Los ¡®mossos¡¯ del ¡®caso Quintana¡¯ siguen negando haber disparado
La Fiscal¨ªa califica la acci¨®n de los agentes como un delito de lesiones por imprudencia
La instrucci¨®n que investiga la p¨¦rdida de un ojo de Ester Quintana en la huelga general del 14 de noviembre de 2012 ha arrancado su fase final esta ma?ana en el juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 11 de Barcelona. El subinspector y el escopetero de los Mossos d¡¯Esquadra imputados se han ratificado en sus declaraciones anteriores. Los agentes siguen negando que se disparara balas de goma en el lugar y momento en el que se encontraba Quintana. Tanto la Fiscal¨ªa como la propia v¨ªctima no creen en la declaraci¨®n de los agentes de la polic¨ªa auton¨®mica. Los dos se sentar¨¢n en el banquillo de los acusados por un delito de lesiones.
Carla Vall, la letrada de Quintana, se ha mostrado satisfecha ¡°porque la verdad se est¨¢ abriendo camino gracias a la presi¨®n popular y de colectivos como Ojo con tu ojo y Stop balas de goma¡±. El equipo de abogados de Quintana acusar¨¢ a los dos agentes por un delito de lesiones con p¨¦rdida de ¨®rgano principal y utilizaci¨®n de instrumento peligroso. Por su parte, el ministerio p¨²blico realizar¨¢ la misma acusaci¨®n pero consider¨¢ndola una imprudencia, lo que modificar¨ªa considerablemente las penas.
La instrucci¨®n llega a su punto final y solo falta que la acusaci¨®n aporte un informe oftalmol¨®gico que complemente el psicol¨®gico y el biomec¨¢nico que ya han sido presentados. En el documento dos peritos aseguran que la lesi¨®n que presenta Quintana es perfectamente compatible con las heridas provocadas por una bala de goma.
La propia Ester Quintana se ha mostrado satisfecha con el proceso que est¨¢ llevando a cabo la justicia y critic¨® la actitud no solo de los mossos sino de la propia Consejer¨ªa de Interior. ¡°Hace muchos meses que Ramon Espadaler se puso en contacto conmigo, aunque segu¨ªa asegurando que los mossos no dispararon¡±. El caso Quintana ha tenido media docena de versiones por parte de Interior. Espadaler lleg¨® a admitir haber abierto una investigaci¨®n a los agentes implicados por ocultar que hab¨ªan estado cerca del lugar donde se encontraba Quintana. Manifest¨® que se hab¨ªa disparado una salva disuasiva pero neg¨® que fuera con balas de goma.?
La v¨ªctima a¨²n tiene pendientes operaciones de car¨¢cter est¨¦tico, pero ya muestra el ojo destapado con una pr¨®tesis. Quintana se despidi¨® de la prensa con un consuelo y una reivindicaci¨®n: ¡°Gracias a mi caso se han eliminado las balas de goma en Catalu?a, espero que el resto del Estado tome ejemplo¡±.
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