¡°Las tiendas conocer¨¢n tu n¨²mero de zapato antes de entrar por la puerta¡±
Antonio Zea dise?¨® el bal¨®n del Mundial 2014 y trata de mejorar la tecnolog¨ªa del f¨²tbol
La revista Nature public¨® el pasado abril un estudio cient¨ªfico sobre las cualidades aerodin¨¢micas del bal¨®n Brazuca de Brasil 2014, dise?ado con solo seis paneles y ni una sola puntada. Innovaci¨®n es un concepto de moda en nuestra sociedad. Aparece donde menos te lo esperas. Antonio Zea (Nueva Jersey, 1972), padre del famoso bal¨®n, es muestra de ello. La pregunta "?c¨®mo ser¨¢ el f¨²tbol del futuro?" es lo que motiva la rutina de este estadounidense de ascendencia espa?ola que lidera el equipo de innovaci¨®n en la sede de Adidas en Nuremberg (Alemania).
Salirse de la norma y de lo establecido va con ¨¦l desde peque?o. Zea se sent¨ªa el ni?o ¡°extra?o¡± de su colegio, porque, al contrario que sus compa?eros, nunca entendi¨® las reglas del f¨²tbol americano y el b¨¦isbol. Su nombre espa?ol lo delataba. A ¨¦l le gustaba el f¨²tbol ingl¨¦s, el soccer, que hab¨ªa mamado de su padre, aficionado al Real Madrid. ¡°El Tango [bal¨®n del Mundial Espa?a '82] era especial para m¨ª. Con ¨¦l jugaba con mi padre¡±, recuerda tras haber visto esas mismas ilusiones en los ni?os que daban toques a sus propias creaciones, sus ¡°ni?os¡±.
Lo m¨¢s importante son las ideas y los fracasos. Llegarnos incluso a plantear si ponemos propulsores
Pero su oficio va mucho m¨¢s all¨¢ de haber dise?ado el Brazuca, ese ¡°bal¨®n inteligente¡± nacido despu¨¦s de dos a?os de pruebas en su laboratorio, con jugadores aficionados y profesionales. Despu¨¦s de las cr¨ªticas del Jabulani de Sud¨¢frica 2010, descubrieron que era bueno que los jugadores los tuvieran en sus pies mucho antes.
La industria robotizada, la digitalizaci¨®n del juego y a lo que los innovadores llaman el Internet de las cosas son sus objetivos ahora. ¡°Veo lo que est¨¢n haciendo la industria aeron¨¢utica y alimentaria, y trato de aplicarlo en el campo. Es mucho m¨¢s que preguntarse c¨®mo creamos zapatillas para que los jugadores lo hagan mejor. Cuestionamos su forma, su material; si estar¨¢ hecha en Asia o en la propia tienda, para que el cliente la tenga en 24 horas¡±. Esas son algunas de las preguntas que lanza al aire Zea y que motivan a su equipo a trabajar.
¡°Muchas de las ideas no llegan a ser, pero eso es lo que hacemos. Plantearnos incluso si ponemos propulsores. No se pueden construir cientos de botas as¨ª o no funciona est¨¦ticamente, pero el fracaso es la clave de la innovaci¨®n¡±, asegura mientras habla emocionado de todo lo que tenga relaci¨®n con el f¨²tbol, como su visita al estadio San Mam¨¦s, por el que pase¨® la semana pasada antes de unas jornadas de Innobasque en Bilbao. ¡°Hay rituales como probarse una bota y doblarla que no perderemos, pero va a cambiar la manera de comprarlas. El zapato estar¨¢ personalizado por gusto, color e incluso talla. Ser¨¢ inteligente y podr¨¢ enviarte al m¨®vil lo que quieres. Antes de entrar a la tienda, sabr¨¢n tu perfil, lo que buscas, tu n¨²mero...¡±
Como el presidente de EEUU John F. Kennedy, cuando anunci¨® que su pa¨ªs pisar¨ªa la luna en una d¨¦cada, el equipo de innovadores de Zea fija una fecha l¨ªmite y construyen hacia ese objetivo. ¡°Estamos con el plan para 2020. Las tecnolog¨ªas y los materiales con los que trabajaremos no existen a¨²n. Si piensas en pasado y presente, te limitas¡±.
La visi¨®n de su equipo va mucho m¨¢s all¨¢, desde c¨®mo adaptar los objetos a un medio ambiente sostenible o a uno urbano, donde el f¨²tbol es completamente diferente ¡°de tres contra tres o cinco contra cinco¡±, hasta que el bal¨®n ¡°hable¡± con la playera o la sudadera y d¨¦ consejos deportivos y estrategias para mejorar. El producto inteligente recopilar¨¢ todo tipo de datos y har¨¢ sus propias estad¨ªsticas. ¡°El juego ser¨¢ m¨¢s t¨¢ctico¡±. Innovar el jogo bonito.
?Cambiar¨¢ esto el concepto del f¨²tbol? ?Habr¨¢ quien diga que esto romper¨¢ con los fundamentos del deporte? ¡°El f¨²tbol es el deporte m¨¢s democr¨¢tico. Rompe barreras. Puedes ser alto, bajo, rico, pobre, e incluso jugar descalzo. Lo llevaremos a m¨¢s sitios, meterlo en la ciudad en las que cada vez vive m¨¢s gente. Los ni?os podr¨¢n jugar en su m¨®vil, adem¨¢s de conectarse con otros que quieran jugarlo. Ahora es m¨¢s social ?Seguiremos haciendo productos u ofreceremos servicios? Replantearse las cosas es innovaci¨®n¡±.
Pero, al final, se reduce a lo mismo de siempre. ¡°Tiene que llamar la atenci¨®n en la estanter¨ªa. Hacemos el producto y contamos una historia. La est¨¦tica y qui¨¦n toca el bal¨®n es b¨¢sico¡±.
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