M¨¢s de 20 barrios se unen contra el modelo tur¨ªstico de Barcelona
Asociaciones de vecinos y movimientos ciudadanos piden reducir la cifra de visitantes
Unos casi no pueden ni caminar de casa al metro de la cantidad de tursitas que hay; otros est¨¢n hartos de ruido en la escalera y de que el ascensor huela a meado; otros ven como las terrazas les comen espacio en las aceras; otros asisten a la subida de los precios de la vivienda, al cierre de tiendas tradicionales mientras abren supermercados en cada esquina¡ Han dicho basta y est¨¢n de acuerdo en que la soluci¨®n pasa por el ¡°decrecimiento tur¨ªstico¡±: menos visitantes y una mejor gesti¨®n del sector.
Los representantes de 21 barrios de Barcelona ¡ªtanto asociaciones de vecinos como movimientos ciudadanos¡ª, se reunieron el pasado jueves en la sede de la Federaci¨®n de Asociaciones de Vecinos (FAVB) para articular una red de oposici¨®n a la saturaci¨®n tur¨ªstica y proponer f¨®rmulas alternativas a la actual gesti¨®n del conocido como ¡°modelo Barcelona¡±. Una ciudad para vivir, es el t¨ªtulo del documento de base del encuentro, que part¨ªa de una reivindicaci¨®n com¨²n: ¡°Queremos un barrio donde poder vivir¡±.
Y no estaban solo los barrios del centro de la ciudad ¡ªBarceloneta, G¨°tic, Raval, Casc Antic, La Rambla o el Born, en el distrito de Ciutat Vella¡ª. Al encuentro asistieron tambi¨¦n vecinos de zonas tan dispares como Sagrada Fam¨ªlia, los extremos del Eixample, Sant Antoni, la plataforma ?Gr¨¤cia ad¨®nde vas?, la plaza del Diamant, El Carmel, Front Mar¨ªtim, Clot, Font de la Guatlla o Sarri¨¤-Sant Gervasi. Acudieron incluso representantes del colectivo de gu¨ªas tur¨ªsticos, peque?os comerciantes, expertos en turismo responsable y miembros de asambleas del 15M. Tampoco faltaron representantes de barrios donde el turismo no ha llegado pero que temen lo peor, como la Sagrera o Sant Andreu.
El discurso del Ayuntamiento es como el del ladrillo hace 10 a?os¡±
Durante m¨¢s de dos horas, y en lo que alguien calific¨® de ¡°terapia de grupo¡± relataron el rosario de molestias y conflictos que origina la presencia de turistas en su entorno. Para llegar a varias conclusiones. Una, el modelo de ciudad que sustituye la f¨®rmula postindustrial por el turismo est¨¢ en cuesti¨®n y corre el peligro de convertirse en una burbuja. ¡°El discurso del Ayuntamiento cuando celebra las cifras del crecimiento del turismo, recuerda al de hace diez a?os con el ladrillo, y constata que la ciudad se ha convertido en una mercanc¨ªa¡±, afirm¨® el presidente de la FAVB, Llu¨ªs Rabell.
La segunda conclusi¨®n, lanzada por varias voces y aplaudida por el resto, es que Barcelona ha superado su capacidad de carga tur¨ªstica y que es hora de introducir el concepto de ¡°decrecimiento tur¨ªstico¡±. Hablando en plata, menos turistas. Tres: ojo con ¡°caer en trampas¡± como la denostaci¨®n del turismo low-cost, porque podr¨ªa ocurrir que con la excusa de ordenar barrios como la Barceloneta, acaben convirti¨¦ndose en zonas exclusivas tomadas por hoteles y oferta de lujo.
Otra de las ¡°trampas¡± a las que varios barrios se refirieron es la de las obras de reurbanizaci¨®n que presumen de ensanchar las aceras. Un espacio que a menudo no acaba ocupado por viandantes sino por terrazas. Los asistentes citaron como ejemplo extremo la peatonalizaci¨®n de la calle de Blai, en el Poble Sec, tomada por bares con terraza. Precisamente ayer, los vecinos del Born salieron a merendar en la calle para reivindicar el uso del espacio p¨²blico. Est¨¢n muy molestos por como se ha resuelto ¡ªsin bancos ni ¨¢rboles, por ejemplo¡ª el entorno del antiguo mercado. La asociaci¨®n de vecinos y la Comisi¨®n de Afectados por el Plan Urban¨ªstico del Born temen que el distrito autorice nuevas terrazas.
