se ven a largo plazo¡±. Se implican en la creaci¨®n de comisiones que canalizan ¡°los sue?os¡± compartidos de la escuela, participan en las actividades planificadas, en especial en las llamadas tertulias literarias, y tambi¨¦n en clase, a trav¨¦s de grupos interactivos. ¡°Nunca hab¨ªa visto una clase con cinco padres¡±, comenta Gloria Mart¨ªnez, presidenta del AMPA. ¡°Ves c¨®mo act¨²an en clase y c¨®mo el que sabe m¨¢s ayuda al otro. Aprenden entre iguales¡±, a?ade.

El trabajo para mejorar las estad¨ªsticas del ¨¦xito es colectivo, pero sus protagonistas son personas concretas. Como Sonsoles Jim¨¦nez, profesora de Inform¨¢tica y coordinadora de proyectos europeos en el Instituto Sant Vicent Ferrer de Algemes¨ª. Desde 2011 ha coordinado no solo un proyecto europeo, sino hasta tres con este objetivo. Destinados a alumnado de primer ciclo de la ESO y FP, se han hecho en colaboraci¨®n con otros institutos de X¨¤tiva (Simarro) y Algemes¨ª (Bernat Guinovart), ayuntamientos y asociaciones de profesores y empresarios. ¡°Se han llegado a formar m¨¢s de 600 profesores en la parte espa?ola¡±, subraya. Tres a?os ha durado el desarrollo de The Play Learning Game, una herramienta inform¨¢tica para potenciar la formaci¨®n, la motivaci¨®n y combatir el fracaso escolar a trav¨¦s de los videojuegos. Y dos a?os, el proyecto MIDAS para la inclusi¨®n y contra el abandono escolar, en el que se han generado materiales para el aprendizaje de lenguas, uso de nuevas tecnolog¨ªas y conocimiento de otras culturas.

Buscan mejoras en la convivencia, el absentismo y el rendimiento

¡°Los materiales se usan en tutor¨ªas para mejorar el clima del aula, para que todos se sientan uno m¨¢s¡±, explica Jim¨¦nez. Por eso ¡°es importante que permanezcan accesibles una vez acabado el proyecto¡±. Tienen un tercer programa de mediaci¨®n familiar en el que forman a padres, en colaboraci¨®n con el Ampa. Han creado tambi¨¦n un grupo de mentores digitales que ayudan a sus compa?eros y los de otros institutos. Tanto la direcci¨®n de este centro de Algemes¨ª como la inspecci¨®n educativa aseguran que los resultados de la ¨²ltima evaluaci¨®n diagn¨®stica ya han mejorado con el desarrollo de estos programas. El inspector Joan Vercher muestra una progresi¨®n en todas las competencias evaluadas en 2013, en el conjunto de los tres centros implicados, del 8,35 (castellano), el 12,02 (valenciano), el 6,22 (mat¨¦m¨¢ticas) y el 16,15 (ingl¨¦s). Vercher subraya que era ¡°la fase intermedia de los programas¡±, por lo que cree que ¡°mejorar¨¢n m¨¢s en la pr¨®xima evaluaci¨®n¡±, en septiembre. M¨¢s all¨¢ del rendimiento escolar, Sonsoles Jim¨¦nez resume que, al final, se trata de ¡°hacer m¨¢s atractivo venir a clase y aumentar la motivaci¨®n para el aprendizaje¡±.