Castedo y la partida de ping-pong

El PP ya tiene decidido que Sonia Castedo no ser¨¢ candidata a la alcald¨ªa de Alicante en las pr¨®ximas elecciones municipales. El partido exige tambi¨¦n, desde hace semanas, que renuncie ya a la vara de mando para no seguir perjudicando a un PP asfixiado por los casos de corrupci¨®n. Entonces, ?por qu¨¦ no se marcha la alcaldesa de Alicante o la expulsa el PP?

Castedo ha conversado en las ¨²ltimas semanas con el presidente regional del PP, Alberto Fabra; con el provincial, Jos¨¦ Ciscar, y con G¨¦nova, donde estuvo la semana pasada. La alcaldesa, que acostumbra a hablar sin pelos en la lengua, asegura que nadie le ha dicho claramente que se vaya. Y Castedo, convencida como est¨¢ de que los recursos que ha interpuesto para anular las grabaciones del caso Brugal acabar¨¢n por exculparla, no est¨¢ dispuesta a inmolarse para que otros respiren mejor.

Con la alcaldesa atrincherada en la plaza de San Crist¨®bal, y ante el estupor y el hartazgo de los ciudadanos, los distintos dirigentes del PP han optado por jugar al ping-pong pas¨¢ndose unos a otros la responsabilidad de actuar para lograr que Sonia Castedo, imputada doblemente en el caso Brugal y el caso Rabassa, abandone el foco medi¨¢tico. Y si fuese posible antes de que el Rey Felipe VI y el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, asistan lunes y martes, respectivamente, al Congreso Nacional de la Empresa Familiar que se celebra en Alicante.

La direcci¨®n nacional del PP pretende que sea Fabra quien resuelva el problema. As¨ª lo verbaliz¨® ayer el portavoz adjunto en el Congreso, Rafael Hernando: ¡°Es en el PP de Valencia donde se tienen que tomar las decisiones¡±. Por su parte, el presidente de la Generalitat mira hacia G¨¦nova, que es quien decide las candidaturas municipales de las capitales de provincia, mientras con el dedo apunta a su vicepresidente y presidente provincial de Alicante inst¨¢ndole a mu?ir la salida de Castedo. Y todo ello en medio de unas l¨ªneas rojas contra la corrupci¨®n que se han convertido en una red que ha atrapado al propio Fabra.

G¨¦nova no considera la imputaci¨®n en casos de corrupci¨®n motivo suficiente para ser expulsado del PP. Tampoco el presidente de la Generalitat, que no ha hecho nada por apartar a la alcaldesa de Novelda, Milagrosa Mart¨ªnez ¡ªprocesada en el caso G¨¹rtel y para quien la Fiscal¨ªa pide 11 a?os de c¨¢rcel¡ª. Fabra justifica su pasividad con el argumento de que su responsabilidad solo alcanza para expulsar a los cargos imputados de la Generalitat, pero no a los de otras instancias pol¨ªticas. Aunque, eso s¨ª, se ha comprometido a que no haya imputados en las pr¨®ximas listas electorales, tanto auton¨®micas como municipales. As¨ª las cosas, el jefe del Consell anunci¨® ayer que ¡°ser¨¢ contundente con Castedo si hay m¨¢s circunstancias¡±. Dicho de otra manera, Fabra no descarta que Castedo cometa un error que permita al PP abrir un expediente disciplinario, como el que se le instruy¨® al exconsejero Rafael Blasco por cuestionar su liderazgo en televisi¨®n, para apartar a Castedo.