Los vecinos alertan de la ¡°trampa¡± de las zonas peatonales tomadas por bares con terraza
En l¨ªnea con la extensi¨®n de terrazas o de pisos tur¨ªsticos, la cuarta idea que result¨® de la reuni¨®n del jueves fue que los planes de usos deben tener alcance de toda la ciudad o incluso metropolitano; de lo contrario se produce un efecto mancha de aceite y cuando un barrio como Ciutat Vella ha fijado limitaciones, los problemas se han trasladado al de al lado. La quinta conclusi¨®n, siempre seg¨²n las conclusiones de los asistentes es la opini¨®n un¨¢nime de hay que exigir mecanismos de ¡°participaci¨®n real de los vecinos¡± en las decisiones que les afecten.
¡°La Barceloneta encendi¨® la mecha, luego fue la Sagrada Familia, el Born¡ muchos barrios est¨¢n recibiendo el impacto negativo del turismo en diferentes t¨¦rminos¡±, resume el presidente de la FAVB. Rabell asegura que ¡°los problemas de convivencia con los pisos tur¨ªsticos¡±, legales o ilegales, donde hasta hora se ha centrado el debate, ¡°son la punta del iceberg¡±. Entre las intervenciones del encuentro del jueves, varios representantes del Eixample explicaron que los vecinos del distrito han afrontado hasta ahora el problema de los pisos tur¨ªsticos ¡°en soledad¡± y celebraron crear una red para compartir estrategia.
Desde Gr¨¤cia, Xavier Julve traslad¨® la preocupaci¨®n que hay en la zona por la proliferaci¨®n de albergues, por el futuro del barrio del Camp d¡¯en Grassot ¡ª¡°en el punto de mira, porque est¨¢ entre la Sagrada Familia y el barrio¡±¡ª o el malestar ante ¡°decisiones que se toman desde los despachos, como asignar a Gr¨¤cia la marca La Barcelona creativa o la idea de promover encuentros entre turistas y poblaci¨®n aut¨®ctona¡±.
En el Born, los vecinos bajaron ayer a merendar a la calle para reivindicar el espacio p¨²blico
Tambi¨¦n de albergues habl¨® en representaci¨®n de la asociaci¨®n de la Dreta de l¡¯Eixample, ?lex Broch: ¡°?Es normal que una escalera conviva con un albergue de 98 literas en una planta?¡±, pregunt¨®, y reproch¨® al Ayuntamiento ¡°no hace nada¡± contra los pisos tur¨ªsticos: ¡°Justo en frente de la sede del distrito hay toallas tendidas y cada d¨ªa cambian de color. Solo tienen que asomarse para verlo¡±.
Desde el entorno del Tur¨® Park se expres¨® de nuevo temor a las terrazas y se propuso auditar las inversiones del Ayuntamiento en las reurbanizaciones. Y desde barrios como el Carmel ¡ªpor la presencia de las bater¨ªas antia¨¦reas¡ª o la Font de la Guatlla, el miedo a que la descentralizaci¨®n del turismo les acabe impactando.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
Archivado En
- FAVB
- Barceloneta
- Sagrada Familia
- El Raval
- Arquitectura religiosa
- Actos protesta
- Asociaciones vecinos
- Pisos tur¨ªsticos
- Protestas sociales
- Barcelona
- Turistificaci¨®n
- Catalu?a
- Malestar social
- Alojamientos
- Turismo masivo
- Gentrificaci¨®n
- Hosteler¨ªa
- Econom¨ªa urbana
- Arquitectura
- Ciudades sostenibles
- Pol¨ªtica urban¨ªstica
- Turismo
- Desarrollo urbano
- Desarrollo sostenible
- Problemas sociales