Palacio de la M¨²sica: un atraco de tres

Ruiz Gallard¨®n, un alcalde que sali¨® elegido alcalde, se comprometi¨® con los madrile?os en ubicar lo que ser¨ªa el segundo auditorio de la ciudad de Madrid en el Palacio de la M¨²sica.

Era una buena noticia porque el lugar es un edificio emblem¨¢tico de la Gran V¨ªa, memorable para quienes asistieron a muchos conciertos y al estreno de pel¨ªculas como Gilda, Lo que el viento se llev¨®?o El ¨²ltimo cupl¨¦. Un edificio del c¨¦lebre arquitecto Zuazo que ya en el a?o 1924 pod¨ªa combinar la m¨²sica con el cine.

El alcalde que presum¨ªa de mel¨®mano lleg¨® a un acuerdo con Caja Madrid para que pagara la puesta a punto del auditorio respetando el edificio original con la absoluta protecci¨®n de interior y exterior del edificio y con el uso de "artes esc¨¦nicas". ?Qu¨¦ costar¨ªa? ?Qu¨¦ inversi¨®n tendr¨ªa? ?De d¨®nde saldr¨ªa la inversi¨®n? ?Obten¨ªa algo m¨¢s a cambio Caja Madrid? Nadie dio ninguna explicaci¨®n.

Todav¨ªa en el 2008 no sab¨ªamos que Caja Madrid ser¨ªa Bankia, que el ahorro de miles de familias se perder¨ªa con un enga?o bautizado como "preferentes", ni que el mel¨®mano cambiar¨ªa de partitura para mostrarse como el m¨¢s r¨ªgido de los sargentos en una cruzada contra los derechos civiles que nadie de la cultura podr¨ªa entender m¨¢s que en un impostor.

Una vez dilapidados los ahorros de todos cuantos creyeron en aquel enga?o de las "preferentes" y una vez recuperado Bankia con el dinero de todos los espa?oles, ahora el camino parece ser continuar manejando algo que es de todos: el Palacio de la M¨²sica. Y han esperado a que llegue una mel¨®mana sorda, alcaldesa de rebote, para cambiar a su antojo el uso cultural previsto y as¨ª favorecer la especulaci¨®n inmobiliaria con un edificio clave de la Gran V¨ªa madrile?a hasta ahora protegido.

Tener un sentido de ciudad exige que el Palacio de la M¨²sica contin¨²e con el uso para el que se construy¨®

Sin el gobierno del Ayuntamiento no habr¨ªa cooperador necesario; y sin la mel¨®mana sorda de c¨®mplice no se plantear¨ªa esta operaci¨®n que nos devuelve a la burbuja inmobiliaria.

Instalar otra tienda de ropa en la Gran V¨ªa no responde a generar empleo ni facturaci¨®n. Gallard¨®n asegur¨® que no ceder¨ªa espacio comercial en este edificio que es singular para la cultura. Ya sab¨ªa la consecuencia de adecuar planes especiales para convertir cines hist¨®ricos en tiendas de ropa y restaurantes. Basta darse hoy un paseo por esa famosa gran calle para comprobarlo.

?Se ha comparado la facturaci¨®n de cualquier tienda de ropa existente en la Gran V¨ªa con la de un auditorio, y tambi¨¦n el empleo? Por no hablar del respeto cultural y del atractivo para el turismo. ?Nadie hace cuentas sobre los musicales de la Gran V¨ªa?

Puede ser otro regalo ahora que la alcaldesa ha puesto Madrid en venta al por mayor. Pero los socialistas y muy en especial su portavoz, Jaime Lissavetzky, llevan mucho tiempo trabajando para hacer rectificar a las partes implicadas y evitar acabar con la esencia del Palacio de la M¨²sica. Demostrar al PP, a la Fundaci¨®n Caja Madrid y a Bankia que la cultura es tan rentable como cualquier otra opci¨®n y que la alternativa es estafar a los espa?oles de nuevo. Por cierto, una y otra vez a cada uno de ellos les preguntamos: ?Les da igual las 60.000 firmas en contra de la tienda de ropa y a favor del uso exclusivamente cultural?

Esa venta desnaturaliza la Gran V¨ªa y s¨®lo puede tener el inter¨¦s de la especulaci¨®n inmobiliaria. Hay muchas preguntas que no han respondido ninguna de las partes interesadas en esta "venta": ?Por qu¨¦ el cliente quiere ese inmueble? ?Por qu¨¦ Fundaci¨®n Caja Madrid abandona la cultura? ?Por qu¨¦ Bankia no refinancia? ?Por qu¨¦ Ana Botella no se sienta con los empresarios culturales para que el uso sirva a la ciudad? ?Por qu¨¦ la alcaldesa no cumple lo comprometido y obliga a que sea un auditorio de uso exclusivamente cultural, como se acord¨®?

Todo huele a premeditaci¨®n, ocultaci¨®n sobre las negociaciones y los proyectos

Nunca sabremos los motivos que hicieron a Caja Madrid comprometer una inversi¨®n a todas luces exagerada. Lo que s¨ª sabemos es que est¨¢n pactando de nuevo. Y su pacto consiste en un atraco de tres a Madrid de un edificio ¨²nico de y para la cultura.

Todo huele a premeditaci¨®n, ocultaci¨®n sobre las negociaciones y los proyectos que solo se conocen en los despachos del gobierno municipal. Pasos internos para agilizar el uso no cultural y el disfraz como tr¨¢mite del acoso y derribo del Palacio de la M¨²sica.

Tener un sentido de ciudad, un concepto de cultura urbana, exige que el Palacio de la M¨²sica contin¨²e con el uso para el que se construy¨®. Otra cosa es un atraco de tres, en la hora m¨¢s d¨¦bil de una ciudad que sufre.

Ana Garc¨ªa D'Atri es responsable de Las Artes en el grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Madrid.